“Me brindé al ciento por ciento y sin mezquindades”
El ex director deportivo de Huracán de Trelew explicó las razones de su desvinculación y aseguró que fue de común acuerdo con la dirigencia, con la que mantiene una relación inalterable, aunque admitió un degaste. Habló además de su trato con el también ex entrenador Isaías Aberasturi.
“Fue un año maratónico, desde el 13 de enero que comenzamos la gestión hasta ayer (lunes) con un montón de cuestiones que se habían proyectado, algunas que quedaron truncas, aunque lo futbolístico muchas veces no sabe de reglas, o no es todo lineal”, analizó Alfaro en el inicio de la charla con Tiempo Deportivo.
“Contentos, con la sensación del deber cumplido, por cómo pudimos colaborar con un crecimiento sostenido de una institución que más allá que me contrató, es mi casa, porque ahí me desarrollé como persona y jugador. Ahora es dar vuelta la página”, señaló.
Respecto de los motivos de su desvinculación del Globo, destacó que “en resultados deportivos superamos las expectativas porque el proyecto buscaba la proyección de jugadores a otro nivel y hasta el día de hoy tenemos 17 jugadores en el fútbol de AFA, esto es inédito para cualquier club formador. Invitaría a que busquen si otra institución ha podido proyectar tantos futbolistas en una misma temporada como lo hizo Huracán este año, es una cosa increíble”.
“Campeonatos más, campeonatos menos, eso es algo efímero, pero también lo festejamos porque sería ridículo negar que uno se alegra con los triunfos y sufre las derrotas. Salimos campeones con diferentes categorías y ayer (lunes) nos confirmaron que la Sub 15 nuestra es campeona patagónica, después de haber vencido a Belgrano de Esquel. Esa misma categoría salió campeona de la Liga, la Séptima fue bicampeona, la Reserva ganó el título cortando una larga hegemonía de Moreno, la 2011 había sido campeona del Apertura. Es producto del trabajo mancomunado, en cualquier nivel es difícil salir campeón”, ponderó.
Más puntual, precisó que “se fueron dando situaciones, por ahí cambió el escenario y de común acuerdo tomamos la decisión de no continuar por el bien del proyecto de Huracán y de también el del Federico Paoloni y Gerardo Alfaro, sería necio negar en que pensé en él y en mí, no soy hipócrita”.
“Yo era el director deportivo y Paoloni era el coordinador del área física-motora, toda la parte física la desarrollaba Federico”, recordó.
Consultado sobre si su alejamiento también había provocado la ida del entrenador Isaías Aberasturi, aclaró que “eso fue una decisión de los dirigentes, ahí ya no tuve participación y al no tenerla entendí que ya no tenía nada más que hacer porque si era el director deportivo debía tener voz y voto en esa decisión. Pero ellos lo quisieron manejar por su lado y lo respeté”.
“Con Isaías tuve una convivencia hasta cierto momento y después fue la dirigencia la que empezó a manejar la estructura de Primera división”, remarcó.
“Hubo un montón de situaciones en la que respetamos sus decisiones a rajatabla, colaboramos en el armado del plantel, aunque al equipo lo armaba él. Pero hace un par de meses la dirigencia empezó a tomar esas decisiones y de hecho el mismo presidente decidió cortar el vínculo con Isaías”, recalcó.
“La relación con Aberasturi siempre fue correcta, soy una persona que dice las cosas de frente, de lo único que me puedo llegar a arrepentir es de una charla en la que había otros actores y debió haber sido más en privado. Lo respeté hasta último momento, fuimos buenos compañeros de trabajo, colaboré en muchos momentos difíciles del proceso, no sólo en lo deportivo sino en cuestiones que hacían dificultosa su tarea en el club por otras situaciones laborales, y además dándole la derecha a un plantel que planteaba necesidades”, argumentó Alfaro.
“Anoche cuando volví de la cena con los dirigentes de Huracán me acosté con mucha tranquilidad porque me pude haber equivocado en algo o no, pero me brindé al cien por ciento y sin mezquindades y pensando únicamente en el escudo y en el proyecto. Y es la tranquilidad que me enseñaron mis viejos, no tengo otra forma de manejarme”, aseveró.
“Yo traje hasta mi familia acá Trelew, si hubiera sido algo improvisado o pasajero, no lo hubiera hecho tanto movimiento, no estoy a la vuelta de la esquina. Tenía un compromiso de palabra, sino de acción, aunque el día a día te va llevando de un lado o por el otro. Pero la intención primaria era quedarme en la zona por mucho tiempo”, sostuvo.
Sobresu futuro, confirmó que “me voy a ser el coordinador de Sarmiento de Junín, desde Reserva hasta Infantiles, tomaré la posta nuevamente, en realidad ya estaba haciendo un trabajo en conjunto desde mitad de año, me llamó el presidente de Sarmiento y tenía la autorización de la Comisión Directiva de Huracán, pero con base en Trelew, viajaba una vez por mes armando y organizando los equipos de trabajo, y ahora directamente me radicaré en Junín”.
Al hablar de cómo quedó la relación con la dirigencia de Huracán, refrendó: “quedó muy bien, lo importante es que nosotros tuvimos la posibilidad de expresarnos y más allá de las diferencias en el manejo de situaciones, nunca se perdió el respeto y se entendió que tal vez no era el momento para continuar el proyecto por varias cuestiones del día a día. Pero es imposible cortar un vínculo con los dirigentes, no hay chances, no me cabe en la cabeza cortarles el teléfono”, sentenció Alfaro.
“Fue un año maratónico, desde el 13 de enero que comenzamos la gestión hasta ayer (lunes) con un montón de cuestiones que se habían proyectado, algunas que quedaron truncas, aunque lo futbolístico muchas veces no sabe de reglas, o no es todo lineal”, analizó Alfaro en el inicio de la charla con Tiempo Deportivo.
“Contentos, con la sensación del deber cumplido, por cómo pudimos colaborar con un crecimiento sostenido de una institución que más allá que me contrató, es mi casa, porque ahí me desarrollé como persona y jugador. Ahora es dar vuelta la página”, señaló.
Respecto de los motivos de su desvinculación del Globo, destacó que “en resultados deportivos superamos las expectativas porque el proyecto buscaba la proyección de jugadores a otro nivel y hasta el día de hoy tenemos 17 jugadores en el fútbol de AFA, esto es inédito para cualquier club formador. Invitaría a que busquen si otra institución ha podido proyectar tantos futbolistas en una misma temporada como lo hizo Huracán este año, es una cosa increíble”.
“Campeonatos más, campeonatos menos, eso es algo efímero, pero también lo festejamos porque sería ridículo negar que uno se alegra con los triunfos y sufre las derrotas. Salimos campeones con diferentes categorías y ayer (lunes) nos confirmaron que la Sub 15 nuestra es campeona patagónica, después de haber vencido a Belgrano de Esquel. Esa misma categoría salió campeona de la Liga, la Séptima fue bicampeona, la Reserva ganó el título cortando una larga hegemonía de Moreno, la 2011 había sido campeona del Apertura. Es producto del trabajo mancomunado, en cualquier nivel es difícil salir campeón”, ponderó.
Más puntual, precisó que “se fueron dando situaciones, por ahí cambió el escenario y de común acuerdo tomamos la decisión de no continuar por el bien del proyecto de Huracán y de también el del Federico Paoloni y Gerardo Alfaro, sería necio negar en que pensé en él y en mí, no soy hipócrita”.
“Yo era el director deportivo y Paoloni era el coordinador del área física-motora, toda la parte física la desarrollaba Federico”, recordó.
Consultado sobre si su alejamiento también había provocado la ida del entrenador Isaías Aberasturi, aclaró que “eso fue una decisión de los dirigentes, ahí ya no tuve participación y al no tenerla entendí que ya no tenía nada más que hacer porque si era el director deportivo debía tener voz y voto en esa decisión. Pero ellos lo quisieron manejar por su lado y lo respeté”.
“Con Isaías tuve una convivencia hasta cierto momento y después fue la dirigencia la que empezó a manejar la estructura de Primera división”, remarcó.
“Hubo un montón de situaciones en la que respetamos sus decisiones a rajatabla, colaboramos en el armado del plantel, aunque al equipo lo armaba él. Pero hace un par de meses la dirigencia empezó a tomar esas decisiones y de hecho el mismo presidente decidió cortar el vínculo con Isaías”, recalcó.
“La relación con Aberasturi siempre fue correcta, soy una persona que dice las cosas de frente, de lo único que me puedo llegar a arrepentir es de una charla en la que había otros actores y debió haber sido más en privado. Lo respeté hasta último momento, fuimos buenos compañeros de trabajo, colaboré en muchos momentos difíciles del proceso, no sólo en lo deportivo sino en cuestiones que hacían dificultosa su tarea en el club por otras situaciones laborales, y además dándole la derecha a un plantel que planteaba necesidades”, argumentó Alfaro.
“Anoche cuando volví de la cena con los dirigentes de Huracán me acosté con mucha tranquilidad porque me pude haber equivocado en algo o no, pero me brindé al cien por ciento y sin mezquindades y pensando únicamente en el escudo y en el proyecto. Y es la tranquilidad que me enseñaron mis viejos, no tengo otra forma de manejarme”, aseveró.
“Yo traje hasta mi familia acá Trelew, si hubiera sido algo improvisado o pasajero, no lo hubiera hecho tanto movimiento, no estoy a la vuelta de la esquina. Tenía un compromiso de palabra, sino de acción, aunque el día a día te va llevando de un lado o por el otro. Pero la intención primaria era quedarme en la zona por mucho tiempo”, sostuvo.
Sobresu futuro, confirmó que “me voy a ser el coordinador de Sarmiento de Junín, desde Reserva hasta Infantiles, tomaré la posta nuevamente, en realidad ya estaba haciendo un trabajo en conjunto desde mitad de año, me llamó el presidente de Sarmiento y tenía la autorización de la Comisión Directiva de Huracán, pero con base en Trelew, viajaba una vez por mes armando y organizando los equipos de trabajo, y ahora directamente me radicaré en Junín”.
Al hablar de cómo quedó la relación con la dirigencia de Huracán, refrendó: “quedó muy bien, lo importante es que nosotros tuvimos la posibilidad de expresarnos y más allá de las diferencias en el manejo de situaciones, nunca se perdió el respeto y se entendió que tal vez no era el momento para continuar el proyecto por varias cuestiones del día a día. Pero es imposible cortar un vínculo con los dirigentes, no hay chances, no me cabe en la cabeza cortarles el teléfono”, sentenció Alfaro.