Declaran alerta sanitaria por un brote de sarna ovina en Chubut

El SENASA declaró la alerta sanitaria en los departamentos de Gastre, Telsen, Cushamen, Languineo, Paso de Indios, Mártires y Gaiman. Buscan frenar el brote para que no llegue a zonas libres de la parasitosis.

11 DIC 2025 - 8:00 | Actualizado 11 DIC 2025 - 8:04

Con el objetivo de contener focos emergentes de sarna ovina en la provincia de Chubut y evitar su propagación hacia regiones libres, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) declaró la alerta sanitaria en los departamentos de Gastre, Telsen, Cushamen, Languineo, Paso de Indios, Mártires y Gaiman.

La medida, oficializada por la Resolución SENASA 939/2025 y publicada en el Boletín Oficial, establece que se deberán adoptar y/o fortalecer todas las tareas de vigilancia, prevención, control y erradicación de esta parasitosis (causada por el ácaro Psoroptes ovis), ante un incremento de focos registrados en la provincia en los últimos años.

Así, luego del trabajo y los requerimientos elevados por las Comisión Provincial de Sanidad Animal (COPROSA) de Chubut —con participación de productores y autoridades provinciales—, el organismo sanitario nacional dispuso la declaración de alerta, que incluye las acciones de notificación inmediata para la detección temprana y los procedimientos sanitarios para la atención de eventuales brotes de sarna ovina.

Entre las principales definiciones, se indicó que ante hallazgos de la enfermedad se deberá denunciar de forma obligatoria e inmediata al SENASA y realizar el tratamiento antisárnico sobre toda la majada del predio afectado, el cual se llevará a cabo por veterinarios acreditados o personal capacitado de la COPROSA de Chubut y será supervisado por un profesional del servicio sanitario.

Asimismo, la nueva normativa incorpora medidas protectivas para los movimientos de ovinos y sus productos/subproductos procedentes de los departamentos declarados en alerta sanitaria, con destino a zonas libres y que no se encuentren en alerta.

Particularmente, para la autorización de traslados de ovinos distintos a faena, se estableció que se deberá: -Cumplir con un tratamiento antisárnico de la totalidad de los animales. El mismo consiste en realizar 2 baños por inmersión —con un intervalo mínimo de 10 a 12 días—, efectuando el segundo dentro de los 7 días previos a efectuar el traslado. -Presentar el Certificado de Inspección Sanitaria Oficial, que acompañará al Documento de Tránsito electrónico (DT-e). -Realizar un aislamiento cuarentenario de 24 días en el establecimiento de destino.

En cuanto a los movimientos de ovinos a faena inmediata, aquellos que tengan como destino un frigorífico con tránsito federal sólo deberán contar con la autorización oficial del SENASA. Sin embargo, para los traslados hacia otros establecimientos faenadores (sin tránsito federal) se deberá contar con el Certificado de Inspección Sanitaria Oficial o el Certificado emitido por la COPROSA chubutense.

La nueva normativa no solo busca disminuir los focos en Chubut, sino también evitar que la enfermedad se disperse a la provincia de Santa Cruz —declarada libre en 2023—, ya que su propagación implica un riesgo tanto para la salud animal como para la continuidad de las actividades productivas y comerciales de la región.

Sobre la enfermedad

La sarna ovina es una de las parasitosis de mayor impacto en la ganadería de la Patagonia. Se transmite principalmente por contacto directo entre animales y presenta mayor incidencia en otoño e invierno. Sus signos más frecuentes incluyen caída de lana, formación de costras extensas y prurito intenso, que suele provocar conductas anormales de rascado o molestia. Por ello, es clave realizar revisaciones periódicas de las majadas.

La observación inicial debe hacerse a distancia, desde el potrero o corral, y ante la detección de comportamientos inusuales se debe inspeccionar individualmente a los animales. En ovinos infestados es posible detectar el “granito”, una vesícula generada por los ácaros que tiñe la piel de un tono verdoso-azulado.

En cuadros avanzados pueden aparecer áreas sin lana, costras amarillentas y piel “acartonada” (endurecida) en zonas sensibles como fosas nasales, región perianal y espacios interdigitales.

Ante la sospecha o confirmación de la enfermedad, se debe notificar de inmediato al SENASA para coordinar el tratamiento del 100% de los animales, utilizando productos autorizados. Dado que los inyectables no garantizan eficacia plena, el baño por inmersión —supervisado por un veterinario oficial— es el método más efectivo para su control y erradicación.#

11 DIC 2025 - 8:00

Con el objetivo de contener focos emergentes de sarna ovina en la provincia de Chubut y evitar su propagación hacia regiones libres, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) declaró la alerta sanitaria en los departamentos de Gastre, Telsen, Cushamen, Languineo, Paso de Indios, Mártires y Gaiman.

La medida, oficializada por la Resolución SENASA 939/2025 y publicada en el Boletín Oficial, establece que se deberán adoptar y/o fortalecer todas las tareas de vigilancia, prevención, control y erradicación de esta parasitosis (causada por el ácaro Psoroptes ovis), ante un incremento de focos registrados en la provincia en los últimos años.

Así, luego del trabajo y los requerimientos elevados por las Comisión Provincial de Sanidad Animal (COPROSA) de Chubut —con participación de productores y autoridades provinciales—, el organismo sanitario nacional dispuso la declaración de alerta, que incluye las acciones de notificación inmediata para la detección temprana y los procedimientos sanitarios para la atención de eventuales brotes de sarna ovina.

Entre las principales definiciones, se indicó que ante hallazgos de la enfermedad se deberá denunciar de forma obligatoria e inmediata al SENASA y realizar el tratamiento antisárnico sobre toda la majada del predio afectado, el cual se llevará a cabo por veterinarios acreditados o personal capacitado de la COPROSA de Chubut y será supervisado por un profesional del servicio sanitario.

Asimismo, la nueva normativa incorpora medidas protectivas para los movimientos de ovinos y sus productos/subproductos procedentes de los departamentos declarados en alerta sanitaria, con destino a zonas libres y que no se encuentren en alerta.

Particularmente, para la autorización de traslados de ovinos distintos a faena, se estableció que se deberá: -Cumplir con un tratamiento antisárnico de la totalidad de los animales. El mismo consiste en realizar 2 baños por inmersión —con un intervalo mínimo de 10 a 12 días—, efectuando el segundo dentro de los 7 días previos a efectuar el traslado. -Presentar el Certificado de Inspección Sanitaria Oficial, que acompañará al Documento de Tránsito electrónico (DT-e). -Realizar un aislamiento cuarentenario de 24 días en el establecimiento de destino.

En cuanto a los movimientos de ovinos a faena inmediata, aquellos que tengan como destino un frigorífico con tránsito federal sólo deberán contar con la autorización oficial del SENASA. Sin embargo, para los traslados hacia otros establecimientos faenadores (sin tránsito federal) se deberá contar con el Certificado de Inspección Sanitaria Oficial o el Certificado emitido por la COPROSA chubutense.

La nueva normativa no solo busca disminuir los focos en Chubut, sino también evitar que la enfermedad se disperse a la provincia de Santa Cruz —declarada libre en 2023—, ya que su propagación implica un riesgo tanto para la salud animal como para la continuidad de las actividades productivas y comerciales de la región.

Sobre la enfermedad

La sarna ovina es una de las parasitosis de mayor impacto en la ganadería de la Patagonia. Se transmite principalmente por contacto directo entre animales y presenta mayor incidencia en otoño e invierno. Sus signos más frecuentes incluyen caída de lana, formación de costras extensas y prurito intenso, que suele provocar conductas anormales de rascado o molestia. Por ello, es clave realizar revisaciones periódicas de las majadas.

La observación inicial debe hacerse a distancia, desde el potrero o corral, y ante la detección de comportamientos inusuales se debe inspeccionar individualmente a los animales. En ovinos infestados es posible detectar el “granito”, una vesícula generada por los ácaros que tiñe la piel de un tono verdoso-azulado.

En cuadros avanzados pueden aparecer áreas sin lana, costras amarillentas y piel “acartonada” (endurecida) en zonas sensibles como fosas nasales, región perianal y espacios interdigitales.

Ante la sospecha o confirmación de la enfermedad, se debe notificar de inmediato al SENASA para coordinar el tratamiento del 100% de los animales, utilizando productos autorizados. Dado que los inyectables no garantizan eficacia plena, el baño por inmersión —supervisado por un veterinario oficial— es el método más efectivo para su control y erradicación.#