La emoción de un fotógrafo de fauna en Malvinas

El fotógrafo trelewense Pablo Bontempo visitó las Islas Malvinas para conocer su fauna y tuvo la oportunidad de ver de cerca lo que dejó la guerra. “No había forma de no emocionarse al ver las trincheras", dijo en Jornada Radio.

12 ABR 2025 - 14:43 | Actualizado 12 ABR 2025 - 15:48

Viajar a las Islas Malvinas es siempre emotivo. El trelewense Pablo Bontempo, tornero de profesión y apasionado de la fotografía de naturaleza, no pudo evitar emocionarse en su viaje. Su pasión lo llevó a conocer las islas con su cámara para ver de cerca la fauna del lugar y un poco de la historia de la guerra.

En diálogo con el programa La Linterna, por Jornada Radio, Pablo narró sus inicios en la fotografía. “Mi papá sacaba muchas fotos cuando íbamos de vacaciones, le gustaba un paisaje y nos hacía posar a todos. De grande pude empezar a disfrutar de la fotografía”.

Pasar de la fotografía analógica a la digital fue impactante para él. “La primera vez que compré una cámara saqué 300 fotos en 15 días, en Ushuaia. Cuando llegó lo digital, si bien la calidad no era la misma, uno tenía la libertad de sacar muchas fotos”.

Pablo prefiere la fotografía de fauna y naturaleza. “Disfruto mucho de la naturaleza. Con la foto lo que uno logra es bajar los decibeles y estar tranquilo”.

Viaje a las Islas Malvinas

Su viaje a Malvinas nació por una inquietud. “Fue por la fauna. Empecé a seguir un fotógrafo que hace salidas, surgió el viaje a Malvinas y me anoté”.

Sin saber inglés, se internó en las islas por una semana y conoció parte de su geografía. “En todos lados había alguien que hablaba español. Tenía cierto nerviosismo porque uno entra en una base militar. El trato fue cordial en todo momento”.

Estuvo en Isla Soledad, donde conoció los atractivos naturales. “Fuimos un par de día a zona de guerra donde había restos de trincheras. Luego fuimos a pingüineras para ver fauna. A algunas playas no pudimos ir porque habían encontrado minas”.

“Cumplí mi objetivo”, dijo luego de conocer una gran variedad de pingüinos. Además pudo ver de cerca el lado histórico de la guerra y recorrer el cementerio de Darwin, donde están sepultados los combatientes argentinos que murieron en la guerra de 1982.

“Encontré cierta parte emocionante donde tuvo lugar la guerra”, contó. “No había forma de no emocionarse al ver las trincheras. Fuimos con un excombatiente, él contaba historias y era fuerte”.

12 ABR 2025 - 14:43

Viajar a las Islas Malvinas es siempre emotivo. El trelewense Pablo Bontempo, tornero de profesión y apasionado de la fotografía de naturaleza, no pudo evitar emocionarse en su viaje. Su pasión lo llevó a conocer las islas con su cámara para ver de cerca la fauna del lugar y un poco de la historia de la guerra.

En diálogo con el programa La Linterna, por Jornada Radio, Pablo narró sus inicios en la fotografía. “Mi papá sacaba muchas fotos cuando íbamos de vacaciones, le gustaba un paisaje y nos hacía posar a todos. De grande pude empezar a disfrutar de la fotografía”.

Pasar de la fotografía analógica a la digital fue impactante para él. “La primera vez que compré una cámara saqué 300 fotos en 15 días, en Ushuaia. Cuando llegó lo digital, si bien la calidad no era la misma, uno tenía la libertad de sacar muchas fotos”.

Pablo prefiere la fotografía de fauna y naturaleza. “Disfruto mucho de la naturaleza. Con la foto lo que uno logra es bajar los decibeles y estar tranquilo”.

Viaje a las Islas Malvinas

Su viaje a Malvinas nació por una inquietud. “Fue por la fauna. Empecé a seguir un fotógrafo que hace salidas, surgió el viaje a Malvinas y me anoté”.

Sin saber inglés, se internó en las islas por una semana y conoció parte de su geografía. “En todos lados había alguien que hablaba español. Tenía cierto nerviosismo porque uno entra en una base militar. El trato fue cordial en todo momento”.

Estuvo en Isla Soledad, donde conoció los atractivos naturales. “Fuimos un par de día a zona de guerra donde había restos de trincheras. Luego fuimos a pingüineras para ver fauna. A algunas playas no pudimos ir porque habían encontrado minas”.

“Cumplí mi objetivo”, dijo luego de conocer una gran variedad de pingüinos. Además pudo ver de cerca el lado histórico de la guerra y recorrer el cementerio de Darwin, donde están sepultados los combatientes argentinos que murieron en la guerra de 1982.

“Encontré cierta parte emocionante donde tuvo lugar la guerra”, contó. “No había forma de no emocionarse al ver las trincheras. Fuimos con un excombatiente, él contaba historias y era fuerte”.