El semillero de fútbol femenino y su rol en las infancias

La libertad de elección en las infancias forjan el camino de cada persona. Hoy, las nenas y adolescentes tienen la posibilidad de optar por el fútbol como un primer deporte. Esto no sucedía años atrás, que debían practicarlo con varones o directamente optar por otros deportes y disciplinas. Las familias que acompañan estas elecciones, también juegan un rol fundamental en estas "semillas".

El semillero femenino del CEC - Fotografía Sergio Esparza / JORNADA
16 MAR 2025 - 11:35 | Actualizado 16 MAR 2025 - 15:11

Por Daniela Moraga / Redacción Jornada

Cada año aumenta la demanda de las niñas del Valle por el fútbol; a menos de un mes de comenzar con la pretemporada 2025, estas infancias no se pierden una clase. Desde el club mercantil de Trelew, apuntan a llenar todas las categorías para competir, pero reconocen que es algo que “cuesta” todavía.

Las jugadoras infantiles “no abundan todavía, como en la rama masculina, así que vamos de a poquito, pero tenemos las mejores expectativas para comenzar. Las edades que más nos cuesta conseguir nenas es en edades de 14, 15 y 16 años, porque a tienen su grupito de amigas en un club, entonces prefieren quedarse juntas”,adelantó a Jornada la profesora de Educación Física, Rocío Pérez.

Hace poco menos de una década comenzó el semillero femenino en el Valle y todos los años es “un desafío nuevo” pero lo bueno de esto es que “todos los años tenemos más y más chicas que se suman, que se animan a jugar al fútbol desde más chiquitas: a los 4, 5 y 6 años ya saben que quieren jugar y eso antes no pasaba. Lo mismo sucede con edades más grandes, incluso con primera división, que varios clubes de la zona están participando”, es por eso que “no tenemos nada que envidiarle al fútbol masculino”, sintetizó Pérez que hace ya varios años se dedica a formar infancias.


El semillero (infanto-juvenil) femenino del CEC entrena los días martes y jueves a partir de las 5:30, hasta las 19 con edades formativas que abarca las sub 8, sub 10 y sub 12. Luego de 19 a 20:30 con sub 14 y sub 16, que suman un día más, los viernes.

A su turno, el Director Técnico Alejandro Cáceres, reconoció que es la primera vez que se involucra con el fútbol femenino: “Es algo nuevo para mí, pero la idea básica es la enseñanza del deporte más allá del género”. “A las más chicas les enseñamos valores, mientras aprenden jugando, ya con las chicas más grandes pasamos a lo técnico táctico, con la esperanza que en el día de mañana tengan la posibilidad de jugar en primera, ya sea en clubes de la zona o en otra parte del país o el mundo”, manifestó el DT Cáceres.

Y prosiguió: “Que las chicas vean a otras jóvenes que salen de clubes de Trelew, jugando en Chile como pasó hace poco, eso motiva y anima a las más chiquitas. Y en lo personal, ver el crecimiento del fútbol femenino en la zona me motivó a venir y comenzar con ellas”, dijo Cáceres, luego de su paso como profe por clubes de Buenos Aires como Deportivo Riestra y Español, siempre con divisiones inferiores masculinas.

Por último, el profesor de Educación Física, Franco Vidal, coincidió con su par Cáceres ya que también está incursionando en el fútbol femenino. “Tenia ganas de sumar esta experiencia y sobre todo en este club que esta iniciando con el fútbol femenino. Es una propuesta innovadora que esta creciendo y es fundamental que las nenas entrenen y jueguen con sus pares”.

Reconoció que es una realidad que las nenas hasta hace poco se frustraban porque comenzaban fútbol, pero debían hacerlo con nenes, con otras condiciones físicas, con un equipo ya conformado y en muchos casos, sin tener la posibilidad de competir. “Al trabajar con nenes a veces pasaba que las nenas se sumaban y las condiciones físicas eran diferentes o al no estar con otras nenas, era más difícil la integración al grupo y eso acá cambia porque son todas nenas con condiciones físicas similares”, finalizó Vidal.

Vidal, Pérez y Cáceres, los profes del semillero femenino del CEC - Fotografía Sergio Esparza / JORNADA


Cabe destacar también, el rol muchas veces silencioso pero fundamental de las familias que acompañan a estas infancias en sus elecciones. Cientos son los casos en que nenas comienzan con otros deportes o disciplinas por considerarse "más apropiados" para su género. Y luego llegan al fútbol en edades más avanzadas, cuando tienen en claro lo que quieren hacer.

No hay que negar que en la actualidad, también hay infancias que quieren realizar fútbol pero que los adultos a cargo no se lo permiten, justamente por considerar que "no es apropiado".

Si bien el camino está un poco "allanado" para las pequeñas futbolistas, aún falta para lograr una plena igualdad, con sus pares, varones. Ese día, se defenderá el fútbol que empieza con f y la alegría como un principio y se lo escudará de las pesadillas, de los neutrales, de las dulces (y no tan dulces) infamias y los grandes diagnósticos. Esa jornada; se defenderá la alegría como una bandera, de la melancolía, de los ingenuos y de los canallas, que por décadas invisibilizaron el fútbol femenino.

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El semillero femenino del CEC - Fotografía Sergio Esparza / JORNADA
16 MAR 2025 - 11:35

Por Daniela Moraga / Redacción Jornada

Cada año aumenta la demanda de las niñas del Valle por el fútbol; a menos de un mes de comenzar con la pretemporada 2025, estas infancias no se pierden una clase. Desde el club mercantil de Trelew, apuntan a llenar todas las categorías para competir, pero reconocen que es algo que “cuesta” todavía.

Las jugadoras infantiles “no abundan todavía, como en la rama masculina, así que vamos de a poquito, pero tenemos las mejores expectativas para comenzar. Las edades que más nos cuesta conseguir nenas es en edades de 14, 15 y 16 años, porque a tienen su grupito de amigas en un club, entonces prefieren quedarse juntas”,adelantó a Jornada la profesora de Educación Física, Rocío Pérez.

Hace poco menos de una década comenzó el semillero femenino en el Valle y todos los años es “un desafío nuevo” pero lo bueno de esto es que “todos los años tenemos más y más chicas que se suman, que se animan a jugar al fútbol desde más chiquitas: a los 4, 5 y 6 años ya saben que quieren jugar y eso antes no pasaba. Lo mismo sucede con edades más grandes, incluso con primera división, que varios clubes de la zona están participando”, es por eso que “no tenemos nada que envidiarle al fútbol masculino”, sintetizó Pérez que hace ya varios años se dedica a formar infancias.


El semillero (infanto-juvenil) femenino del CEC entrena los días martes y jueves a partir de las 5:30, hasta las 19 con edades formativas que abarca las sub 8, sub 10 y sub 12. Luego de 19 a 20:30 con sub 14 y sub 16, que suman un día más, los viernes.

A su turno, el Director Técnico Alejandro Cáceres, reconoció que es la primera vez que se involucra con el fútbol femenino: “Es algo nuevo para mí, pero la idea básica es la enseñanza del deporte más allá del género”. “A las más chicas les enseñamos valores, mientras aprenden jugando, ya con las chicas más grandes pasamos a lo técnico táctico, con la esperanza que en el día de mañana tengan la posibilidad de jugar en primera, ya sea en clubes de la zona o en otra parte del país o el mundo”, manifestó el DT Cáceres.

Y prosiguió: “Que las chicas vean a otras jóvenes que salen de clubes de Trelew, jugando en Chile como pasó hace poco, eso motiva y anima a las más chiquitas. Y en lo personal, ver el crecimiento del fútbol femenino en la zona me motivó a venir y comenzar con ellas”, dijo Cáceres, luego de su paso como profe por clubes de Buenos Aires como Deportivo Riestra y Español, siempre con divisiones inferiores masculinas.

Por último, el profesor de Educación Física, Franco Vidal, coincidió con su par Cáceres ya que también está incursionando en el fútbol femenino. “Tenia ganas de sumar esta experiencia y sobre todo en este club que esta iniciando con el fútbol femenino. Es una propuesta innovadora que esta creciendo y es fundamental que las nenas entrenen y jueguen con sus pares”.

Reconoció que es una realidad que las nenas hasta hace poco se frustraban porque comenzaban fútbol, pero debían hacerlo con nenes, con otras condiciones físicas, con un equipo ya conformado y en muchos casos, sin tener la posibilidad de competir. “Al trabajar con nenes a veces pasaba que las nenas se sumaban y las condiciones físicas eran diferentes o al no estar con otras nenas, era más difícil la integración al grupo y eso acá cambia porque son todas nenas con condiciones físicas similares”, finalizó Vidal.

Vidal, Pérez y Cáceres, los profes del semillero femenino del CEC - Fotografía Sergio Esparza / JORNADA


Cabe destacar también, el rol muchas veces silencioso pero fundamental de las familias que acompañan a estas infancias en sus elecciones. Cientos son los casos en que nenas comienzan con otros deportes o disciplinas por considerarse "más apropiados" para su género. Y luego llegan al fútbol en edades más avanzadas, cuando tienen en claro lo que quieren hacer.

No hay que negar que en la actualidad, también hay infancias que quieren realizar fútbol pero que los adultos a cargo no se lo permiten, justamente por considerar que "no es apropiado".

Si bien el camino está un poco "allanado" para las pequeñas futbolistas, aún falta para lograr una plena igualdad, con sus pares, varones. Ese día, se defenderá el fútbol que empieza con f y la alegría como un principio y se lo escudará de las pesadillas, de los neutrales, de las dulces (y no tan dulces) infamias y los grandes diagnósticos. Esa jornada; se defenderá la alegría como una bandera, de la melancolía, de los ingenuos y de los canallas, que por décadas invisibilizaron el fútbol femenino.