A orillas del Lago Cholila y la naciente del río Carenleufú reabrió sus puertas el servicio de El Pedregoso y Casa Amarilla, dos imponentes hosterías de primerísimo nivel de servicios y la región homónima de la cordillera chubutense.
La refacción de una de las hosterías y la puesta en servicio de la nueva fueron presentados este inicio de mes con un almuerzo que contó con sus administrados e invitados especiales a conocer esta nueva oportunidad destinada al turismo.
Sus cálidos administradores (Marisy y Pablo) dieron cuenta de los trabajos realizados en los últimos dos años para un servicio que cuenta con una capacidad para 30 huéspedes en ambas construcciones más una cabaña de lujo con vista al majestuoso lago cordillerano.
Además de la construcción y la calidad de primer nivel de las instalaciones, se suma la construcción de un hangar para seis aviones por cuanto se acondicionó una pista que utilizó durante años su antiguo propietario para deleite propio y pilotos de todo el mundo que eligieron ese destino.
“Dejar casi mil metros de un suelo de césped apto para el aterrizaje fue uno de los desafíos, por cuenta es un destino elegido por pilotos y sus familias para recorrer esta cordillera plagada de bellezas vistas desde el aire” señaló Pablo.
A tan interesante variable, única de sus características en la provincia, se suma el atractivo para los pescadores, que llegan de todos lados para intentar la práctica deportiva.
Marisy indicó que “al paisaje único de lagos, ríos y montañas le ponemos un servicio de calidad en el hospedaje y la gastronomía, donde se brindan los mejores sabores de platos típicos”.
Amplias habitaciones, comedor, salas de esparcimiento, lectura y hasta juegos permiten completar un panorama único con ventanales que permiten disfrutar de los paisajes en toda época del año.
Guías de pesca, empresarios, pilotos, operadores turísticos, familiares y amigos compartieron un almuerzo criollo y recorridos de las instalaciones que generan una nueva alternativa turística para Chubut en un rincón de ensueño.
Desde noviembre ya está en marcha la iniciativa y ya comenzaron a recibir las primeras reservas para disfrutar de pesca, vuelos y paisajes únicos.
A orillas del Lago Cholila y la naciente del río Carenleufú reabrió sus puertas el servicio de El Pedregoso y Casa Amarilla, dos imponentes hosterías de primerísimo nivel de servicios y la región homónima de la cordillera chubutense.
La refacción de una de las hosterías y la puesta en servicio de la nueva fueron presentados este inicio de mes con un almuerzo que contó con sus administrados e invitados especiales a conocer esta nueva oportunidad destinada al turismo.
Sus cálidos administradores (Marisy y Pablo) dieron cuenta de los trabajos realizados en los últimos dos años para un servicio que cuenta con una capacidad para 30 huéspedes en ambas construcciones más una cabaña de lujo con vista al majestuoso lago cordillerano.
Además de la construcción y la calidad de primer nivel de las instalaciones, se suma la construcción de un hangar para seis aviones por cuanto se acondicionó una pista que utilizó durante años su antiguo propietario para deleite propio y pilotos de todo el mundo que eligieron ese destino.
“Dejar casi mil metros de un suelo de césped apto para el aterrizaje fue uno de los desafíos, por cuenta es un destino elegido por pilotos y sus familias para recorrer esta cordillera plagada de bellezas vistas desde el aire” señaló Pablo.
A tan interesante variable, única de sus características en la provincia, se suma el atractivo para los pescadores, que llegan de todos lados para intentar la práctica deportiva.
Marisy indicó que “al paisaje único de lagos, ríos y montañas le ponemos un servicio de calidad en el hospedaje y la gastronomía, donde se brindan los mejores sabores de platos típicos”.
Amplias habitaciones, comedor, salas de esparcimiento, lectura y hasta juegos permiten completar un panorama único con ventanales que permiten disfrutar de los paisajes en toda época del año.
Guías de pesca, empresarios, pilotos, operadores turísticos, familiares y amigos compartieron un almuerzo criollo y recorridos de las instalaciones que generan una nueva alternativa turística para Chubut en un rincón de ensueño.
Desde noviembre ya está en marcha la iniciativa y ya comenzaron a recibir las primeras reservas para disfrutar de pesca, vuelos y paisajes únicos.