Rescate del piloto: “Teníamos bastante fe de que iba a sobrevivir”

El piloto Daniel Roy Wegrzynvolabaa la par de Ezequiel “Queque” Parodi cuando ocurrió el accidente que terminó con la aeronave de Parodi realizando un aterrizaje de emergencia sobre un lago congelado cerca de Lago Puelo, en cerro Plataforma.

Sobre el rescate, Wegrzyn dijo en diálogo con Cadena Tiempo que “era un viaje de trabajo, él iba a instalar unas antenas de internet a un campo para unos pobladores que estaban incomunicados. Estábamos apurados porque se venía una ola polar”.

Algunas de las circunstancias en torno al accidente se desconocen. “No es muy claro lo que pasó”, dijo Daniel Wegrzyn. Lo relató de esta manera:

“Veníamos volando juntos y yo le sugerí que descienda un poco porque había mucha turbulencia. El cerro Plataforma es un paso obligado entre Cholila y Lago Puelo donde el viento no genera tanta turbulencia. Él comenzó a descender, pero nunca detuvo su descenso hasta tocar la nieve. El impacto se debió a una falla de potencia. No sabemos lo que causó esta falla. Puede ser que se haya congelado el ingreso de aire al carburador y eso redujo la potencia”.

“Él quedó bastante shockeado después del golpe. Lo único que se acuerda es que no pudo detener el descenso, a pesar de que le dio potencia al avión y no respondió como debía”.

“Afortunadamente le pasó en ese lugar, porque si le hubiera pasado antes o después del cerro, el accidente hubiera sido mucho más grave porque el impacto hubiera sido contra una ladera. De esta manera aterrizó en un lago que estaba congelado, plano y con bastante nieve arriba, lo que amortiguó mucho el golpe. De hecho, la nieve fue lo que amortiguo el golpe e hizo que el avión se diera vuelta".

El lago Plataforma esprofundo y tiene 800 metros de diámetro. "Por el miedo a que el hielo se rompa y se vaya al fondo con el avión, él salió rápido de la nave. También alcanzó a comunicarse con nosotros que veníamos volando en la zona y pedir ayuda, para luego llegar hasta la costa del lago".

Según Wegrzyn, Parodi llevaba mucha carga en su avión y no contaba con equipo de supervivencia. Ese fue uno de los errores en la evaluación posterior al tratarse de un vuelo en zona de montaña en pleno invierno.

“Teníamos bastante fe de que él iba a sobrevivir, aunque la situación era muy dura", contó Wegrzyn. "Él supo no entregarse, tiene una mente muy fuerte y un entrenamiento muy grande. No pudo hacer fuego porque en el bosque al que llegó caminando estaba toda la leña mojada. Pasó toda la noche masajeando sus pies, tratando de moverse y no dormir porque él sabía que si se dormí iba a morir congelado”.

Los momentos de Parodi solo en la montaña fueron desesperantes. “Al día siguiente cuando quiso volver a caminar estaba tapado por 40 centímetros de nieve. Empezó a caminar, sabía que no debía parar y llegó hasta un claro donde pensó que lo podíamos rescatar”.

Desde un principio, nada salió como lo habían planeado. El vuelo debió haberse hecho en horas de la mañana. “Eso nos dejó poco margen de luz”, explicó. “Fue una situación muy complicada para el rescate, pero sin saberlo, nos sincronizamos. El intuyó el lugar donde íbamos a ir a buscarlo y nosotros igual".

“Ese día, apenas se abrió una ventana yo salí con el avión para localizarlo. Lo pasamos por arriba y no lo vimos, pero 10 minutos después escuchó a un helicóptero que fue el que lo vio y lo rescató. Cuesta recordar el momento que lo encontramos sin emocionarnos”.

El avión accidentado permanece en el lugar, sobre el hielo, con las ruedas mirando al cielo. “Ya tenemos planificado el rescate del avión. Se hará con la misma tripulación del helicóptero que hizo el rescate de Queque, para ir a buscar la nave la próxima semana”.