Empleada municipal encontró una bala dentro de una empanada
Lo denunció una trabajadora de la Municipalidad de Pico Truncado, provincia de Santa Cruz. Pidió empanadas de carne en una rotisería y encontró un perdigón en una de estas.
Una empleada municipal de Pico Truncado, Santa Cruz, pidió empanadas en una conocida rotisería de esa localidad, y al probar una encontró una bala en su interior.
La mujer, Verónica Oyarzo, dio a conocer el caso en sus redes sociales, ilustrado con una imagen del perdigón.
Las empanadas eran de carne picada y los mismos vecinos tejieron toda clase de conjeturas respecto de cómo llegó ahí la bala.
Hay versiones que sostienen que las empanadas “deben ser de carne de guanaco”, mientras que otros creen que el problema es “de las carnicerías” que dejan pasar cualquier cosa.
Incluso exempleados de la rotisería salieron a aclarar que ellos nunca usaron “carne de guanaco” sino “nalga vaca” y además dieron fe que los dueños son rigurosos en los controles.
En cualquier caso, la damnificada hizo su descargo en las redes sociales advirtiendo sobre lo que le podría haber pasado no solo de ella sino también para sus hijos, si no hubiese descubierto este perdigón.
“Hay cosas que se pueden dejar pasar, pero no corresponde que pasen cuando hay menores (…) Encontramos un perdigón de una bala dentro de una empanada. ¡Totalmente una locura! Hay muchas familias que consumen a diario comidas elaboradas en este local comercial ¡Precaución! Nada más”, se despachó Oyarzo.
Una empleada municipal de Pico Truncado, Santa Cruz, pidió empanadas en una conocida rotisería de esa localidad, y al probar una encontró una bala en su interior.
La mujer, Verónica Oyarzo, dio a conocer el caso en sus redes sociales, ilustrado con una imagen del perdigón.
Las empanadas eran de carne picada y los mismos vecinos tejieron toda clase de conjeturas respecto de cómo llegó ahí la bala.
Hay versiones que sostienen que las empanadas “deben ser de carne de guanaco”, mientras que otros creen que el problema es “de las carnicerías” que dejan pasar cualquier cosa.
Incluso exempleados de la rotisería salieron a aclarar que ellos nunca usaron “carne de guanaco” sino “nalga vaca” y además dieron fe que los dueños son rigurosos en los controles.
En cualquier caso, la damnificada hizo su descargo en las redes sociales advirtiendo sobre lo que le podría haber pasado no solo de ella sino también para sus hijos, si no hubiese descubierto este perdigón.
“Hay cosas que se pueden dejar pasar, pero no corresponde que pasen cuando hay menores (…) Encontramos un perdigón de una bala dentro de una empanada. ¡Totalmente una locura! Hay muchas familias que consumen a diario comidas elaboradas en este local comercial ¡Precaución! Nada más”, se despachó Oyarzo.