Dethier planteó “falta de inversiones”
El presidente de CIMA Patagonia analizó el año que concluye. Reconoció incertidumbre por las medidas internacionales y la falta de acciones nacionales.
El año 2025 transita sus últimas semanas y desde los diferentes sectores realizan el balance. La incertidumbre y la falta de respuestas a problemas estructurales rodean al sector empresarial e industrial.
Oscar Dethier, presidente de CIMA Patagonia, reconoció que el año cierra con gran inquietud, en especial por las barreras arancelarias que impuso el gobierno de Estados Unidos al aluminio y que afectó directamente a Aluar. Ante ello el empresario consideró central poder avanzar en la política que permita la inversión como eje de la recuperación económica.
“El grave problema pasa por la falta de inversiones,” sentenció Dethier, añadiendo que el país sufre una desinversión crónica que ha dejado las estructuras “realmente casi destruidas.”
El empresario enfatizó que la discusión sobre competitividad frecuentemente omite costos logísticos esenciales. Si bien se analizan salarios y energía, se olvida el costo de sacar producción por el puerto, el uso de rutas y la ausencia de ferrocarril.
“Es imposible integrarnos al mundo si no competimos con infraestructura” firmó el presidente de CIMA Patagonia, quien planteó que para el futuro de la región patagónica es necesario resolver las cuestiones estructurales sea mediante la inversión o asumiendo el “costo de seguir postergando la cuestión.”
En relación al proyecto de Vaca Muerta y el desarrollo de las inversiones en Punta Colorada, el empresario aclaró que no espera un “aluvión” de demanda laboral. Las razones a este diagnóstico lo ubico en que se trata de proyectos de “capitales intensivos” con necesidades muy específicas que pueden ser soldadura, mecanizado o servicios ambientales.
La estrategia, según Dethier, es continuar planteando estas problemáticas junto al gobierno provincial y todos los actores de la sociedad. La resolución de la infraestructura es vista como el paso fundamental para poder construir un futuro sostenible en la región.
El año 2025 transita sus últimas semanas y desde los diferentes sectores realizan el balance. La incertidumbre y la falta de respuestas a problemas estructurales rodean al sector empresarial e industrial.
Oscar Dethier, presidente de CIMA Patagonia, reconoció que el año cierra con gran inquietud, en especial por las barreras arancelarias que impuso el gobierno de Estados Unidos al aluminio y que afectó directamente a Aluar. Ante ello el empresario consideró central poder avanzar en la política que permita la inversión como eje de la recuperación económica.
“El grave problema pasa por la falta de inversiones,” sentenció Dethier, añadiendo que el país sufre una desinversión crónica que ha dejado las estructuras “realmente casi destruidas.”
El empresario enfatizó que la discusión sobre competitividad frecuentemente omite costos logísticos esenciales. Si bien se analizan salarios y energía, se olvida el costo de sacar producción por el puerto, el uso de rutas y la ausencia de ferrocarril.
“Es imposible integrarnos al mundo si no competimos con infraestructura” firmó el presidente de CIMA Patagonia, quien planteó que para el futuro de la región patagónica es necesario resolver las cuestiones estructurales sea mediante la inversión o asumiendo el “costo de seguir postergando la cuestión.”
En relación al proyecto de Vaca Muerta y el desarrollo de las inversiones en Punta Colorada, el empresario aclaró que no espera un “aluvión” de demanda laboral. Las razones a este diagnóstico lo ubico en que se trata de proyectos de “capitales intensivos” con necesidades muy específicas que pueden ser soldadura, mecanizado o servicios ambientales.
La estrategia, según Dethier, es continuar planteando estas problemáticas junto al gobierno provincial y todos los actores de la sociedad. La resolución de la infraestructura es vista como el paso fundamental para poder construir un futuro sostenible en la región.