“El Consejo de la Mujer recibe violencia del Municipio”

El área cuenta con un presupuesto para funcionar, pero Matías Taccetta no les aprueba gastos. La presidenta del CMM dio cuenta de una serie de situaciones, y afirmó que el intendente “se nos ríe en la cara”.

23 SEP 2025 - 14:04 | Actualizado 23 SEP 2025 - 14:10

La presidenta del Consejo Municipal de la Mujer, Graciela Avilés, recalcó la falta de políticas públicas para el sector de las mujeres, porque “hay falta de interés de parte del Departamento Ejecutivo Municipal”.

Explicó que el Consejo cuenta con un presupuesto, y “está finalizando el año prácticamente, y no hemos podido ejecutarlo”, agregando que en mayo le pidió una audiencia al intendente Matías Taccetta, para exponer con su equipo de trabajo las actividades programadas para el año.

Avilés reivindicó la importancia del espacio, en el que la única que tiene un sueldo es ella por ser empleada municipal, y el resto es un voluntariado. “Pero Taccetta nunca nos recibió; nos hacía ir a las ocho de la mañana, y a las 10 hacía comunicar que no nos atendería. Así, las personas terminan agotándose”.

Luego comentó que en una oportunidad logró que el jefe comunal la recibiera de manera informal por algunos minutos, y le pidió por favor que le permitiera ejecutar el presupuesto para poner en práctica el “proyecto de gestión menstrual”, que en algún momento alentó el contador a que fuera presentado.

En este contexto, la conductora del Consejo de la Mujer indicó que a principios de junio presentó una nota de compra para el programa, y “aún no lo aprobó con la excusa de que debe firmarlo una u otra persona”.

Dando vueltas

Ofuscada Graciela Avilés dijo que “estoy dando vueltas sin presupuesto, cuando es un número que está escrito pero no puedo ejecutarlo, para llegar a los barrios con el proyecto gestión menstrual”, sugiriendo que “hay una falta de compromiso del intendente, porque me lo aseguró, me dio su palabra y me dio una palmada en la espalda. Entonces, siento que me mintió en la cara y sigo preguntando todos los días a la secretaria si aprobó ese fondo. La plata está; tenemos tres millones de pesos disponibles”.

Se refirió a la paradoja de la situación, porque el programa elaborado apunta a la sensibilización acerca de la violencia hacia las mujeres, y sin embargo “el Consejo de la Mujer, es el área que mayor violencia recibe del Ejecutivo Municipal. Me siento violentada y que nos mienten, porque escuchamos las problemáticas y no podemos dar ninguna respuesta”.

Enfatizó la dirigente que “no tenemos insumos para trabajar. Nos dan cuatro rollos de papel higiénico, cuatro biromes y una resma de hojas para todo el año, y piensan que con eso vamos a hacer maravillas”.

En lo laboral, Graciela Avilés señaló que tiene 30 años de servicios en la municipalidad, y varias veces ha pedido el traslado a otra área, pero sigue “en un Consejo de la Mujer desmantelado”, a la vez que añadió que a la oficina la mantienen las integrantes de su grupo, haciendo limpieza y pintando el espacio, que solidariamente facilitan para reuniones del Consejo del Mayor, el Consejo de Discapacidad y otros sectores municipales.

Elegido por el pueblo

La referente de las mujeres expresó que al intendente Matías Taccetta le interesa mucho lo que ocurre con la obra del hotel Carao camino a Alto Río Percy, y las mejoras de lo que se ve en el centro. Pero, hay una indiferencia lamentable con lo que sucede en los barrios. “Tiene que tener en cuenta que lo eligió todo el pueblo, porque hace mucho hincapié en lo privado, en sus amigos”.

En la misma línea Avilés que el tiempo pasa rápido y dentro de dos años habrá que votar nuevamente, y si se dispone a ir por la reelección, “no se si tendrá un resultado positivo, porque la gente se da cuenta que nos miente en la cara”.

Haciendo una comparación, dijo que con la gestión de Sergio Ongarato estuvieron mejor en cuanto al funcionamiento del Consejo de la Mujer, porque “nos aprobaba el presupuesto y reconocía el trabajo que hacíamos”.

Reflexionó la presidenta del CMM que “el mayor problema que tiene conmigo Taccetta, es que no soy obsecuente y digo las cosas porque las conozco de primera mano, y tal vez es un precio que tengo que pagar y no me preocupa. Pero, que sea justo con el resto de la comunidad, porque el Consejo de la Mujer no es Graciela Avilés, sino muchas personas que necesitan del espacio de prevención de la violencia, que trabajamos con otras instituciones”.

23 SEP 2025 - 14:04

La presidenta del Consejo Municipal de la Mujer, Graciela Avilés, recalcó la falta de políticas públicas para el sector de las mujeres, porque “hay falta de interés de parte del Departamento Ejecutivo Municipal”.

Explicó que el Consejo cuenta con un presupuesto, y “está finalizando el año prácticamente, y no hemos podido ejecutarlo”, agregando que en mayo le pidió una audiencia al intendente Matías Taccetta, para exponer con su equipo de trabajo las actividades programadas para el año.

Avilés reivindicó la importancia del espacio, en el que la única que tiene un sueldo es ella por ser empleada municipal, y el resto es un voluntariado. “Pero Taccetta nunca nos recibió; nos hacía ir a las ocho de la mañana, y a las 10 hacía comunicar que no nos atendería. Así, las personas terminan agotándose”.

Luego comentó que en una oportunidad logró que el jefe comunal la recibiera de manera informal por algunos minutos, y le pidió por favor que le permitiera ejecutar el presupuesto para poner en práctica el “proyecto de gestión menstrual”, que en algún momento alentó el contador a que fuera presentado.

En este contexto, la conductora del Consejo de la Mujer indicó que a principios de junio presentó una nota de compra para el programa, y “aún no lo aprobó con la excusa de que debe firmarlo una u otra persona”.

Dando vueltas

Ofuscada Graciela Avilés dijo que “estoy dando vueltas sin presupuesto, cuando es un número que está escrito pero no puedo ejecutarlo, para llegar a los barrios con el proyecto gestión menstrual”, sugiriendo que “hay una falta de compromiso del intendente, porque me lo aseguró, me dio su palabra y me dio una palmada en la espalda. Entonces, siento que me mintió en la cara y sigo preguntando todos los días a la secretaria si aprobó ese fondo. La plata está; tenemos tres millones de pesos disponibles”.

Se refirió a la paradoja de la situación, porque el programa elaborado apunta a la sensibilización acerca de la violencia hacia las mujeres, y sin embargo “el Consejo de la Mujer, es el área que mayor violencia recibe del Ejecutivo Municipal. Me siento violentada y que nos mienten, porque escuchamos las problemáticas y no podemos dar ninguna respuesta”.

Enfatizó la dirigente que “no tenemos insumos para trabajar. Nos dan cuatro rollos de papel higiénico, cuatro biromes y una resma de hojas para todo el año, y piensan que con eso vamos a hacer maravillas”.

En lo laboral, Graciela Avilés señaló que tiene 30 años de servicios en la municipalidad, y varias veces ha pedido el traslado a otra área, pero sigue “en un Consejo de la Mujer desmantelado”, a la vez que añadió que a la oficina la mantienen las integrantes de su grupo, haciendo limpieza y pintando el espacio, que solidariamente facilitan para reuniones del Consejo del Mayor, el Consejo de Discapacidad y otros sectores municipales.

Elegido por el pueblo

La referente de las mujeres expresó que al intendente Matías Taccetta le interesa mucho lo que ocurre con la obra del hotel Carao camino a Alto Río Percy, y las mejoras de lo que se ve en el centro. Pero, hay una indiferencia lamentable con lo que sucede en los barrios. “Tiene que tener en cuenta que lo eligió todo el pueblo, porque hace mucho hincapié en lo privado, en sus amigos”.

En la misma línea Avilés que el tiempo pasa rápido y dentro de dos años habrá que votar nuevamente, y si se dispone a ir por la reelección, “no se si tendrá un resultado positivo, porque la gente se da cuenta que nos miente en la cara”.

Haciendo una comparación, dijo que con la gestión de Sergio Ongarato estuvieron mejor en cuanto al funcionamiento del Consejo de la Mujer, porque “nos aprobaba el presupuesto y reconocía el trabajo que hacíamos”.

Reflexionó la presidenta del CMM que “el mayor problema que tiene conmigo Taccetta, es que no soy obsecuente y digo las cosas porque las conozco de primera mano, y tal vez es un precio que tengo que pagar y no me preocupa. Pero, que sea justo con el resto de la comunidad, porque el Consejo de la Mujer no es Graciela Avilés, sino muchas personas que necesitan del espacio de prevención de la violencia, que trabajamos con otras instituciones”.