El presidente de la Cámara de Comercio de Comodoro Rivadavia, Sebastián Aguirre analizó la compleja situación que atraviesa la actividad comercial en la ciudad, fuertemente condicionada por la crisis en el sector petrolero y los cambios en los hábitos de consumo.
“La actividad comercial en Comodoro es la principal empleadora, ocupa alrededor de 16.000 puestos de trabajo, pero también es una de las más sujetas a los vaivenes económicos. Cuando hay menos dinero circulante y más incertidumbre, los primeros consumos que se restringen son los superfluos”, explicó. Y agregó: “La actividad económica y el consumo se limitan a lo estrictamente necesario en cada familia o persona. La caída en la actividad petrolera impacta casi directamente en el comercio y en la gastronomía”.
El titular de la Cámara de Comercio sostuvo que la ciudad atraviesa “un primer estadío” de reconfiguración comercial. “Vemos que negocios, principalmente los más nuevos o los que ya venían complicados, no logran sostenerse. Pero también hay renovación, con gente que decide invertir un ahorro o una indemnización en un emprendimiento propio”.
En ese contexto, el dirigente señaló que “hay una innovación bastante importante de locales: cambia uno, cierra al mes, y empieza otro.
También empieza a costar más el alquiler, y hay que ver qué actividad puede sostener los costos que implica abrir al público”.
Además, describió un cambio en los formatos de venta: “Estamos viendo mucha actividad en marketplace, showrooms que no están habilitados como locales a la calle. Los canales de venta electrónica están funcionando muy bien. Representan un hecho novedoso en la realidad de Comodoro. No lo hemos vivido antes”.
En cuanto al impacto de la crisis petrolera, subrayó que “no podemos soslayar el lugar donde nos encontramos. Hay una actividad que durante 120 años ha sido la preponderante, que es la actividad minera del petróleo. Y en una circunstancia como la que estamos viviendo, una de las primeras actividades en verse afectada es el comercio”.
Finalmente, Aguirre expresó la expectativa del sector: “Vamos a ver locales vacíos. Vamos a ver actividades que empiezan incipientemente, que esperemos que se mantengan. Lo que bregamos es que nos permitan tener las condiciones para sostener el nivel de actividad y el nivel de empleo, que cada vez viene más bajo”.
El presidente de la Cámara de Comercio de Comodoro Rivadavia, Sebastián Aguirre analizó la compleja situación que atraviesa la actividad comercial en la ciudad, fuertemente condicionada por la crisis en el sector petrolero y los cambios en los hábitos de consumo.
“La actividad comercial en Comodoro es la principal empleadora, ocupa alrededor de 16.000 puestos de trabajo, pero también es una de las más sujetas a los vaivenes económicos. Cuando hay menos dinero circulante y más incertidumbre, los primeros consumos que se restringen son los superfluos”, explicó. Y agregó: “La actividad económica y el consumo se limitan a lo estrictamente necesario en cada familia o persona. La caída en la actividad petrolera impacta casi directamente en el comercio y en la gastronomía”.
El titular de la Cámara de Comercio sostuvo que la ciudad atraviesa “un primer estadío” de reconfiguración comercial. “Vemos que negocios, principalmente los más nuevos o los que ya venían complicados, no logran sostenerse. Pero también hay renovación, con gente que decide invertir un ahorro o una indemnización en un emprendimiento propio”.
En ese contexto, el dirigente señaló que “hay una innovación bastante importante de locales: cambia uno, cierra al mes, y empieza otro.
También empieza a costar más el alquiler, y hay que ver qué actividad puede sostener los costos que implica abrir al público”.
Además, describió un cambio en los formatos de venta: “Estamos viendo mucha actividad en marketplace, showrooms que no están habilitados como locales a la calle. Los canales de venta electrónica están funcionando muy bien. Representan un hecho novedoso en la realidad de Comodoro. No lo hemos vivido antes”.
En cuanto al impacto de la crisis petrolera, subrayó que “no podemos soslayar el lugar donde nos encontramos. Hay una actividad que durante 120 años ha sido la preponderante, que es la actividad minera del petróleo. Y en una circunstancia como la que estamos viviendo, una de las primeras actividades en verse afectada es el comercio”.
Finalmente, Aguirre expresó la expectativa del sector: “Vamos a ver locales vacíos. Vamos a ver actividades que empiezan incipientemente, que esperemos que se mantengan. Lo que bregamos es que nos permitan tener las condiciones para sostener el nivel de actividad y el nivel de empleo, que cada vez viene más bajo”.