Laura Leguizamón, de 51 años, fue señalada por las autopsias realizadas en la Morgue Judicial como la responsable del múltiple crimen. La tragedia tuvo lugar este miércoles en un departamento ubicado en Aguirre 295, donde Leguizamónasesinó a su pareja, Bernardo Adrián Seltzer, y a sus dos hijos, Ian de 15 años e Ivo de 13, antes de suicidarse.
El descubrimiento de los cuerpos fue realizado por una empleada doméstica que ingresó al inmueble utilizando su juego de llaves. La ausencia de signos de violencia en el acceso llevó a sospechar desde un primer momento que se trataba de un crimen intrafamiliar.
El libro en cuestión relata siete casos reales de asesinatos ocurridos dentro del seno familiar en Argentina, donde los autores y las víctimas estaban unidos por vínculos de parentesco directo, como padres, hijos, hermanos, nietos o sobrinos. La obra también explora cómo personas aparentemente “normales” pueden llegar a convertirse en homicidas y sugiere que, en lugar de venganza, estos crímenes suelen estar impulsados por un profundo componente de castigo o desesperación.
Lo que hace el posteo aún más inquietante es la descripción que Leguizamón añadió a la imagen: “Ivo se porta horrible... jua”,haciendo referencia a uno de sus hijos, quien lamentablemente resultó ser una de las víctimas de la masacre ocurrida una década después.
El caso continúa bajo investigación por parte del Ministerio Público Fiscal, que busca reconstruir el cuadro psicológico de la autora y comprender qué pudo haber motivado el trágico desenlace familiar. La noticia también ha puesto en foco otras aristas de la investigación, como el contenido de una carta hallada en la escena del crimen y la posible responsabilidad del psiquiatra que atendía a Leguizamón. /LaVoz
Laura Leguizamón, de 51 años, fue señalada por las autopsias realizadas en la Morgue Judicial como la responsable del múltiple crimen. La tragedia tuvo lugar este miércoles en un departamento ubicado en Aguirre 295, donde Leguizamónasesinó a su pareja, Bernardo Adrián Seltzer, y a sus dos hijos, Ian de 15 años e Ivo de 13, antes de suicidarse.
El descubrimiento de los cuerpos fue realizado por una empleada doméstica que ingresó al inmueble utilizando su juego de llaves. La ausencia de signos de violencia en el acceso llevó a sospechar desde un primer momento que se trataba de un crimen intrafamiliar.
El libro en cuestión relata siete casos reales de asesinatos ocurridos dentro del seno familiar en Argentina, donde los autores y las víctimas estaban unidos por vínculos de parentesco directo, como padres, hijos, hermanos, nietos o sobrinos. La obra también explora cómo personas aparentemente “normales” pueden llegar a convertirse en homicidas y sugiere que, en lugar de venganza, estos crímenes suelen estar impulsados por un profundo componente de castigo o desesperación.
Lo que hace el posteo aún más inquietante es la descripción que Leguizamón añadió a la imagen: “Ivo se porta horrible... jua”,haciendo referencia a uno de sus hijos, quien lamentablemente resultó ser una de las víctimas de la masacre ocurrida una década después.
El caso continúa bajo investigación por parte del Ministerio Público Fiscal, que busca reconstruir el cuadro psicológico de la autora y comprender qué pudo haber motivado el trágico desenlace familiar. La noticia también ha puesto en foco otras aristas de la investigación, como el contenido de una carta hallada en la escena del crimen y la posible responsabilidad del psiquiatra que atendía a Leguizamón. /LaVoz