Cierre de Richter: “La gerenta no está diciendo la verdad”

Mientras continúan reclamando las deudas salariales que la empresa Richter tiene con los ocho empleados que esta semana despidieron previo al cierre, uno de ellos, Silvio Sequenzia, afirmó en Jornada Radio que la gerenta María Collio “no está diciendo la verdad y nos sentimos muy dolidos por eso”.

16 ABR 2025 - 9:58 | Actualizado 16 ABR 2025 - 10:51

Recientemente, la histórica empresa de transporte Richter cerró sus puertas en Trelew sin previo aviso y todos sus trabajadores fueron despedidos, pese a que aún les deben dos meses de salario. La gerenta, María Collio, acusó al delegado del Sindicato de Camioneros de Trelew, Adrián Lazarte de presionar para “cerrar y echar a los empleados”. En respuesta, uno de los despedidos la desmintió. “La gerenta no está diciendo la verdad y nos sentimos muy dolidos”, dijo Silvio Sequenzia.

Desde el lunes que se encuentran las 24 horas en el lugar, donde montaron una carpa con palets para refugiarse de la llovizna y las bajas temperaturas. En conjunto, reclaman por el despido repentino y los salarios adeudados, luego de que el dueño les haya dado su palabra de que se pondría al día con los sueldos.

En primera instancia, Silvio desmintió los dichos de la gerenta María Collio y mencionó que ella “no está diciendo la verdad”. Añadió que Collio “de un día para otro me sacóla llave y tenemos el ingreso cerrado. Yo era el encargado de administrar el tema de la empresa acá, pero ella nos bloqueó la entrada al trabajo”. Por ello, pese a que se acercan a cumplir con su horario, “no podemos hacer nada porque los portones están cerrados”.

Detallando en el reclamo que efectúan, explicó que “muchos compañeros míos no tienen una entrada salarial ahora por lo que adeuda la empresa”, agregando que este conflicto ya data de hace más de nueve meses atrás por distintos atrasos que la empresa tuvo para abonar los salarios, las obras sociales, aportes y ayudas escolares.

En esa línea, indicó que pese a que a ellos no les realizan los depósitos, sí le continúan descontando todo por el recibo, “pero el propietario no se hacía cargo de pagarlo aunque él tiene la obligación”.

Recordó que el pasado mes de noviembre, “le dimos lo que sería un changüí pedido por él” porque ya habían echado a dos empleados y la idea era reintegrarlos. A eso, se le sumaba que había que saldar las deudas vigentes. “Nos pusimos de acuerdo junto con el sindicato de darle esa posibilidad hasta marzo. Pero ya pasó marzo, pasó abril y todavía siguen las deudas porque él no cumplió”, criticó.

Los despidos

Como se mencionó, son ocho los trabajadores despedidos que a partir del 30 de abril dejarán de trabajar en la empresa. De todos ellos, el de más antigüedad es Silvio, que entró hace 22 años. El resto lleva alrededor de nueve años formando parte de la compañía.

“Nosotros recibimos los telegramas que dejábamos de pertenecer a la empresa a partir del 30 de abril y es algo ilógico, no sé por qué te despiden después del 30 de abril, siendo hoy 16”. Por ello, “vamos a seguir acampando acá, luchando por nuestros derechos y por tratar de poder cobrarles, aunque sean los sueldos”.

Respecto a si hubo comunicaciones con él, Silvio puntualizó que “hubo comunicación con Adrián del gremio, diciéndole que iba a pagar la deuda de febrero pero que lo dejemos sacar la mercadería del galpón para terminar de abonar los salarios”. La respuesta del gremio y de los trabajadores fue negativa, porque alegaron que “él tiene que poner todo el dinero de los sueldos y de ahí ver cómo se sigue”.

Profundizó en que la culpa de todo esto, a su criterio, la tiene el propietario de la empresa y negó que el sindicato tenga algo que ver. “En este caso, el gremio nos está apoyando”.

El dueño “reside en Buenos Aires” por lo que toda la gestión “es a la distancia”. El pasado viernes tuvieron comunicación con él, pero alegó que “dice muchas cosas, pero no las termina de concretar”.

Mientras luchan por cobrar los salarios atrasados, adelantó que luego deberán ir a juicio. También están diagramando con el sindicato la posibilidad de ser reubicados en otras empresas. Sobre esto, deslizó que “con el sindicato, supuestamente estamos primeros en la lista para reubicación. Ojalá que cuando esto termine, podamos arrancar en otro lado por el bien de mis compañeros y el mío también”, confesó.

Enterate de las noticias de POLITICA a través de nuestro newsletter

Anotate para recibir las noticias más importantes de esta sección.

Te podés dar de baja en cualquier momento con un solo clic.
16 ABR 2025 - 9:58

Recientemente, la histórica empresa de transporte Richter cerró sus puertas en Trelew sin previo aviso y todos sus trabajadores fueron despedidos, pese a que aún les deben dos meses de salario. La gerenta, María Collio, acusó al delegado del Sindicato de Camioneros de Trelew, Adrián Lazarte de presionar para “cerrar y echar a los empleados”. En respuesta, uno de los despedidos la desmintió. “La gerenta no está diciendo la verdad y nos sentimos muy dolidos”, dijo Silvio Sequenzia.

Desde el lunes que se encuentran las 24 horas en el lugar, donde montaron una carpa con palets para refugiarse de la llovizna y las bajas temperaturas. En conjunto, reclaman por el despido repentino y los salarios adeudados, luego de que el dueño les haya dado su palabra de que se pondría al día con los sueldos.

En primera instancia, Silvio desmintió los dichos de la gerenta María Collio y mencionó que ella “no está diciendo la verdad”. Añadió que Collio “de un día para otro me sacóla llave y tenemos el ingreso cerrado. Yo era el encargado de administrar el tema de la empresa acá, pero ella nos bloqueó la entrada al trabajo”. Por ello, pese a que se acercan a cumplir con su horario, “no podemos hacer nada porque los portones están cerrados”.

Detallando en el reclamo que efectúan, explicó que “muchos compañeros míos no tienen una entrada salarial ahora por lo que adeuda la empresa”, agregando que este conflicto ya data de hace más de nueve meses atrás por distintos atrasos que la empresa tuvo para abonar los salarios, las obras sociales, aportes y ayudas escolares.

En esa línea, indicó que pese a que a ellos no les realizan los depósitos, sí le continúan descontando todo por el recibo, “pero el propietario no se hacía cargo de pagarlo aunque él tiene la obligación”.

Recordó que el pasado mes de noviembre, “le dimos lo que sería un changüí pedido por él” porque ya habían echado a dos empleados y la idea era reintegrarlos. A eso, se le sumaba que había que saldar las deudas vigentes. “Nos pusimos de acuerdo junto con el sindicato de darle esa posibilidad hasta marzo. Pero ya pasó marzo, pasó abril y todavía siguen las deudas porque él no cumplió”, criticó.

Los despidos

Como se mencionó, son ocho los trabajadores despedidos que a partir del 30 de abril dejarán de trabajar en la empresa. De todos ellos, el de más antigüedad es Silvio, que entró hace 22 años. El resto lleva alrededor de nueve años formando parte de la compañía.

“Nosotros recibimos los telegramas que dejábamos de pertenecer a la empresa a partir del 30 de abril y es algo ilógico, no sé por qué te despiden después del 30 de abril, siendo hoy 16”. Por ello, “vamos a seguir acampando acá, luchando por nuestros derechos y por tratar de poder cobrarles, aunque sean los sueldos”.

Respecto a si hubo comunicaciones con él, Silvio puntualizó que “hubo comunicación con Adrián del gremio, diciéndole que iba a pagar la deuda de febrero pero que lo dejemos sacar la mercadería del galpón para terminar de abonar los salarios”. La respuesta del gremio y de los trabajadores fue negativa, porque alegaron que “él tiene que poner todo el dinero de los sueldos y de ahí ver cómo se sigue”.

Profundizó en que la culpa de todo esto, a su criterio, la tiene el propietario de la empresa y negó que el sindicato tenga algo que ver. “En este caso, el gremio nos está apoyando”.

El dueño “reside en Buenos Aires” por lo que toda la gestión “es a la distancia”. El pasado viernes tuvieron comunicación con él, pero alegó que “dice muchas cosas, pero no las termina de concretar”.

Mientras luchan por cobrar los salarios atrasados, adelantó que luego deberán ir a juicio. También están diagramando con el sindicato la posibilidad de ser reubicados en otras empresas. Sobre esto, deslizó que “con el sindicato, supuestamente estamos primeros en la lista para reubicación. Ojalá que cuando esto termine, podamos arrancar en otro lado por el bien de mis compañeros y el mío también”, confesó.