Descubren restos de un ictiosaurio de 150 millones de años

Las piezas fueron trasladadas al Museo Carmen Funes para su conservación y estudio.

13 ABR 2025 - 17:35 | Actualizado 13 ABR 2025 - 17:46

Tras el hallazgo de los restos en un campo de Mulichinco, una patrulla ambiental compuesta por efectivos de la Gendarmería Nacional y de la Dirección de Patrimonio confirmó que se trata de una especie marina que vivió hace unos 150 millones de años. Las piezas fueron trasladadas al Museo Carmen Funes para su conservación y estudio.



Luego de que el propietario de un campo ubicado en el paraje Mulichinco alertara a las autoridades sobre la presencia de restos fósiles se conformó una patrulla ambiental compuesta por efectivos de Gendarmería Nacional y el personal de la Dirección de Patrimonio Cultural de la provincia de Neuquén, que se dirigieron hacia el lugar y constataron la existencia de los fósiles en cuestión.

Los restos pertenecen a un reptil marino que era depredador de otras especies marinas, con un aspecto similar al de un pez espada o delfín, que vivieron desde el Triásico Inferior hasta el Cretácico Superior.



Este reptil marino tendría una antigüedad de entre 145 y 150 millones de años.

Los gendarmes del Escuadrón 31 Las Lajas Gendarme Juan Carlos Treppo brindaron apoyo al personal de la Dirección Patrimonio Cultural de la provincia de Neuquén tras la alerta de un propietario de un campo, situado en el paraje Mulichinco, localidad de Loncopué, quien advirtió la presencia de restos fósiles en el terreno.



Al desplegarse hacia el lugar, se excavó la zona indicada por el hombre y se constató la existencia de los huesos que aparentemente pertenecían a un reptil marino prehistórico.

Luego del descubrimiento, se tomó contacto con un paleontólogo de la localidad, quien confirmó que se trataría de un ictiosaurio, seres que vivieron desde el Triásico Inferior hasta el Cretácico Superior. Eran grandes depredadores rápidos y eficaces, con características similares a los delfines o peces espada.



Por último, la patrulla ambiental procedió a efectuar el acondicionamiento y levantamiento de las piezas halladas, luego fueron trasladadas hasta el Museo Carmen Funes de la Plaza Huincul, Neuquén.

13 ABR 2025 - 17:35

Tras el hallazgo de los restos en un campo de Mulichinco, una patrulla ambiental compuesta por efectivos de la Gendarmería Nacional y de la Dirección de Patrimonio confirmó que se trata de una especie marina que vivió hace unos 150 millones de años. Las piezas fueron trasladadas al Museo Carmen Funes para su conservación y estudio.



Luego de que el propietario de un campo ubicado en el paraje Mulichinco alertara a las autoridades sobre la presencia de restos fósiles se conformó una patrulla ambiental compuesta por efectivos de Gendarmería Nacional y el personal de la Dirección de Patrimonio Cultural de la provincia de Neuquén, que se dirigieron hacia el lugar y constataron la existencia de los fósiles en cuestión.

Los restos pertenecen a un reptil marino que era depredador de otras especies marinas, con un aspecto similar al de un pez espada o delfín, que vivieron desde el Triásico Inferior hasta el Cretácico Superior.



Este reptil marino tendría una antigüedad de entre 145 y 150 millones de años.

Los gendarmes del Escuadrón 31 Las Lajas Gendarme Juan Carlos Treppo brindaron apoyo al personal de la Dirección Patrimonio Cultural de la provincia de Neuquén tras la alerta de un propietario de un campo, situado en el paraje Mulichinco, localidad de Loncopué, quien advirtió la presencia de restos fósiles en el terreno.



Al desplegarse hacia el lugar, se excavó la zona indicada por el hombre y se constató la existencia de los huesos que aparentemente pertenecían a un reptil marino prehistórico.

Luego del descubrimiento, se tomó contacto con un paleontólogo de la localidad, quien confirmó que se trataría de un ictiosaurio, seres que vivieron desde el Triásico Inferior hasta el Cretácico Superior. Eran grandes depredadores rápidos y eficaces, con características similares a los delfines o peces espada.



Por último, la patrulla ambiental procedió a efectuar el acondicionamiento y levantamiento de las piezas halladas, luego fueron trasladadas hasta el Museo Carmen Funes de la Plaza Huincul, Neuquén.