Por Pedro Méndez
pedromendezgrupojornada.com
El festival benéfico para ayudar a los cuarteles de bomberos de la Comarca Andina, ideado por Yoel Hernández fue un rotundo éxito. Como está escrito en alguna canción popular: “la suerte del principiante no puede fallar”, en esta ocasión no falló. Yoel Hernández es un experimentado artista subiendo a los escenarios a tocar y cantar, pero como organizador era un principiante. Y ya no lo es más.
Para la realización del festival tuvo la colaboración de lo mejor de su pueblo y alrededores. No sólo de funcionarios, sino de amigos, allegados y también la colaboración de otros excelentes artistas regionales, que le dieron forma al éxito del primer festival “Mi lugar”.
Todo empezó con la encendida con voz de los locutores que le dieron rienda suelta a sus excelentes dotes de animadores y llevaron adelante la locución desde el escenario principal.
A las 12 del mediodía, estuvo listo el Curanto. Una comida típica de la Patagonia, con orígenes ancestrales que, por primera vez, se preparó en una fiesta popular. La exquisita porción de curanto dejó satisfechos el paladar de todos los queprobaron.
En el escenario, el ballet El Camaruco de Comodoro Rivadavia inauguró con un gran número de baile y malambo, lo que sería una larga jornada colmada de espectáculos.
Luegose armó la guitarreada prometida a los niños, y en la que participaron Yhosva Montoya y Yoel Hernández.
Más tarde actuó Juanjo del Prado, y también el Circo Silvestre que deleitó a grandes y chicos.
Para los más pequeños actuó La Sirenita y Messi, obra de teatro dirigida por Silvina Mena. Los más chicos también tuvieron su espacio en el escenario principal. Emma Garrido, primero, Brian Millanahuel, después, el ballet infantil Chalitun kepurrún, más tarde y la joven Mari Ángeles, mostraron sus dotes artísticas.
Más baile llegó con la “Flor” de artista y cantante que es Amancay del Sur que mostró su enorme talento haciendo vibrar el predio al ritmo de los corridos.
Una de las más aplaudidas fue Paloma Pilquimán que hizo recordar a todos el interminable encanto de la rítmica música de la ranchera. Se trata de un estilo musical que hace 40 años atrás era equivalente a lo que es la cumbia hoy. Si había fiesta, ranchera era lo que bailaban nuestros paisanos en el interior provincial y en los campos.
La cosa se puso más grande y varonil con la presentación de un referente de la música folclórica de la Patagonia: Leonardo Miranda. Luego de la actuación de Miranda hubo un alto para agasajar y reconocer el trabajo de los bomberos voluntarios.
Representantes de los cuarteles de Bomberos Voluntarios de El Hoyo, Epuyén, El Maitén, Cholila, Lago Puelo, El Bolsón, Brigadistas, Servicio Nacional del Manejo del Fuego, subieron al escenario para recibir un reconocimiento, acto que fue acompañado con el aplauso del público presente. Todo lo recaudado durante el evento, fue repartido entre los cuarteles de bomberos mencionados.
Cuando caía la tarde, Piñón Fijo, se adueño del escenario y del espectáculo. Como era de esperar el payaso más popular de Argentina acaparó la atención de todos y el festival siguió subiendo escalones.
Todo lo ocurrido en el escenario fue transmitido por un canal de facebook y además de la presencia de Piñón Fijo, el otro invitado especial que aportó su prestigio y presencia fue Claudio Juárez, maestro de ceremonia de Cosquín.
Luego de una larga pausa en la que se acondicionó el escenario, llegaron los artistas que cerrarían la velada. Se presentaron Yoel Hernández, Yhosva Montoya, Sharon y los camperos del chamamé y el ballet El Camaruco, se sumó con la danza. El final tuvo al dúo 440 y a Miguelito y su acordeón que hizo bailar a todos en el predio del festival.
Los organizadores hicieron pública su satisfacción. Por todo lo generado, por lo recaudado, por todo el apoyo recibido para realizar el evento, y por las más de 15 mil personas que asistieron al festival, coronándolo con su presencia como el evento más importante realizado durante el fin de semana largo en la Comarca Andina.
Por Pedro Méndez
pedromendezgrupojornada.com
El festival benéfico para ayudar a los cuarteles de bomberos de la Comarca Andina, ideado por Yoel Hernández fue un rotundo éxito. Como está escrito en alguna canción popular: “la suerte del principiante no puede fallar”, en esta ocasión no falló. Yoel Hernández es un experimentado artista subiendo a los escenarios a tocar y cantar, pero como organizador era un principiante. Y ya no lo es más.
Para la realización del festival tuvo la colaboración de lo mejor de su pueblo y alrededores. No sólo de funcionarios, sino de amigos, allegados y también la colaboración de otros excelentes artistas regionales, que le dieron forma al éxito del primer festival “Mi lugar”.
Todo empezó con la encendida con voz de los locutores que le dieron rienda suelta a sus excelentes dotes de animadores y llevaron adelante la locución desde el escenario principal.
A las 12 del mediodía, estuvo listo el Curanto. Una comida típica de la Patagonia, con orígenes ancestrales que, por primera vez, se preparó en una fiesta popular. La exquisita porción de curanto dejó satisfechos el paladar de todos los queprobaron.
En el escenario, el ballet El Camaruco de Comodoro Rivadavia inauguró con un gran número de baile y malambo, lo que sería una larga jornada colmada de espectáculos.
Luegose armó la guitarreada prometida a los niños, y en la que participaron Yhosva Montoya y Yoel Hernández.
Más tarde actuó Juanjo del Prado, y también el Circo Silvestre que deleitó a grandes y chicos.
Para los más pequeños actuó La Sirenita y Messi, obra de teatro dirigida por Silvina Mena. Los más chicos también tuvieron su espacio en el escenario principal. Emma Garrido, primero, Brian Millanahuel, después, el ballet infantil Chalitun kepurrún, más tarde y la joven Mari Ángeles, mostraron sus dotes artísticas.
Más baile llegó con la “Flor” de artista y cantante que es Amancay del Sur que mostró su enorme talento haciendo vibrar el predio al ritmo de los corridos.
Una de las más aplaudidas fue Paloma Pilquimán que hizo recordar a todos el interminable encanto de la rítmica música de la ranchera. Se trata de un estilo musical que hace 40 años atrás era equivalente a lo que es la cumbia hoy. Si había fiesta, ranchera era lo que bailaban nuestros paisanos en el interior provincial y en los campos.
La cosa se puso más grande y varonil con la presentación de un referente de la música folclórica de la Patagonia: Leonardo Miranda. Luego de la actuación de Miranda hubo un alto para agasajar y reconocer el trabajo de los bomberos voluntarios.
Representantes de los cuarteles de Bomberos Voluntarios de El Hoyo, Epuyén, El Maitén, Cholila, Lago Puelo, El Bolsón, Brigadistas, Servicio Nacional del Manejo del Fuego, subieron al escenario para recibir un reconocimiento, acto que fue acompañado con el aplauso del público presente. Todo lo recaudado durante el evento, fue repartido entre los cuarteles de bomberos mencionados.
Cuando caía la tarde, Piñón Fijo, se adueño del escenario y del espectáculo. Como era de esperar el payaso más popular de Argentina acaparó la atención de todos y el festival siguió subiendo escalones.
Todo lo ocurrido en el escenario fue transmitido por un canal de facebook y además de la presencia de Piñón Fijo, el otro invitado especial que aportó su prestigio y presencia fue Claudio Juárez, maestro de ceremonia de Cosquín.
Luego de una larga pausa en la que se acondicionó el escenario, llegaron los artistas que cerrarían la velada. Se presentaron Yoel Hernández, Yhosva Montoya, Sharon y los camperos del chamamé y el ballet El Camaruco, se sumó con la danza. El final tuvo al dúo 440 y a Miguelito y su acordeón que hizo bailar a todos en el predio del festival.
Los organizadores hicieron pública su satisfacción. Por todo lo generado, por lo recaudado, por todo el apoyo recibido para realizar el evento, y por las más de 15 mil personas que asistieron al festival, coronándolo con su presencia como el evento más importante realizado durante el fin de semana largo en la Comarca Andina.