Una peligrosa ruta de cráteres entre Dolavon y 28 de Julio
Desde el oeste hacia el Valle, entre ambas localidades, la cinta asfáltica presenta más de una decena de baches, potencialmente peligrosos para los automovilistas.
Para quienes llegan al Valle, a la altura del Kilómetro 72, entre el ingreso a 28 de Julio y Dolavon por RN 25, una cadena de baches y deformaciones de la banquina, ponen en peligro la vida de cientos de conductores que se desplazan en plena temporada alta.
Pozos de más de un metro de diámetro y hasta 20 cm de profundidad, sumado a las deformaciones de la calzada, se pueden ver al arribar a esta zona.
Algunos de estos cráteres son tan grandesque, de impactarlos en velocidad, los daños al vehículo y sus ocupantes serían letales.
Una distracción o el solo hecho de no verlos hasta último momento, podrían provocar el reventón de un neumático o un choque frontal con otro vehículo.
Algunos baches están tan juntos que hay que realizar peligrosos volantazos para evitarlos. El tránsito pesado también ha colaborado en estos años a su deterioro.
El desinterés del Gobierno nacional
Algunos tramos de la Ruta 25 tiene graves problemas desde hace tiempo en Chubut, pero desde el Gobierno nacional, responsable del mantenimiento de las autovías nacionales, se descartó invertir un solo peso en su reparación, poniendo en una difícil situación a quienes hacen uso de las carreteras del país
No son pocos los automovilistas que vienen advirtiendo sobre el estado de las rutas. Las alarmas ya están dadas, y ojalá que las autoridades nacionales tomen nota y hagan algo cuanto antes. Que la crónica de hoy sobre los peligros de los baches en las rutas no se transforme mañana en la crónica de una desgracia anunciada.
Para quienes llegan al Valle, a la altura del Kilómetro 72, entre el ingreso a 28 de Julio y Dolavon por RN 25, una cadena de baches y deformaciones de la banquina, ponen en peligro la vida de cientos de conductores que se desplazan en plena temporada alta.
Pozos de más de un metro de diámetro y hasta 20 cm de profundidad, sumado a las deformaciones de la calzada, se pueden ver al arribar a esta zona.
Algunos de estos cráteres son tan grandesque, de impactarlos en velocidad, los daños al vehículo y sus ocupantes serían letales.
Una distracción o el solo hecho de no verlos hasta último momento, podrían provocar el reventón de un neumático o un choque frontal con otro vehículo.
Algunos baches están tan juntos que hay que realizar peligrosos volantazos para evitarlos. El tránsito pesado también ha colaborado en estos años a su deterioro.
El desinterés del Gobierno nacional
Algunos tramos de la Ruta 25 tiene graves problemas desde hace tiempo en Chubut, pero desde el Gobierno nacional, responsable del mantenimiento de las autovías nacionales, se descartó invertir un solo peso en su reparación, poniendo en una difícil situación a quienes hacen uso de las carreteras del país
No son pocos los automovilistas que vienen advirtiendo sobre el estado de las rutas. Las alarmas ya están dadas, y ojalá que las autoridades nacionales tomen nota y hagan algo cuanto antes. Que la crónica de hoy sobre los peligros de los baches en las rutas no se transforme mañana en la crónica de una desgracia anunciada.