El entrenador de Atlético Mineiro, el argentino Gabriel Milito, aseguró que varios jugadores quedaron "bloqueados" tras el triunfo con River pero que que ahora "trabajarán como equipo" para quedarse con la final de la Copa Libertadores.
"Seremos un equipo valiente. Intentaremos atacar y defender bien. Intentaremos ser el equipo que fuimos en la Libertadores, que nos llevó a la final. Habrá pequeñas variaciones dependiendo del rival, pero no podemos alejarnos completamente de lo que somos. Tenemos que competir como equipo", señaló Milito en la conferencia de prensa previa a la final en El Monumental.
Y agregó: "Estamos preparados para presionar al Botafogo, pero también para replegarnos si es necesario. El equipo sabe perfectamente cuándo presionar y cuándo replegarse y quitar espacio".
Con respecto al bajón que tuvo el equipo desde el triunfo en la serie con River, en donde Mineiro apenas pudo empatar cuatro partidos de los últimos ocho que jugó, y sufrió otras cuatro derrotas, Milito aseguró que son humanos.
"Es un error, pero son seres humanos. Sentimos que varios se quedaron en Buenos Aires, una vez que eliminamos a River en las semifinales, pero estamos preparados", expresó el entrenador.
Por otro lado, quien acompañó a Milito, el brasileño Hulk, aseguró: "Es la final en la que más disfruto jugando. Tenemos que mirarnos en el espejo y dar gracias a Dios. Somos unos privilegiados".
"Es la segunda vez que el club está en la final. Tenemos que hacer historia ganando. Si tengo que dejarme la vida ahí dentro, lo haré. Quiero entrar en los libros de historia de este club", definió Hulk.
Y agregó que esta semana le vino bien para forjar la confianza en el plantel:"Cuando nos clasificamos aquí, contra River, fue un alivio, nos quitó un peso de encima. A partir de ahí, jugamos cada tres días. No es fácil de gestionar".
"Quizá el exceso de confianza en la Copa de Brasil nos costó mucho. Aprendimos de aquello. El partido de mañana es otra historia", concluyó Hulk.
Tensión en Atlético Mineiro: Deyverson y Vargas casi se van a las piñas
Los delanteros el brasileño Deyverson y el chileno Eduardo Vargas tuvieron un tenso cruce en el inicio de la práctica que, gracias a la intervención de sus compañeros, no pasó a mayores, a pocas horas de la final.
Cuando los jugadores del equipo brasileño estaban preparándose para la práctica en el predio de Boca, el chileno le dio una patada a modo de juego en la parte baja de la espalda al delantero carioca, algo que pasó desapercibido por todos los presentes.
No obstante, el goleador no estuvo contento con la acción del chileno y lo fue a buscar a un sector de conos en el césped, y tras forcejear para sacarle la pelota, tuvieron un leve intercambio de manos hasta que fueron separados por sus compañeros.
Vargas lo tomó de la nuca mientras le hablaba, con un compañero de por medio, y Deyverson le respondió, pero todo quedó en la nada cuando el nacido en Río de Janeiro se fue corriendo del lugar.
En la final que se llevará a cabo este 30 de noviembre, Atlético Mineiro, que es dirigido por el argentino Gabriel Milito, se medirá frente al Botafogo, también de Brasil, en el estadio El Monumental.
El entrenador de Atlético Mineiro, el argentino Gabriel Milito, aseguró que varios jugadores quedaron "bloqueados" tras el triunfo con River pero que que ahora "trabajarán como equipo" para quedarse con la final de la Copa Libertadores.
"Seremos un equipo valiente. Intentaremos atacar y defender bien. Intentaremos ser el equipo que fuimos en la Libertadores, que nos llevó a la final. Habrá pequeñas variaciones dependiendo del rival, pero no podemos alejarnos completamente de lo que somos. Tenemos que competir como equipo", señaló Milito en la conferencia de prensa previa a la final en El Monumental.
Y agregó: "Estamos preparados para presionar al Botafogo, pero también para replegarnos si es necesario. El equipo sabe perfectamente cuándo presionar y cuándo replegarse y quitar espacio".
Con respecto al bajón que tuvo el equipo desde el triunfo en la serie con River, en donde Mineiro apenas pudo empatar cuatro partidos de los últimos ocho que jugó, y sufrió otras cuatro derrotas, Milito aseguró que son humanos.
"Es un error, pero son seres humanos. Sentimos que varios se quedaron en Buenos Aires, una vez que eliminamos a River en las semifinales, pero estamos preparados", expresó el entrenador.
Por otro lado, quien acompañó a Milito, el brasileño Hulk, aseguró: "Es la final en la que más disfruto jugando. Tenemos que mirarnos en el espejo y dar gracias a Dios. Somos unos privilegiados".
"Es la segunda vez que el club está en la final. Tenemos que hacer historia ganando. Si tengo que dejarme la vida ahí dentro, lo haré. Quiero entrar en los libros de historia de este club", definió Hulk.
Y agregó que esta semana le vino bien para forjar la confianza en el plantel:"Cuando nos clasificamos aquí, contra River, fue un alivio, nos quitó un peso de encima. A partir de ahí, jugamos cada tres días. No es fácil de gestionar".
"Quizá el exceso de confianza en la Copa de Brasil nos costó mucho. Aprendimos de aquello. El partido de mañana es otra historia", concluyó Hulk.
Tensión en Atlético Mineiro: Deyverson y Vargas casi se van a las piñas
Los delanteros el brasileño Deyverson y el chileno Eduardo Vargas tuvieron un tenso cruce en el inicio de la práctica que, gracias a la intervención de sus compañeros, no pasó a mayores, a pocas horas de la final.
Cuando los jugadores del equipo brasileño estaban preparándose para la práctica en el predio de Boca, el chileno le dio una patada a modo de juego en la parte baja de la espalda al delantero carioca, algo que pasó desapercibido por todos los presentes.
No obstante, el goleador no estuvo contento con la acción del chileno y lo fue a buscar a un sector de conos en el césped, y tras forcejear para sacarle la pelota, tuvieron un leve intercambio de manos hasta que fueron separados por sus compañeros.
Vargas lo tomó de la nuca mientras le hablaba, con un compañero de por medio, y Deyverson le respondió, pero todo quedó en la nada cuando el nacido en Río de Janeiro se fue corriendo del lugar.
En la final que se llevará a cabo este 30 de noviembre, Atlético Mineiro, que es dirigido por el argentino Gabriel Milito, se medirá frente al Botafogo, también de Brasil, en el estadio El Monumental.