Irá 22 años a prisión por abusar de su nieta
Luego del veredicto que el jurado popular extendió la semana pasada, la jueza del proceso emitió la sentencia que deberá cumplir el condenado.
Un hombre de Puerto Madryn fue condenado a 22 años de prisión efectiva en una causa por abuso sexual intrafamiliar en perjuicio de una menor de edad.
El fallo fue dictado esta semana por la jueza Marcela Pérez Bogado,luego de que el jurado popular lo hallara culpable de múltiples delitos imputados por la Fiscalía durante el juicio desarrollado el viernes pasado.
La Fiscal Anya Pucheta, encargada de la investigación, presentó pruebas contundentes que demostraban la culpabilidad del acusado en casos de abuso sexual con acceso carnal, corrupción de menores y abuso simple, todos agravados por la situación de convivencia preexistente.
Los mismos ocurrieron durante más de una década hasta que se presentó la denuncia en 2021 y tomó intervención la Agencia de Violencia de Género y Delitos Sexuales de la Fiscalía.
Durante la audiencia de pedido de pena, la fiscalía solicitó una condena de 25 años, mientras que la defensa abogó por el mínimo de 10 años.
A su turno, Pucheta destacó "la importancia de denunciar los abusos sexuales a menores para que los organismos puedan intervenir y llevar a los responsables ante la Justicia" y además informó que "con la sentencia dictada, el condenado fue detenido en prisión preventiva hasta que la condena quede firme, momento en el cual comenzará a cumplir su pena".
Un hombre de Puerto Madryn fue condenado a 22 años de prisión efectiva en una causa por abuso sexual intrafamiliar en perjuicio de una menor de edad.
El fallo fue dictado esta semana por la jueza Marcela Pérez Bogado,luego de que el jurado popular lo hallara culpable de múltiples delitos imputados por la Fiscalía durante el juicio desarrollado el viernes pasado.
La Fiscal Anya Pucheta, encargada de la investigación, presentó pruebas contundentes que demostraban la culpabilidad del acusado en casos de abuso sexual con acceso carnal, corrupción de menores y abuso simple, todos agravados por la situación de convivencia preexistente.
Los mismos ocurrieron durante más de una década hasta que se presentó la denuncia en 2021 y tomó intervención la Agencia de Violencia de Género y Delitos Sexuales de la Fiscalía.
Durante la audiencia de pedido de pena, la fiscalía solicitó una condena de 25 años, mientras que la defensa abogó por el mínimo de 10 años.
A su turno, Pucheta destacó "la importancia de denunciar los abusos sexuales a menores para que los organismos puedan intervenir y llevar a los responsables ante la Justicia" y además informó que "con la sentencia dictada, el condenado fue detenido en prisión preventiva hasta que la condena quede firme, momento en el cual comenzará a cumplir su pena".