En Chubut garantizan los medicamentos del PAMI
Eduardo Molina, presidente de la Cámara Farmacéutica, confirmó que al acuerdo para proveer de remedios gratis se prorrogó hasta el 10 de diciembre.
Eduardo Molina, presidente de la Cámara Farmacéutica del Chubut, explicó el acuerdo alcanzado con el PAMI junto a laboratorios, droguerías y la Confederación Farmacéutica Argentina. “El PAMI paga a todo un complejo de tres partes que individualmente, pone algo con el objetivo de que los medicamentos que se entregan a los afiliados sean prácticamente sin cargo”, dijo en Cadena Tiempo. Para pacientes crónicos, la cobertura es al cien por ciento.
“Las farmacias –insistió- no somos formadores de precios. El valor siempre es uniforme y lo fijan los laboratorios y la Secretaría de Comercio para las obras sociales y el Seguro de Salud”.
El contrato rubricado en 2017 vencía el 31 de marzo y se negoció una prórroga hasta noviembre. “Sigue siendo el mismo, con similares condiciones pero con la salvedad de la entrega de los medicamentos en virtud del sistema informático. Hubo irregularidades y medicamentos que no se correspondían a lo que debía ser”, sostuvo Molina.
Se entregan los medicamentos de acuerdo a la terapéutica que necesita el paciente en virtud del prescriptor, quien determina cantidad y dosis. “Ha ocurrido que superado el plazo de los tres meses de plazo del PAMI, muchos pacientes no volvieron al médico y se encuentran en la farmacia que el medicamento ya tiene un costo”.
Aclaró que está asegurada la provisión de medicamentos de la obra social y que no hay faltantes. “El prescriptor debe determinar la dolencia o afección, tiene que ser crónica. En algunos casos deberá pagar parte, como en las coberturas tipo, sobre ciertos medicamentos”.
Para pacientes oncológicos con medicamentos de alto costo, el referente de la Cámara Farmacéutica aclaró que la cobertura es propia del resto de las obras sociales y prepagas. “Si el paciente no tiene receta, por más que quiera comprar, no puede hacerlo ya que requiere de la prescripción médica. Debe contemplarse que el trámite esté hecho ya que no puede manejarse al libre albedrío. Hay condicionamientos del sistema que requiere de control y uso racional. El medicamento no es un bien comercial por más que haya directivas políticas para que así sea”.
El presidente de la Cámara sostuvo en “Antes que sea tarde” con respecto al plazo del contrato con el PAMI que “se prorrogó hasta el 10 de noviembre y dio buen resultado y las partes están interesadas en que continúe pese a la inflación, pandemia y trastornos. Siempre habrá alguna queja puntual pero el sistema sigue funcionando”.
Molina lamentó que este mecanismo “suple” el escaso haber de los jubilados. “Si tuvieran que comprar los medicamentos con lo que gana, no compraría ni una cuarta parte de lo que necesita. Éste es un paliativo muy grande”.
Eduardo Molina, presidente de la Cámara Farmacéutica del Chubut, explicó el acuerdo alcanzado con el PAMI junto a laboratorios, droguerías y la Confederación Farmacéutica Argentina. “El PAMI paga a todo un complejo de tres partes que individualmente, pone algo con el objetivo de que los medicamentos que se entregan a los afiliados sean prácticamente sin cargo”, dijo en Cadena Tiempo. Para pacientes crónicos, la cobertura es al cien por ciento.
“Las farmacias –insistió- no somos formadores de precios. El valor siempre es uniforme y lo fijan los laboratorios y la Secretaría de Comercio para las obras sociales y el Seguro de Salud”.
El contrato rubricado en 2017 vencía el 31 de marzo y se negoció una prórroga hasta noviembre. “Sigue siendo el mismo, con similares condiciones pero con la salvedad de la entrega de los medicamentos en virtud del sistema informático. Hubo irregularidades y medicamentos que no se correspondían a lo que debía ser”, sostuvo Molina.
Se entregan los medicamentos de acuerdo a la terapéutica que necesita el paciente en virtud del prescriptor, quien determina cantidad y dosis. “Ha ocurrido que superado el plazo de los tres meses de plazo del PAMI, muchos pacientes no volvieron al médico y se encuentran en la farmacia que el medicamento ya tiene un costo”.
Aclaró que está asegurada la provisión de medicamentos de la obra social y que no hay faltantes. “El prescriptor debe determinar la dolencia o afección, tiene que ser crónica. En algunos casos deberá pagar parte, como en las coberturas tipo, sobre ciertos medicamentos”.
Para pacientes oncológicos con medicamentos de alto costo, el referente de la Cámara Farmacéutica aclaró que la cobertura es propia del resto de las obras sociales y prepagas. “Si el paciente no tiene receta, por más que quiera comprar, no puede hacerlo ya que requiere de la prescripción médica. Debe contemplarse que el trámite esté hecho ya que no puede manejarse al libre albedrío. Hay condicionamientos del sistema que requiere de control y uso racional. El medicamento no es un bien comercial por más que haya directivas políticas para que así sea”.
El presidente de la Cámara sostuvo en “Antes que sea tarde” con respecto al plazo del contrato con el PAMI que “se prorrogó hasta el 10 de noviembre y dio buen resultado y las partes están interesadas en que continúe pese a la inflación, pandemia y trastornos. Siempre habrá alguna queja puntual pero el sistema sigue funcionando”.
Molina lamentó que este mecanismo “suple” el escaso haber de los jubilados. “Si tuvieran que comprar los medicamentos con lo que gana, no compraría ni una cuarta parte de lo que necesita. Éste es un paliativo muy grande”.