Bajo un sol radiante y una temperatura que llegaba a los 30 grados, las representantes de las Bibliotecas Populares de Puerto Madryn llevaron adelante una jornada de sueltas de libros en rechazo al DNU y al proyecto de la Ley Ómnibus que se trata en el Congreso de la Nación. La medida, que se replicó en todo el país, busca que el gobierno nacional deje de lado la quita del financiamiento a la CONABIP que asegura el funcionamiento de cada biblioteca, en particular en el proceso de cubrir los gastos corrientes.
Cabe destacar que ante la posición del gobierno nacional desde las bibliotecas populares existe una preocupación creciente por el impacto que puede generar la sanción de la iniciativa que dejaría sin financiamiento a estas instituciones.
La ley 23.351 es el elemento fundamental para sostener el principal fondo nacional que asegura la sustentabilidad de las bibliotecas populares, en particular porque asignan los fondos para el pago de los gastos corrientes, inversiones en materia de materiales e infraestructura.
Con los cambios que se propician desde el gobierno nacional las bibliotecas populares ven amenazados su futuro con el proyecto de la Ley Ómnibus. Ante el escenario de incertidumbre de los representantes de las bibliotecas populares a nivel nacional llevaron adelante una actividad con el fin de visibilizar la preocupación que los rodea y exigir la continuidad del financiamiento que asegura el funcionamiento de dichas instituciones. En Puerto Madryn el punto de encuentro fue el monumento a la Mujer Galesa donde las representantes de las bibliotecas se reunieron para concretar una suelta de libros en reclamo a esta política.
Allí se explicó a toda la comunidad cómo trabaja una biblioteca popular, sus necesidades, sus costos y la necesidad de mantener su financiación para su funcionamiento y desde allí la necesidad de sostener el subsidio que llega desde CONABIP.
En la ciudad del Golfo hay seis bibliotecas populares que corren peligro de continuidad. Desde allí que los representantes de cada una de ellas comenzaron a reunirse para fijar posiciones y articular acciones para revertir el proyecto.
Cabe recordar que las Bibliotecas Populares (BP) son asociaciones civiles sin fines de lucro que cumplen una función social imprescindible en los barrios, en materia educativa, cultural, social y de salud.
Son instituciones de gran impacto en las comunidades en tiempos de crisis sociales y económicas ya que son espacios de contención, información, de pensamiento y de debate, se detalló.#
Bajo un sol radiante y una temperatura que llegaba a los 30 grados, las representantes de las Bibliotecas Populares de Puerto Madryn llevaron adelante una jornada de sueltas de libros en rechazo al DNU y al proyecto de la Ley Ómnibus que se trata en el Congreso de la Nación. La medida, que se replicó en todo el país, busca que el gobierno nacional deje de lado la quita del financiamiento a la CONABIP que asegura el funcionamiento de cada biblioteca, en particular en el proceso de cubrir los gastos corrientes.
Cabe destacar que ante la posición del gobierno nacional desde las bibliotecas populares existe una preocupación creciente por el impacto que puede generar la sanción de la iniciativa que dejaría sin financiamiento a estas instituciones.
La ley 23.351 es el elemento fundamental para sostener el principal fondo nacional que asegura la sustentabilidad de las bibliotecas populares, en particular porque asignan los fondos para el pago de los gastos corrientes, inversiones en materia de materiales e infraestructura.
Con los cambios que se propician desde el gobierno nacional las bibliotecas populares ven amenazados su futuro con el proyecto de la Ley Ómnibus. Ante el escenario de incertidumbre de los representantes de las bibliotecas populares a nivel nacional llevaron adelante una actividad con el fin de visibilizar la preocupación que los rodea y exigir la continuidad del financiamiento que asegura el funcionamiento de dichas instituciones. En Puerto Madryn el punto de encuentro fue el monumento a la Mujer Galesa donde las representantes de las bibliotecas se reunieron para concretar una suelta de libros en reclamo a esta política.
Allí se explicó a toda la comunidad cómo trabaja una biblioteca popular, sus necesidades, sus costos y la necesidad de mantener su financiación para su funcionamiento y desde allí la necesidad de sostener el subsidio que llega desde CONABIP.
En la ciudad del Golfo hay seis bibliotecas populares que corren peligro de continuidad. Desde allí que los representantes de cada una de ellas comenzaron a reunirse para fijar posiciones y articular acciones para revertir el proyecto.
Cabe recordar que las Bibliotecas Populares (BP) son asociaciones civiles sin fines de lucro que cumplen una función social imprescindible en los barrios, en materia educativa, cultural, social y de salud.
Son instituciones de gran impacto en las comunidades en tiempos de crisis sociales y económicas ya que son espacios de contención, información, de pensamiento y de debate, se detalló.#