Todos por Trelew

En 60 días, un trelewense, Ignacio “Nacho” Torres, asumirá la gobernación de la provincia del Chubut. Y ese mismo día, Gerardo Merino jurará como intendente de la ciudad de Trelew.

Ese momento marcará un punto de inflexión para vecinos y vecinas, que desde hace muchos años se encuentran atrapados entre el desencanto y la postergación.

Sin embargo, soplan vientos de cambio que despiertan ilusiones, generan esperanza y provocan una energía positiva que se palpa en cada rincón de la ciudad.

Hay razones para ser optimistas. El largo período de transición que comenzó el pasado 16 de abril, permitió que el intendente electo se involucrara en la toma de decisiones de algunos de los temas cruciales de la ciudad.
La crisis del transporte y la deuda del municipio con la empresa prestataria del servicio de limpieza, requirió del involucramiento de Merino y de su futuro equipo de gobierno.

Lo que la comunidad percibe, y esa es la base de la esperanza, es que el futuro jefe político de Trelew identifica con claridad los problemas, ya está encima de ellos y va formando un equipo calificado para atacar las dificultades principales desde el primer día de su gestión.

La llegada a Rawson de un gobernador trelewense es un dato que tampoco se puede soslayar. “Nacho” Torres conoce la realidad de Trelew y nada de lo que sucede en sus pagos le resbala. Es natural que un mandatario provincial esté dispuesto a ayudar a la ciudad de la que es oriundo.

Por lo tanto, Merino sabe que, ante situaciones extraordinarias, podrá llamar a Fontana 50, y encontrará un aliado dispuesto a colaborar cuando sea necesario. Por lo menos, es lo que debería ocurrir, con un intendente y un gobernador, que nacieron en la misma ciudad y forman parte del mismo espacio político.

Pero los gestos alentadores no solo llegan desde el sector al que pertenecen los futuros gobernantes de Trelew y Chubut. El diputado provincial electo, Emanuel Coliñir, uno de los jóvenes con mayor proyección política de la provincia, también dejó un mensaje esperanzador.

Coliñir remarcó la necesidad de arribar a acuerdos programáticos que privilegien los intereses de Trelew, por encima de los réditos partidarios.

“Que sepa Merino que en la Legislatura habrá alguien que peleará por los intereses de Trelew y que aplaudirá cada uno de sus éxitos” dijo el dirigente peronista. Ese es el camino. El único camino posible para sacar a la ciudad de la profunda y lacerante crisis en la que se encuentra inmersa.

En la misma sintonía, Trelew necesitará hermanarse con el resto de las ciudades de la comarca. Que Gerardo Merino y Gustavo Sastre hayan limado las asperezas que surgieron la semana pasada, habla de buenos reflejos para desbaratar conflictos que cuando no se atienden a tiempo, hacen daño en las relaciones entre ciudades. Lo último que se necesita para salir de la crisis es estar peleado con las ciudades vecinas. Para recuperarse y crecer, Trelew necesitará de Madryn y de cada uno de los pueblos de la comarca, que serán aliados estratégicos e imprescindibles.

Por último, no habrá un cambio profundo en Trelew sin el compromiso de todos los actores de la sociedad. Esta ciudad, ejemplo de creatividad y coraje, protagonista de la historia grande de Chubut, tiene que reconocerse en esos jalones de los que formó parte, para ser el motor de la transformación.

La cosa, es entre todos. El destino de Trelew pertenece a cada uno de los trelewenses. Y del compromiso que asuma cada uno de ellos, dependerá el futuro de la ciudad.