Jorge Alfonso, abogado de la defensa, se explayó en el cierre del debate y explicó que se pidieron nulidades.
"No hay elementos para sostener los roles y el entramado del hecho. Lo del consentimiento se va a dirimir", remarcó.
Antes de retirarse de tribunales, el defensor de Tomás Domínguez hizo referencia a la inocencia de sus clientes: "Me da pena que haya delitos peores que estos y los acusados estén libres, es la justicia que tenemos".
Los seis jóvenes llegan al juicio con prisión preventiva e imputados por el delito de "coautoría del delito de abuso sexual con acceso carnal agravado".
Marino Cid Aparicio, abogado de la panadera que es testigo del caso, habló sobre las agresiones que sufrió antes del arranque del juicio y de los detalles de la audiencia.
"Sufrí una agresión por parte de familiares de los imputados que están desde temprano protestando. Están en su derecho, ya que no pueden entrar a la sala, pero no deja de ser un feo momento", cuestionó.
Acerca del debate indicó: "Fue tranquila porque se hizo la acusación formal a los imputados en el cual hubo planteos de nulidad a los que no dieron lugar".
En el juicio, que se realizará a puertas cerradas porque es un delito de instancia privada que impulsó la víctima, cuya identidad se mantiene en reserva, se debate sobre la acusación con la cual se los procesó a los acusados como coautores del abuso sexual con acceso carnal pese a que no fueron todos quienes la violaron.
Es que, según la investigación, Domínguez y Retondo estaban fuera del vehículo donde se cometió el hecho, pese a lo cual ellos con su accionar "convalidaron el ataque sexual".
El vehículo estaba estacionado en la puerta de una panadería ubicada en la calle Serrano al 1300 y era propiedad de Ciongo Pasotti, quien, con Ramos, subió junto con la víctima en el asiento delantero junto con Ramos. En tanto, Lykan y Cruzzoni, estaban ubicados en el asiento trasero.
Luego se comprobó que la joven conoció a uno de los acusados en un "after" de Palermo, que luego estuvieron consumiendo alcohol y desde allí la llevó al vehículo.
Se sospecha que, incluso, se le suministró droga, ya que, por estudios médicos, se determinó que la mujer tenía presencia de marihuana, cuando ella declaró que no había consumido por propia voluntad.
La acusación durante el debate se encuentra a cargo del fiscal de juicio Fernando Klappenbach y los abogados querellantes Hugo Figueroa y Osvaldo Cantoro, estos últimos representando a la víctima.
Se esperan unos 30 testigos, mientras que también estará la declaración de la víctima, la cual aún no tiene fecha fijada. .
Jorge Alfonso, abogado de la defensa, se explayó en el cierre del debate y explicó que se pidieron nulidades.
"No hay elementos para sostener los roles y el entramado del hecho. Lo del consentimiento se va a dirimir", remarcó.
Antes de retirarse de tribunales, el defensor de Tomás Domínguez hizo referencia a la inocencia de sus clientes: "Me da pena que haya delitos peores que estos y los acusados estén libres, es la justicia que tenemos".
Los seis jóvenes llegan al juicio con prisión preventiva e imputados por el delito de "coautoría del delito de abuso sexual con acceso carnal agravado".
Marino Cid Aparicio, abogado de la panadera que es testigo del caso, habló sobre las agresiones que sufrió antes del arranque del juicio y de los detalles de la audiencia.
"Sufrí una agresión por parte de familiares de los imputados que están desde temprano protestando. Están en su derecho, ya que no pueden entrar a la sala, pero no deja de ser un feo momento", cuestionó.
Acerca del debate indicó: "Fue tranquila porque se hizo la acusación formal a los imputados en el cual hubo planteos de nulidad a los que no dieron lugar".
En el juicio, que se realizará a puertas cerradas porque es un delito de instancia privada que impulsó la víctima, cuya identidad se mantiene en reserva, se debate sobre la acusación con la cual se los procesó a los acusados como coautores del abuso sexual con acceso carnal pese a que no fueron todos quienes la violaron.
Es que, según la investigación, Domínguez y Retondo estaban fuera del vehículo donde se cometió el hecho, pese a lo cual ellos con su accionar "convalidaron el ataque sexual".
El vehículo estaba estacionado en la puerta de una panadería ubicada en la calle Serrano al 1300 y era propiedad de Ciongo Pasotti, quien, con Ramos, subió junto con la víctima en el asiento delantero junto con Ramos. En tanto, Lykan y Cruzzoni, estaban ubicados en el asiento trasero.
Luego se comprobó que la joven conoció a uno de los acusados en un "after" de Palermo, que luego estuvieron consumiendo alcohol y desde allí la llevó al vehículo.
Se sospecha que, incluso, se le suministró droga, ya que, por estudios médicos, se determinó que la mujer tenía presencia de marihuana, cuando ella declaró que no había consumido por propia voluntad.
La acusación durante el debate se encuentra a cargo del fiscal de juicio Fernando Klappenbach y los abogados querellantes Hugo Figueroa y Osvaldo Cantoro, estos últimos representando a la víctima.
Se esperan unos 30 testigos, mientras que también estará la declaración de la víctima, la cual aún no tiene fecha fijada. .