El intendente en licencia, Juan Pablo Luque, junto al viceintendente Othar Macharashvili inauguraron los vestuarios que homenajean a dos jugadores fallecidos del club Infantil, Social y Deportivo Nueva Generación. Además, Luque anunció que “antes que yo deje de ser intendente, vamos a tener esa cancha de césped sintético como se merecen”. Ayer se firmó el convenio.
El acto se realizó en el predio del club, en barrio Abel Amaya de Comodoro Rivadavia. Descubrieron placas y los familiares de dos jugadores fallecidos recibieron un especial reconocimiento. El vestuario local lleva el nombre de Pablo “Caco” Herrero, y el visitante Maximiliano Carrizo.
Luque recordó “cómo empezó todo para poder disfrutar y valorar lo que se ha logrado, con gente con pasión y corazón de verdad. Cuando yo era viceintendente vinimos a recorrer las obras y les dijimos que los íbamos a ayudar”.
Macharashvili expuso que “los que vimos nacer a este club, cómo se fue creando, construyendo y persiguiendo sus sueños. Y hoy cuentan con los mejores vestuarios de todos los clubes en la ciudad”.
El presidente del Ente Comodoro Deportes, Hernán Martínez, recordó que “cuando empezaron se cambiaban detrás de un tamarisco y creían en el sueño de construir un club importante que acerque a la familia. Un club que empezó a pensar que podía tener vestuarios, luz, gas y ahora puedan disfrutar del espacio que tienen”.
El presidente del club Marcos Fran, agradeció a Luque porque “ante de llegar a ser intendente, nos prometiste que nos ibas a ayudar y cumpliste”.
El socio fundador del club, Armando Tula, reflexionó que “desde 1997 que formamos Nueva Generación, sabíamos que merecíamos estar en la Liga de Fútbol, luego a lo largo de los años de deambular por distintas canchas, un amigo en el año 2000 nos cedió un espacio donde hicimos una cancha que denominaron ‘la cancha de los caños rojos’, y ahí tuvimos nuestro primer vestuario, que era una mata de tamarisco que nos albergaba a nosotros del frío y las inclemencias, principalmente del viento”.
Tula rememoró que “fueron muchísimos años de peregrinar y hoy estamos en casa”. Dedicó un párrafo especial a los chicos que han pasado por la institución. “Hoy los reivindicamos desgraciadamente cuando están desaparecidos físicamente, pero mientras nosotros los recordemos, ellos estarán presentes y jamás serán olvidados”.#
El intendente en licencia, Juan Pablo Luque, junto al viceintendente Othar Macharashvili inauguraron los vestuarios que homenajean a dos jugadores fallecidos del club Infantil, Social y Deportivo Nueva Generación. Además, Luque anunció que “antes que yo deje de ser intendente, vamos a tener esa cancha de césped sintético como se merecen”. Ayer se firmó el convenio.
El acto se realizó en el predio del club, en barrio Abel Amaya de Comodoro Rivadavia. Descubrieron placas y los familiares de dos jugadores fallecidos recibieron un especial reconocimiento. El vestuario local lleva el nombre de Pablo “Caco” Herrero, y el visitante Maximiliano Carrizo.
Luque recordó “cómo empezó todo para poder disfrutar y valorar lo que se ha logrado, con gente con pasión y corazón de verdad. Cuando yo era viceintendente vinimos a recorrer las obras y les dijimos que los íbamos a ayudar”.
Macharashvili expuso que “los que vimos nacer a este club, cómo se fue creando, construyendo y persiguiendo sus sueños. Y hoy cuentan con los mejores vestuarios de todos los clubes en la ciudad”.
El presidente del Ente Comodoro Deportes, Hernán Martínez, recordó que “cuando empezaron se cambiaban detrás de un tamarisco y creían en el sueño de construir un club importante que acerque a la familia. Un club que empezó a pensar que podía tener vestuarios, luz, gas y ahora puedan disfrutar del espacio que tienen”.
El presidente del club Marcos Fran, agradeció a Luque porque “ante de llegar a ser intendente, nos prometiste que nos ibas a ayudar y cumpliste”.
El socio fundador del club, Armando Tula, reflexionó que “desde 1997 que formamos Nueva Generación, sabíamos que merecíamos estar en la Liga de Fútbol, luego a lo largo de los años de deambular por distintas canchas, un amigo en el año 2000 nos cedió un espacio donde hicimos una cancha que denominaron ‘la cancha de los caños rojos’, y ahí tuvimos nuestro primer vestuario, que era una mata de tamarisco que nos albergaba a nosotros del frío y las inclemencias, principalmente del viento”.
Tula rememoró que “fueron muchísimos años de peregrinar y hoy estamos en casa”. Dedicó un párrafo especial a los chicos que han pasado por la institución. “Hoy los reivindicamos desgraciadamente cuando están desaparecidos físicamente, pero mientras nosotros los recordemos, ellos estarán presentes y jamás serán olvidados”.#