¿Por qué es feriado mañana en Chubut?
Un 13 de diciembre, pero del año 1907, se produjo el descubrimiento del primer yacimiento petrolero en la Argentina. De qué forma y en qué ciudad tuvo lugar el hallazgo.
Como cada 13 de diciembre, este martes se celebra el Día Nacional del Petróleo. Y el origen de este festejo se remonta a esa fecha del año 1907, cuando el descubrimiento del primer yacimiento petrolero argentino tuvo lugar en Comodoro Rivadavia.
Tras el hallazgo, la mencionada ciudad -que en ese momento era un pequeño poblado de unas 50 familias-, se convirtió en un polo del desarrollo.
Según cuenta la historia, el 12 de diciembre de aquel año comenzó a salir de la tierra un líquido aceitoso y burbujeante, con aroma a kerosene. Los empleados, que trabajaban en el pozo en la búsqueda de agua, continuaron con la perforación hasta la mañana del día 13, cuando al llegar a unos 540 metros de profundidad apareció una “materia viscosa .
De forma inmediata, se comunicó la novedad a Buenos Aires y, de esta manera, la cuestión económica, política y social de la Nación dio un giro inesperado. A partir de ese momento, el país comenzó a entender el valor estratégico y potencial de la materia.
Apenas notificado el descubrimiento, el entonces presidente de la Nación José Figueroa Alcorta decretó “una reserva fiscal de 5 leguas a todo rumbo, tomando como centro el de la población de Comodoro Rivadavia para así proteger los nuevos recursos de petróleo encontrados.
Al cabo de unos años, el equipo Patria -dirigido por el ingeniero Enrique Cánepa- descubrió en Plaza Huincul (a 605 metros de profundidad), una nueva reserva de hidrocarburos, la cual fue el puntapié inicial de la actividad en la provincia del Neuquén.
Cabe recordar que el general Enrique Mosconi fue quien mejor comprendió los nuevos escenarios que abría el petróleo e impulsó, en 1922, la creación de Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF): la primera empresa petrolera nacional integrada verticalmente dedicada a la explotación, el refino y la comercialización.
En la actualidad, el petróleo es un recurso esencial de las sociedades y resulta imprescindible para la dinámica de nuestra civilización.
Como cada 13 de diciembre, este martes se celebra el Día Nacional del Petróleo. Y el origen de este festejo se remonta a esa fecha del año 1907, cuando el descubrimiento del primer yacimiento petrolero argentino tuvo lugar en Comodoro Rivadavia.
Tras el hallazgo, la mencionada ciudad -que en ese momento era un pequeño poblado de unas 50 familias-, se convirtió en un polo del desarrollo.
Según cuenta la historia, el 12 de diciembre de aquel año comenzó a salir de la tierra un líquido aceitoso y burbujeante, con aroma a kerosene. Los empleados, que trabajaban en el pozo en la búsqueda de agua, continuaron con la perforación hasta la mañana del día 13, cuando al llegar a unos 540 metros de profundidad apareció una “materia viscosa .
De forma inmediata, se comunicó la novedad a Buenos Aires y, de esta manera, la cuestión económica, política y social de la Nación dio un giro inesperado. A partir de ese momento, el país comenzó a entender el valor estratégico y potencial de la materia.
Apenas notificado el descubrimiento, el entonces presidente de la Nación José Figueroa Alcorta decretó “una reserva fiscal de 5 leguas a todo rumbo, tomando como centro el de la población de Comodoro Rivadavia para así proteger los nuevos recursos de petróleo encontrados.
Al cabo de unos años, el equipo Patria -dirigido por el ingeniero Enrique Cánepa- descubrió en Plaza Huincul (a 605 metros de profundidad), una nueva reserva de hidrocarburos, la cual fue el puntapié inicial de la actividad en la provincia del Neuquén.
Cabe recordar que el general Enrique Mosconi fue quien mejor comprendió los nuevos escenarios que abría el petróleo e impulsó, en 1922, la creación de Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF): la primera empresa petrolera nacional integrada verticalmente dedicada a la explotación, el refino y la comercialización.
En la actualidad, el petróleo es un recurso esencial de las sociedades y resulta imprescindible para la dinámica de nuestra civilización.