Momentos de confusión se vivieron en las instalaciones del alojamiento de adultos mayores de INPAT por la presencia de personal policial en el marco de una inspección de rutina.
Federico Ruffa, abogado de la institución, explicó en Cadena Tiempo que “sin previo aviso llegaron alrededor de 10 policías. Cruzaron un auto civil en la entrada. Manifestaron que estaban allí porque había una suerte de inspección en el geriátrico, pero no sabían bien la situación. En ese marco llegaron inspectores del Ministerio de Salud. Se hizo todo un despliegue sin saber las razones porque nunca hubo un inconveniente en el lugar”.
Para Ruffa, lo acontecido fue “un papelón del Ministerio de Salud orquestado por la gente Seros”. Manifestó que la maniobra fue “organizada por personas que les importa nada la salud de las personas y lo único que quieren hacer es un negocio”, y advirtió que “serán denunciados por abuso de autoridad”.
Dirigió las cusas de la situación al conflicto que mantiene Seros con la firma INPAT: “Obviamente está relacionado con eso. Pedimos que esto se termine de una vez por todas con el menor daño para los trabajadores y los pacientes. Este desprecio por los afiliados es inentendible. A la empresa le gustaría continuar. Lo que se discute y defiende es la situación de los trabajadores y pacientes”, argumentó.
Momentos de confusión se vivieron en las instalaciones del alojamiento de adultos mayores de INPAT por la presencia de personal policial en el marco de una inspección de rutina.
Federico Ruffa, abogado de la institución, explicó en Cadena Tiempo que “sin previo aviso llegaron alrededor de 10 policías. Cruzaron un auto civil en la entrada. Manifestaron que estaban allí porque había una suerte de inspección en el geriátrico, pero no sabían bien la situación. En ese marco llegaron inspectores del Ministerio de Salud. Se hizo todo un despliegue sin saber las razones porque nunca hubo un inconveniente en el lugar”.
Para Ruffa, lo acontecido fue “un papelón del Ministerio de Salud orquestado por la gente Seros”. Manifestó que la maniobra fue “organizada por personas que les importa nada la salud de las personas y lo único que quieren hacer es un negocio”, y advirtió que “serán denunciados por abuso de autoridad”.
Dirigió las cusas de la situación al conflicto que mantiene Seros con la firma INPAT: “Obviamente está relacionado con eso. Pedimos que esto se termine de una vez por todas con el menor daño para los trabajadores y los pacientes. Este desprecio por los afiliados es inentendible. A la empresa le gustaría continuar. Lo que se discute y defiende es la situación de los trabajadores y pacientes”, argumentó.