“Se trata de resolver la situación por medio de un acuerdo con la persona, que sea racional a través de la escucha activa y lograr el cambio de conducta”, sintetizó el comisario inspector Cristian Soto (jefe del GEOP) al referirse a un área muy sensible y crucial, como así también poco conocida de la Policía como lo es el ENIC (Equipo de Negociación de Incidentes Críticos) que trabajan en hechos en que, por equis razón alguien pone en riesgo la vida de terceros.
En las últimas horas, se requirió su intervención ante un hecho en el que un hombre se atrincheró junto a su familia amenazándola con un arma y lograron resolverlo sin ninguna consecuencia hacia los rehenes ni el victimario.
En una entrevista con Jornada Play hablaron los protagonistas, siempre invisibilizados, pero que aportan su formación y su conocimiento para que quien esté cometiendo el delito desista, entre en razón y revierta su comportamiento.
Soto contó cómo actuaron en el último caso. “Nosotros al tomar conocimiento de esta situación, comenzamos con la convocatoria del personal, no solo del grupo especial, sino del equipo de negociación”.
Habló del protocolo. “Establece que en situaciones de crisis quienes deben intervenir es el GEOP, el equipo de negociación, y se conforma un grupo de resolución de incidentes. Con una cabeza que es la máxima autoridad del lugar, el Jefe de Unidad Regional y en este caso también estuvo el director de seguridad, quien asume la responsabilidad en el momento y toma la toma de decisiones”, explicó.
Describió las tareas del Equipo de Negociaciones. “Es el portavoz de la autoridad que tiene el nexo directo con la persona en crisis y quienes tienen la función de llevar adelante la vía de negociación tratar de resolver la situación por intermedio de llegar a un acuerdo con esta persona, en principio a través de la escucha activa y las escalas de cambio de conducta”, ejemplificó.
Puntualizó que lo que se busca, es que “la persona empiece a ser racional y tome la decisión de, obviamente, dejar las armas y entregarse, rendirse, como se dice”, reiteró.
Agregó en ese sentido que “el ENIC se crea a partir de la conformación del protocolo de situaciones de crisis, pero toma una entidad diferente después de lo que fue la diplomatura internacional en negociación. Hasta ese momento había 12 negociadores en nuestra policía y a partir de ahí se capacitaron unos 30, pero hay suficientes como para conformar diferentes turnos de negociadores en todas las unidades regionales”, indicó.
Soto, confirmó que a partir del año pasado se designó como jefa, la Comisario Mayor Inspector Paulí y ella, está a cargo de todos los negociadores. “Hace todos los meses, de manera cuatrimestral, un régimen de turnos pasivos para la intervención ante estas situaciones. Si bien tenemos negociadores dentro de lo que es el GEOP, también están quienes trabajan en cada una de las dependencias”.
Dijo al respecto que “el personal que intervino en esta última situación presta servicios en la División Drogas y en la División Canes; como así también, hay negociadores en Comisarías, Brigadas de investigaciones y demás. Prestan funciones en otro lugar pero ante una situación de crisis son convocados y pasan a formar parte del grupo de resolución de incidentes”, reveló.
El jefe de la GEOP detalló además que según la situación a intervenir se decide qué personal actuará. Si hombre o mujer y con qué perfil para lograr el éxito en la disuasión. “Normalmente son dos, un equipo de negociación puede ser conformado por la mayor cantidad de negociadores. En función de las situaciones que se toma la decisión de quién va a ser el negociador principal, el secundario, el jefe de negociación en ese momento, la máxima autoridad dentro de los negociadores. Hay diferentes roles, pero puede ser una mujer o un varón dependiendo de las circunstancias”.
Es acá donde ejemplificó que “puede darse una situación como se dio de que aquella persona que está en crisis es una mujer y muchas veces son reticentes a la intervención de un varón. Entonces, bueno, ahí es una cuestión estratégica también”.
¿Van como personal civil? Fue la pregunta, a la que respondió: “Se pretende siempre trabajar de civil. Justamente muchas veces las intervenciones son reticentes a la presencia policial y por eso se busca tener esa visión ante la situación”, aseveró.
“Difícil de abordar”
La oficial inspector Bobadilla, integrante del Grupo de Negociaciones también dio su testimonio a Jornada Play. Ella intervino en el último caso registrado en Trelew donde una persona se atrincheró. “Fue una experiencia, en principio, medio difícil de abordar. Porque la persona tenía antecedentes psiquiátricos, había estado internada en salud mental, tomaba medicación, hacía un abuso de ello”, comenzó diciendo.
Y agregó: “Después de lograr resolver el conflicto, fue gratificante. Integro el equipo hace tres años. Se conformó el ENIC el año pasado, se conformó luego de la diplomatura dictada. Se sumaron varios negociadores y a partir de ahí se pudieron conformar distintas guardias”, resumió.
Mucha empatía
¿Qué hay que tener para ser un negociador?. La mujer policía no dudó en contestar que “hay que tener escucha activa empatía tratar de ponerse en el lugar de la otra persona escuchar y estar abierto a todo, digamos, porque son distintas personalidades, distintas personas, distintas edades, distintas situaciones que atraviesan y sin juzgar. Dejar que la persona hable, que fluya y después pueda comenzar por ahí a contar sus problemas y llegar a tratar de ir a un acuerdo”, puntualizó.
Un caso
Sobre los casos en los que intervino más allá del último en Trelew, recordó que “anteriormente estuve en el caso de una mujer que también se atrincheró con un arma blanca en un domicilio en la zona céntrica con sus dos nietas, también chiquititas, y también una paciente psiquiátrica. No estaba tomando la medicación y esto causó en ella un brote psicótico, la notificaron de una medida de Comisaría a la Mujer y esto causó mucha frustración. No supo qué hacer y optó por atrincherarse en la vivienda amenazando con lastimar a sus nietas si no se le respondía como ella quería”.
“Habló conmigo”
El sargento Gurrumendi es también pieza fundamental en el Grupo de Negociación de Policía. Presta además, servicios en la División Canes de Trelew. Contó que tuvo alguna experiencia en los años 2019-2021 cuando trabajaba en la comisaría Tercera.
En el último caso de Trelew, del hombre atrincherado, fue él, quien tuvo un diálogo directo con el victimario. “Nos llevó cerca de dos horas y veinte la negociación. El primero que toma contacto o establece un diálogo con él fui yo desde una zona segura, tenía una cobertura de un mural de un galpón, de una entrada de un galpón de un garage y desde ahí, entro la comunicación con este hombre que se veía muy alterado y apuntaba, hasta que logramos de a poquito hacerlo calmar y desistir de su actitud”.
Continuó con el relato: “Luego, se sumó mi compañera y pudimos llegar al objetivo. A lo largo de mi carrera siempre que pude me capacité hasta donde me dio lo físico y lo intelectual así que siempre traté de capacitarme”.
“Se trata de resolver la situación por medio de un acuerdo con la persona, que sea racional a través de la escucha activa y lograr el cambio de conducta”, sintetizó el comisario inspector Cristian Soto (jefe del GEOP) al referirse a un área muy sensible y crucial, como así también poco conocida de la Policía como lo es el ENIC (Equipo de Negociación de Incidentes Críticos) que trabajan en hechos en que, por equis razón alguien pone en riesgo la vida de terceros.
En las últimas horas, se requirió su intervención ante un hecho en el que un hombre se atrincheró junto a su familia amenazándola con un arma y lograron resolverlo sin ninguna consecuencia hacia los rehenes ni el victimario.
En una entrevista con Jornada Play hablaron los protagonistas, siempre invisibilizados, pero que aportan su formación y su conocimiento para que quien esté cometiendo el delito desista, entre en razón y revierta su comportamiento.
Soto contó cómo actuaron en el último caso. “Nosotros al tomar conocimiento de esta situación, comenzamos con la convocatoria del personal, no solo del grupo especial, sino del equipo de negociación”.
Habló del protocolo. “Establece que en situaciones de crisis quienes deben intervenir es el GEOP, el equipo de negociación, y se conforma un grupo de resolución de incidentes. Con una cabeza que es la máxima autoridad del lugar, el Jefe de Unidad Regional y en este caso también estuvo el director de seguridad, quien asume la responsabilidad en el momento y toma la toma de decisiones”, explicó.
Describió las tareas del Equipo de Negociaciones. “Es el portavoz de la autoridad que tiene el nexo directo con la persona en crisis y quienes tienen la función de llevar adelante la vía de negociación tratar de resolver la situación por intermedio de llegar a un acuerdo con esta persona, en principio a través de la escucha activa y las escalas de cambio de conducta”, ejemplificó.
Puntualizó que lo que se busca, es que “la persona empiece a ser racional y tome la decisión de, obviamente, dejar las armas y entregarse, rendirse, como se dice”, reiteró.
Agregó en ese sentido que “el ENIC se crea a partir de la conformación del protocolo de situaciones de crisis, pero toma una entidad diferente después de lo que fue la diplomatura internacional en negociación. Hasta ese momento había 12 negociadores en nuestra policía y a partir de ahí se capacitaron unos 30, pero hay suficientes como para conformar diferentes turnos de negociadores en todas las unidades regionales”, indicó.
Soto, confirmó que a partir del año pasado se designó como jefa, la Comisario Mayor Inspector Paulí y ella, está a cargo de todos los negociadores. “Hace todos los meses, de manera cuatrimestral, un régimen de turnos pasivos para la intervención ante estas situaciones. Si bien tenemos negociadores dentro de lo que es el GEOP, también están quienes trabajan en cada una de las dependencias”.
Dijo al respecto que “el personal que intervino en esta última situación presta servicios en la División Drogas y en la División Canes; como así también, hay negociadores en Comisarías, Brigadas de investigaciones y demás. Prestan funciones en otro lugar pero ante una situación de crisis son convocados y pasan a formar parte del grupo de resolución de incidentes”, reveló.
El jefe de la GEOP detalló además que según la situación a intervenir se decide qué personal actuará. Si hombre o mujer y con qué perfil para lograr el éxito en la disuasión. “Normalmente son dos, un equipo de negociación puede ser conformado por la mayor cantidad de negociadores. En función de las situaciones que se toma la decisión de quién va a ser el negociador principal, el secundario, el jefe de negociación en ese momento, la máxima autoridad dentro de los negociadores. Hay diferentes roles, pero puede ser una mujer o un varón dependiendo de las circunstancias”.
Es acá donde ejemplificó que “puede darse una situación como se dio de que aquella persona que está en crisis es una mujer y muchas veces son reticentes a la intervención de un varón. Entonces, bueno, ahí es una cuestión estratégica también”.
¿Van como personal civil? Fue la pregunta, a la que respondió: “Se pretende siempre trabajar de civil. Justamente muchas veces las intervenciones son reticentes a la presencia policial y por eso se busca tener esa visión ante la situación”, aseveró.
“Difícil de abordar”
La oficial inspector Bobadilla, integrante del Grupo de Negociaciones también dio su testimonio a Jornada Play. Ella intervino en el último caso registrado en Trelew donde una persona se atrincheró. “Fue una experiencia, en principio, medio difícil de abordar. Porque la persona tenía antecedentes psiquiátricos, había estado internada en salud mental, tomaba medicación, hacía un abuso de ello”, comenzó diciendo.
Y agregó: “Después de lograr resolver el conflicto, fue gratificante. Integro el equipo hace tres años. Se conformó el ENIC el año pasado, se conformó luego de la diplomatura dictada. Se sumaron varios negociadores y a partir de ahí se pudieron conformar distintas guardias”, resumió.
Mucha empatía
¿Qué hay que tener para ser un negociador?. La mujer policía no dudó en contestar que “hay que tener escucha activa empatía tratar de ponerse en el lugar de la otra persona escuchar y estar abierto a todo, digamos, porque son distintas personalidades, distintas personas, distintas edades, distintas situaciones que atraviesan y sin juzgar. Dejar que la persona hable, que fluya y después pueda comenzar por ahí a contar sus problemas y llegar a tratar de ir a un acuerdo”, puntualizó.
Un caso
Sobre los casos en los que intervino más allá del último en Trelew, recordó que “anteriormente estuve en el caso de una mujer que también se atrincheró con un arma blanca en un domicilio en la zona céntrica con sus dos nietas, también chiquititas, y también una paciente psiquiátrica. No estaba tomando la medicación y esto causó en ella un brote psicótico, la notificaron de una medida de Comisaría a la Mujer y esto causó mucha frustración. No supo qué hacer y optó por atrincherarse en la vivienda amenazando con lastimar a sus nietas si no se le respondía como ella quería”.
“Habló conmigo”
El sargento Gurrumendi es también pieza fundamental en el Grupo de Negociación de Policía. Presta además, servicios en la División Canes de Trelew. Contó que tuvo alguna experiencia en los años 2019-2021 cuando trabajaba en la comisaría Tercera.
En el último caso de Trelew, del hombre atrincherado, fue él, quien tuvo un diálogo directo con el victimario. “Nos llevó cerca de dos horas y veinte la negociación. El primero que toma contacto o establece un diálogo con él fui yo desde una zona segura, tenía una cobertura de un mural de un galpón, de una entrada de un galpón de un garage y desde ahí, entro la comunicación con este hombre que se veía muy alterado y apuntaba, hasta que logramos de a poquito hacerlo calmar y desistir de su actitud”.
Continuó con el relato: “Luego, se sumó mi compañera y pudimos llegar al objetivo. A lo largo de mi carrera siempre que pude me capacité hasta donde me dio lo físico y lo intelectual así que siempre traté de capacitarme”.