El vehículo, de tecnología 100 por ciento brasileña, despegó a las 13:19 y permaneció en el espacio durante 2 minutos y 50 segundos. A continuación cayó en el Océano Atlántico.
La misión completa duró 5 minutos y 50 segundos y puso fin a la primera fase de la Operación Potiguar. Se trata de un cohete de sondeo suborbital VS-30, de unos ocho metros de longitud y 1,5 toneladas de peso al despegue.
El vehículo puede transportar cargas de hasta 330 kilos. En el vuelo del viernes, el cohete transportó más de mil cartas escritas por alumnos de escuelas públicas. Aunque los vehículos suborbitales no son capaces de entrar en órbita, pueden alcanzar altitudes que superan la atmósfera.
Se utilizan en experimentos científicos y tecnológicos de interés para diversas industrias, como la farmacéutica, la metalúrgica, la alimentaria y la cosmética. El objetivo del lanzamiento era entrenar al equipo, así como probar equipos y procesos.
Según la FAB, el cohete cumplió la trayectoria prevista por los técnicos e ingenieros, y los sistemas de telemetría y respuesta radar funcionaron correctamente durante todo el vuelo.
Según el director general del Departamento de Ciencia y Tecnología Aeroespacial (DCTA), brigadier del Aire Maurício Augusto Silveira de Medeiros, la iniciativa busca una mayor autonomía de Brasil en eventos de lanzamiento de este tipo de vehículos.
En la segunda fase de la Operación Potiguar, prevista para el segundo semestre de 2025, se utilizará otro cohete del mismo modelo para calificar el sistema de recuperación de la parte superior del vehículo, conocida como plataforma suborbital de microgravedad (PSM).
El vehículo, de tecnología 100 por ciento brasileña, despegó a las 13:19 y permaneció en el espacio durante 2 minutos y 50 segundos. A continuación cayó en el Océano Atlántico.
La misión completa duró 5 minutos y 50 segundos y puso fin a la primera fase de la Operación Potiguar. Se trata de un cohete de sondeo suborbital VS-30, de unos ocho metros de longitud y 1,5 toneladas de peso al despegue.
El vehículo puede transportar cargas de hasta 330 kilos. En el vuelo del viernes, el cohete transportó más de mil cartas escritas por alumnos de escuelas públicas. Aunque los vehículos suborbitales no son capaces de entrar en órbita, pueden alcanzar altitudes que superan la atmósfera.
Se utilizan en experimentos científicos y tecnológicos de interés para diversas industrias, como la farmacéutica, la metalúrgica, la alimentaria y la cosmética. El objetivo del lanzamiento era entrenar al equipo, así como probar equipos y procesos.
Según la FAB, el cohete cumplió la trayectoria prevista por los técnicos e ingenieros, y los sistemas de telemetría y respuesta radar funcionaron correctamente durante todo el vuelo.
Según el director general del Departamento de Ciencia y Tecnología Aeroespacial (DCTA), brigadier del Aire Maurício Augusto Silveira de Medeiros, la iniciativa busca una mayor autonomía de Brasil en eventos de lanzamiento de este tipo de vehículos.
En la segunda fase de la Operación Potiguar, prevista para el segundo semestre de 2025, se utilizará otro cohete del mismo modelo para calificar el sistema de recuperación de la parte superior del vehículo, conocida como plataforma suborbital de microgravedad (PSM).