El Municipio de Rawson analiza reclamarle tierras al Servicio Penitenciario
Todos los terrenos con que cuenta el SPF y en donde se encuentra la Unidad 6 son patrimonio de la Municipalidad. Hubo intento desde Nación de poseerlos; pero la provincialización de Chubut y el traspaso a la ciudad capital no lo permitió. En la comuna no obra expediente alguno que no sean de su prppiedad.
La Municipalidad de Rawson analiza reclamarle al Servicio Penitenciario Federal (SPF) parte de las tierras que esa institución federal posee en la capital chubutense.
Es que ese dominio donde se asienta la unidad carcelaria aún pertenece a la corporación ubicada en Moreno 650 y no hay registro notarial que haya pasado a la dependencia nacional desde que por Ley provincial N° 226 todo ese terreno ubicado en la zona noroeste se transfiera al municipio tras la provincialización de Chubut y sus límites territoriales; entre ellos los que pertenecían al Gobierno nacional de acuerdo al artículo 1° de la Ley N° 57.
La acción de la actual gestión municipal conducida por Damián Biss no sólo reside en recuperar su patrimonio; sino también potenciar el desarrollo urbano del ejido municipal que se ha cortado a partir de la instalación de la colonia penal primero y de la Unidad 6 después. Un sitio que tiene una fuerte historia no sólo en suelo patagónico; sino que es parte de trágica reseña argentina con lo sucedido en agosto de 1972.
No obstante ello, los dominios que ahora están cuestionados y posiblemente reclamados tiene su historia.
De acuerdo a los informes catastrales existentes, se encuentra el expediente N° 1541 del año 1929 en donde hay un informe del Ministerio de Agricultura de la Nación por el cual se tramitan pedidos de reserva de manzanas en Rawson; sumándose el Expediente N° 103332 de 1930 en donde se solicita una nueva reserva de 25 hectáreas en el lote N° 32 para el ámbito penitenciario.
También y mediante el expediente N° 3856 de 1940 se incluye la nota del director general de Institutos Penales que menciona que en el año 1935 se solicitó al Ministerio de Agricultura de la Nación la cesión de las manzanas N° 160, 161, 162 y 163 y una extensión de 100 metros de ancho con destino a la cárcel en ese momento en construcción. En relación a esta última extensión, se informó que se realizaban mensuras por particulares, motivo por el cual no había recaído resolución alguna sobre las actuaciones que se habían reiterado.
Además, pedía la reserva con destino a la misma de las manzanas N° 164, 165, 166, 167, 184, 185, 186, 187, 188, 189, 190 y 191 con destino a trabajos preferentemente agrícola-ganaderos. Algunas de esas tierras llegaban hasta una de las fronteras del Tiro Federal “Conrado Villegas”, instalado en ese entonces a escasos metros de lo que hoy es la Plaza Guemes; punto neurálgico de la ciudad; como también en cercanías de la necrópolis local que estaba siendo ampliada.
Es importante destacar que desde la cartera nacional se indicó que las tierras solicitadas eran fiscales y libres de adjudicación.
Sin embargo, los interlocutores cambiaron cuando Chubut se provincializó. Y fue así que el 23 de agosto de 1960, la dirección de Institutos Penales dependiente del ministerio de Educación y Justicia nacional le solicitó al gobernador Jorge Galina la elevación a la Legislatura provincial de un proyecto de ley para que se reintegre a la Nación el dominio de la colonia penal de Rawson. Dado los pases correspondientes dentro del estamento provincial al asesor letrado con fecha de 28 de noviembre de ese mismo año, respondió que las actuaciones se giren a la Municipalidad de Rawson por ser competente en esta situación, basándose en la Ley N° 226 que establecía que los Municipios son los que deben disponer de las tierras fiscales que estén dentro de su ejido.
Nuevos dominios
El artículo 10 de la ley nacional N° 14408 por la que se provincializaron los territorios nacionales de Formosa, Neuquén, Rio Negro, Chubut y Santa Cruz establecía que “pasarán a dominio de las nuevas provincias los bienes situados dentro de sus respectivos límites territoriales que permanezcan en el dominio público o privado de la Nación, excepto a aquellos que necesita destinar a un uso o servicio público, en cuyo caso la reserva deberá establecerse por la Nación dentro de los tres años de promulgada la presente”.
El plazo establecido vencía el 20 de junio de 1958, posteriormente ampliado hasta el 30 de septiembre del mismo por decreto-ley N° 4908/58.
A raíz de ello, la Dirección Nacional de Institutos Penales libró una nota el 7 de enero de 1958 a la subsecretaría de Justicia, solicitando que se corrieran los trámites para rescatar el dominio de Nación con respecto a la cárcel de Rawson. No obstante, las gestiones realizadas, los plazos vencieron sin lograr el objetivo: que la cárcel fuera propiedad del gobierno nacional. Muy por el contrario, las tierras ocupadas quedaron incorporadas al Patrimonio provincial a partir del artículo 1° de la Ley 57 de la flamante Legislatura provincial el 27 de noviembre de 1958.
Ante esa situación, se llegó hasta el gobernador Jorge Galina para solicitarla la recuperación de las mismas. Sin embargo, la respuesta fue determinante. Las tierras habían sido incorporadas al patrimonio de la Municipalidad de Rawson y que ante esa corporación debía gestionarse el traspaso del dominio.
Un hecho similar se produjo en Santa Cruz, pero allí fue la Legislatura provincial la que sí resolvió la cuestión otorgándole las tierras al Estado nacional.
Sin traspaso
La Dirección Nacional de Institutos Penales ofreció excluir del reintegro las manzanas 91 a 94 para ser utilizado en el llamado “Plan regulador para a ciudad de Rawson” con tal de hacerse de su predio; pero la respuesta del asesor Julio Federico Bansadon a pedido del ministro de Economía de ese entonces, Marcelo Pérez Catán sostuvo que “la Ley N° 226 establece que las Municipalidades son las que deben disponer de las tierras fiscales que estén dentro del ejido. Por consiguiente, estimo que se deben girar estas actuaciones a la Municipalidad de Rawson, que es competencia en esta situación”.
Desde el Municipio capitalino nunca recibieron una solicitud de traspaso de dominio a favor del Servicio Penitenciario. Hasta hoy. Cuando se busca las manzanas donde se encuentra instalada la Unidad 6, salta el título de propiedad N° 16.829 emitido por la dirección de Tierras del Ministerio de Agricultura de la Nación y a favor de la Municipalidad de Rawson; aunque se aclara que el Estado nacional “podrá efectuar trabajos de exploración en busca de petróleo y demás hidrocarburos fluidos dentro de la tierra de que se trata y explotarlos”. Toda una novedad. La misma que planteará la comuna ante las autoridades federales por algo que considera parte de su patrimonio.
Antecedentes
Como antecedentes más recientes, se que en julio del 2000, el intendente Pablo Helmer había logrado que la secretaria de política Criminal y Asuntos Penitenciarios de la gestión presidencial de Fernando De la Rúa, Patricia Bullrich, le diera el visto bueno para que el municipio local incorporara la esquina de la avenida 9 de Julio y el Pasaje Garzón (frente al Juzgado federal). El alejamiento de la actual funcionaria de Javier Milei hacia dos ministerios posteriores, dejó en la nada la autorización.
En septiembre de 2014, el gobernador Martin Buzzi anunciaba, en el marco del 149 aniversario de la fundación de la ciudad; que Rawson iba a contar con la sede del obispado en aquella intersección. Tampoco nada pasó.
Por esa misma fecha, Víctor Hortel, titular del SPF, anunció en Rawson en un acto de la fuerza que la Unidad 6 estaba entre las tres penitenciarias que deberían ser erradicadas de donde estaban por cuestiones de urbanización y de modernidad. Primero era la cárcel de Formosa, segunda la de Neuquén (en pleno conflicto con Jorge Sobisch) y en el podio estaba la cárcel rawsense. Para males de él, la fuga de presos, la custión “vatayón militante” y un barco de la Unidad con un confuso permiso de pesca para que sea operado en el puerto capitalino, terminaron con su carrera y con la ilusión del traslado.
La Municipalidad de Rawson analiza reclamarle al Servicio Penitenciario Federal (SPF) parte de las tierras que esa institución federal posee en la capital chubutense.
Es que ese dominio donde se asienta la unidad carcelaria aún pertenece a la corporación ubicada en Moreno 650 y no hay registro notarial que haya pasado a la dependencia nacional desde que por Ley provincial N° 226 todo ese terreno ubicado en la zona noroeste se transfiera al municipio tras la provincialización de Chubut y sus límites territoriales; entre ellos los que pertenecían al Gobierno nacional de acuerdo al artículo 1° de la Ley N° 57.
La acción de la actual gestión municipal conducida por Damián Biss no sólo reside en recuperar su patrimonio; sino también potenciar el desarrollo urbano del ejido municipal que se ha cortado a partir de la instalación de la colonia penal primero y de la Unidad 6 después. Un sitio que tiene una fuerte historia no sólo en suelo patagónico; sino que es parte de trágica reseña argentina con lo sucedido en agosto de 1972.
No obstante ello, los dominios que ahora están cuestionados y posiblemente reclamados tiene su historia.
De acuerdo a los informes catastrales existentes, se encuentra el expediente N° 1541 del año 1929 en donde hay un informe del Ministerio de Agricultura de la Nación por el cual se tramitan pedidos de reserva de manzanas en Rawson; sumándose el Expediente N° 103332 de 1930 en donde se solicita una nueva reserva de 25 hectáreas en el lote N° 32 para el ámbito penitenciario.
También y mediante el expediente N° 3856 de 1940 se incluye la nota del director general de Institutos Penales que menciona que en el año 1935 se solicitó al Ministerio de Agricultura de la Nación la cesión de las manzanas N° 160, 161, 162 y 163 y una extensión de 100 metros de ancho con destino a la cárcel en ese momento en construcción. En relación a esta última extensión, se informó que se realizaban mensuras por particulares, motivo por el cual no había recaído resolución alguna sobre las actuaciones que se habían reiterado.
Además, pedía la reserva con destino a la misma de las manzanas N° 164, 165, 166, 167, 184, 185, 186, 187, 188, 189, 190 y 191 con destino a trabajos preferentemente agrícola-ganaderos. Algunas de esas tierras llegaban hasta una de las fronteras del Tiro Federal “Conrado Villegas”, instalado en ese entonces a escasos metros de lo que hoy es la Plaza Guemes; punto neurálgico de la ciudad; como también en cercanías de la necrópolis local que estaba siendo ampliada.
Es importante destacar que desde la cartera nacional se indicó que las tierras solicitadas eran fiscales y libres de adjudicación.
Sin embargo, los interlocutores cambiaron cuando Chubut se provincializó. Y fue así que el 23 de agosto de 1960, la dirección de Institutos Penales dependiente del ministerio de Educación y Justicia nacional le solicitó al gobernador Jorge Galina la elevación a la Legislatura provincial de un proyecto de ley para que se reintegre a la Nación el dominio de la colonia penal de Rawson. Dado los pases correspondientes dentro del estamento provincial al asesor letrado con fecha de 28 de noviembre de ese mismo año, respondió que las actuaciones se giren a la Municipalidad de Rawson por ser competente en esta situación, basándose en la Ley N° 226 que establecía que los Municipios son los que deben disponer de las tierras fiscales que estén dentro de su ejido.
Nuevos dominios
El artículo 10 de la ley nacional N° 14408 por la que se provincializaron los territorios nacionales de Formosa, Neuquén, Rio Negro, Chubut y Santa Cruz establecía que “pasarán a dominio de las nuevas provincias los bienes situados dentro de sus respectivos límites territoriales que permanezcan en el dominio público o privado de la Nación, excepto a aquellos que necesita destinar a un uso o servicio público, en cuyo caso la reserva deberá establecerse por la Nación dentro de los tres años de promulgada la presente”.
El plazo establecido vencía el 20 de junio de 1958, posteriormente ampliado hasta el 30 de septiembre del mismo por decreto-ley N° 4908/58.
A raíz de ello, la Dirección Nacional de Institutos Penales libró una nota el 7 de enero de 1958 a la subsecretaría de Justicia, solicitando que se corrieran los trámites para rescatar el dominio de Nación con respecto a la cárcel de Rawson. No obstante, las gestiones realizadas, los plazos vencieron sin lograr el objetivo: que la cárcel fuera propiedad del gobierno nacional. Muy por el contrario, las tierras ocupadas quedaron incorporadas al Patrimonio provincial a partir del artículo 1° de la Ley 57 de la flamante Legislatura provincial el 27 de noviembre de 1958.
Ante esa situación, se llegó hasta el gobernador Jorge Galina para solicitarla la recuperación de las mismas. Sin embargo, la respuesta fue determinante. Las tierras habían sido incorporadas al patrimonio de la Municipalidad de Rawson y que ante esa corporación debía gestionarse el traspaso del dominio.
Un hecho similar se produjo en Santa Cruz, pero allí fue la Legislatura provincial la que sí resolvió la cuestión otorgándole las tierras al Estado nacional.
Sin traspaso
La Dirección Nacional de Institutos Penales ofreció excluir del reintegro las manzanas 91 a 94 para ser utilizado en el llamado “Plan regulador para a ciudad de Rawson” con tal de hacerse de su predio; pero la respuesta del asesor Julio Federico Bansadon a pedido del ministro de Economía de ese entonces, Marcelo Pérez Catán sostuvo que “la Ley N° 226 establece que las Municipalidades son las que deben disponer de las tierras fiscales que estén dentro del ejido. Por consiguiente, estimo que se deben girar estas actuaciones a la Municipalidad de Rawson, que es competencia en esta situación”.
Desde el Municipio capitalino nunca recibieron una solicitud de traspaso de dominio a favor del Servicio Penitenciario. Hasta hoy. Cuando se busca las manzanas donde se encuentra instalada la Unidad 6, salta el título de propiedad N° 16.829 emitido por la dirección de Tierras del Ministerio de Agricultura de la Nación y a favor de la Municipalidad de Rawson; aunque se aclara que el Estado nacional “podrá efectuar trabajos de exploración en busca de petróleo y demás hidrocarburos fluidos dentro de la tierra de que se trata y explotarlos”. Toda una novedad. La misma que planteará la comuna ante las autoridades federales por algo que considera parte de su patrimonio.
Antecedentes
Como antecedentes más recientes, se que en julio del 2000, el intendente Pablo Helmer había logrado que la secretaria de política Criminal y Asuntos Penitenciarios de la gestión presidencial de Fernando De la Rúa, Patricia Bullrich, le diera el visto bueno para que el municipio local incorporara la esquina de la avenida 9 de Julio y el Pasaje Garzón (frente al Juzgado federal). El alejamiento de la actual funcionaria de Javier Milei hacia dos ministerios posteriores, dejó en la nada la autorización.
En septiembre de 2014, el gobernador Martin Buzzi anunciaba, en el marco del 149 aniversario de la fundación de la ciudad; que Rawson iba a contar con la sede del obispado en aquella intersección. Tampoco nada pasó.
Por esa misma fecha, Víctor Hortel, titular del SPF, anunció en Rawson en un acto de la fuerza que la Unidad 6 estaba entre las tres penitenciarias que deberían ser erradicadas de donde estaban por cuestiones de urbanización y de modernidad. Primero era la cárcel de Formosa, segunda la de Neuquén (en pleno conflicto con Jorge Sobisch) y en el podio estaba la cárcel rawsense. Para males de él, la fuga de presos, la custión “vatayón militante” y un barco de la Unidad con un confuso permiso de pesca para que sea operado en el puerto capitalino, terminaron con su carrera y con la ilusión del traslado.