La fiscal Rafaella Riccono, a cargo de la Oficina del Ciberdelito en Esquel, dijo a Jornada que ya recibieron 10 denuncias relacionadas con las estafas piramidales, de las que fueron víctimas numerosos vecinos de Esquel y alrededores.
Para la atención de casos, en la Fiscalía se organizaron y comenzaron a hacer pública la invitación para que los supuestos damnificados se presentaran a asentar la denuncia, y así encarar la investigación.
Ríccono dijo en Página 12 que el equipo de Ciberdelito calcula que hay más de un centenar de damnificados.
En cuanto a la modalidad, explicó que hay uno o más referentes locales que convocan gente, las reuniones se hacen en lugares públicos conocidos en la ciudad, y empiezan a prometer grandes ganancias.
Ofrecían hasta un 6% mensual en dólares, algo que ningún negocio lícito da, señaló la fiscal y razonó que hay mucho de desconocimiento de lo que son las criptomonedas, el trading, y el mundo de las finanzas digitales.
Todas las personas tenían que crear un usuario en una billetera virtual real. Por lo general recomendaban Lemon Cash, una firma legal que está colaborando mucho con la Fiscalía.
A la vez les decían que crearan un usuario en una página web trucha, desde donde supuestamente compraban cripto, pero en realidad estaban transfiriendo a otras billeteras. En el acto transformaban ese dinero en decenas de transferencias simultáneas a otras cuentas, y otras veces hasta robadas o compradas. Por eso es muy difícil seguir el rastro de los titulares reales en el sistema financiero trasnacional.
Además de pedir que radiquen las denuncias, la fiscal recordó que las víctimas deben conservar todo comprobante posible de la estafa: no bloquear al estafador, no salir de los grupos, guardar todas las capturas de pantalla posibles.
La fiscal expuso que según las denuncias, las víctimas fueron invitadas a invertir en la plataforma mgtrade.net, que decía ofrecer servicios de trading. La supuesta empresa utilizaba el nombre Managed Global Securities Trade Ltd.
Los damnificados fueron captados ganando su confianza, para lo cual se fomentaban las recomendaciones mediante un sistema de reconocimiento en ganancias, para quienes llevaran invitados. Se hacían recomendaciones de boca en boca, o mediante reuniones de promoción por parte de personas que se presentaban como administradores. Ellos garantizaban confiabilidad.
Una vez que el inversor accedía a participar, los administradores le indicaban que creara una cuenta de la billetera virtual Lemon Cash. Allí debía ingresar los pesos a invertir, y convertirlos a criptomoneda (USDT).
Los administradores añadían a los inversores a un grupo de WhatsApp denominado “Peak Capital Team”, una administradora cuya foto de perfil era de una mujer de rasgos orientales y teléfono con característica de otro país, indicaba cuándo realizar las transferencias.
El equipo de Cibercrimen considera que las operaciones, como por ejemplo los rendimientos, pudieron haber sido simulados por personas con conocimientos en programación, y en diseño de sitios web. Los que ingresaron primero recibieron dinero pero los últimos no, y es cuando quedaba plasmada la estafa.
Un dato que recibimos da cuenta de una charla informativa que se llevó a cabo en Esquel el 20 de agosto por la tarde, a la que invitó Peak Capital Team, en instalaciones de la Cámara de Comercio.
La fiscal Rafaella Riccono, a cargo de la Oficina del Ciberdelito en Esquel, dijo a Jornada que ya recibieron 10 denuncias relacionadas con las estafas piramidales, de las que fueron víctimas numerosos vecinos de Esquel y alrededores.
Para la atención de casos, en la Fiscalía se organizaron y comenzaron a hacer pública la invitación para que los supuestos damnificados se presentaran a asentar la denuncia, y así encarar la investigación.
Ríccono dijo en Página 12 que el equipo de Ciberdelito calcula que hay más de un centenar de damnificados.
En cuanto a la modalidad, explicó que hay uno o más referentes locales que convocan gente, las reuniones se hacen en lugares públicos conocidos en la ciudad, y empiezan a prometer grandes ganancias.
Ofrecían hasta un 6% mensual en dólares, algo que ningún negocio lícito da, señaló la fiscal y razonó que hay mucho de desconocimiento de lo que son las criptomonedas, el trading, y el mundo de las finanzas digitales.
Todas las personas tenían que crear un usuario en una billetera virtual real. Por lo general recomendaban Lemon Cash, una firma legal que está colaborando mucho con la Fiscalía.
A la vez les decían que crearan un usuario en una página web trucha, desde donde supuestamente compraban cripto, pero en realidad estaban transfiriendo a otras billeteras. En el acto transformaban ese dinero en decenas de transferencias simultáneas a otras cuentas, y otras veces hasta robadas o compradas. Por eso es muy difícil seguir el rastro de los titulares reales en el sistema financiero trasnacional.
Además de pedir que radiquen las denuncias, la fiscal recordó que las víctimas deben conservar todo comprobante posible de la estafa: no bloquear al estafador, no salir de los grupos, guardar todas las capturas de pantalla posibles.
La fiscal expuso que según las denuncias, las víctimas fueron invitadas a invertir en la plataforma mgtrade.net, que decía ofrecer servicios de trading. La supuesta empresa utilizaba el nombre Managed Global Securities Trade Ltd.
Los damnificados fueron captados ganando su confianza, para lo cual se fomentaban las recomendaciones mediante un sistema de reconocimiento en ganancias, para quienes llevaran invitados. Se hacían recomendaciones de boca en boca, o mediante reuniones de promoción por parte de personas que se presentaban como administradores. Ellos garantizaban confiabilidad.
Una vez que el inversor accedía a participar, los administradores le indicaban que creara una cuenta de la billetera virtual Lemon Cash. Allí debía ingresar los pesos a invertir, y convertirlos a criptomoneda (USDT).
Los administradores añadían a los inversores a un grupo de WhatsApp denominado “Peak Capital Team”, una administradora cuya foto de perfil era de una mujer de rasgos orientales y teléfono con característica de otro país, indicaba cuándo realizar las transferencias.
El equipo de Cibercrimen considera que las operaciones, como por ejemplo los rendimientos, pudieron haber sido simulados por personas con conocimientos en programación, y en diseño de sitios web. Los que ingresaron primero recibieron dinero pero los últimos no, y es cuando quedaba plasmada la estafa.
Un dato que recibimos da cuenta de una charla informativa que se llevó a cabo en Esquel el 20 de agosto por la tarde, a la que invitó Peak Capital Team, en instalaciones de la Cámara de Comercio.