Este martes a la tarde, "Luzbelito", el perro que era intensamente buscado, apareció muerto en la calle Murga y Oris de Roa de Trelew, confirmaron a Jornada Web los dueños del animal.
Habían pasado ya cuatro días desde que el caniche negro había desaparecido de una peluquería de Trelew, en la zona sur. Los dueños, hasta ahora, creían que alguien lo tenía “retenido” y habían llevado a 100 mil pesos el monto que ofrecían como recompensa.
El perro, bautizado como la canción de Los Redondos, desapareció el viernes de un local ubicado en Pellegrini y López y Planes de la ciudad valletana, después de que le cortaran el pelo. Estaba recién bañado, con el corte oriental, cuando se soltó de la correa y salió disparado por López y Planes.
La familia, fanática de Los Redondos, lo había buscado estos días por la zona sur pero no pudo dar con ninguna pista. Este fin de semana largo, iniciaron una intensa campaña en la que ofrecieron una recompensa de 50.000 pesos.
Sin embargo, pasaban las horas y el perro no aparecía. Los dueños, desesperados, creían que alguna familia lo tendría retenido en una casa. No es la primera vez que desaparecen perros en la ciudad. Basta recordar aquel caso resonante de los perros secuestrados en Puerto Madryn, que la final estaban en Trelew.
Las circunstancias en que el viernes a la mañana desapareció “Luzbelito”, como si supiera que “su destino es de soledad” (diría el Indio Solari), son bastante curiosas por no decir raras.
El perro salió a la calle, llevado con una correa por un menor, para hacer sus necesidades, cuando de pronto se soltó y comenzó a correr. La peluquera, al advertir esta situación, salió corriendo detrás del perro, pero se esfumó en un abrir y cerrar de ojos.
Ese mismo viernes lo buscaron durante todo el día, pero ningún vecino lo escuchó ladrar. Por la tarde, avisaron a los dueños que el caniche estaba perdido.
También habían llevado a cortarse el pelo a otros tres caniches de color blanco. Luzbelito era el más pequeño y asustadizo, el único de color negro de la familia.
No sabían que cuatro días más tarde se encontrarían con el peor final.
Este martes a la tarde, "Luzbelito", el perro que era intensamente buscado, apareció muerto en la calle Murga y Oris de Roa de Trelew, confirmaron a Jornada Web los dueños del animal.
Habían pasado ya cuatro días desde que el caniche negro había desaparecido de una peluquería de Trelew, en la zona sur. Los dueños, hasta ahora, creían que alguien lo tenía “retenido” y habían llevado a 100 mil pesos el monto que ofrecían como recompensa.
El perro, bautizado como la canción de Los Redondos, desapareció el viernes de un local ubicado en Pellegrini y López y Planes de la ciudad valletana, después de que le cortaran el pelo. Estaba recién bañado, con el corte oriental, cuando se soltó de la correa y salió disparado por López y Planes.
La familia, fanática de Los Redondos, lo había buscado estos días por la zona sur pero no pudo dar con ninguna pista. Este fin de semana largo, iniciaron una intensa campaña en la que ofrecieron una recompensa de 50.000 pesos.
Sin embargo, pasaban las horas y el perro no aparecía. Los dueños, desesperados, creían que alguna familia lo tendría retenido en una casa. No es la primera vez que desaparecen perros en la ciudad. Basta recordar aquel caso resonante de los perros secuestrados en Puerto Madryn, que la final estaban en Trelew.
Las circunstancias en que el viernes a la mañana desapareció “Luzbelito”, como si supiera que “su destino es de soledad” (diría el Indio Solari), son bastante curiosas por no decir raras.
El perro salió a la calle, llevado con una correa por un menor, para hacer sus necesidades, cuando de pronto se soltó y comenzó a correr. La peluquera, al advertir esta situación, salió corriendo detrás del perro, pero se esfumó en un abrir y cerrar de ojos.
Ese mismo viernes lo buscaron durante todo el día, pero ningún vecino lo escuchó ladrar. Por la tarde, avisaron a los dueños que el caniche estaba perdido.
También habían llevado a cortarse el pelo a otros tres caniches de color blanco. Luzbelito era el más pequeño y asustadizo, el único de color negro de la familia.
No sabían que cuatro días más tarde se encontrarían con el peor final.