"La carta de intención firmada con la empresa Hughes no prevé, bajo ningún motivo ni circunstancia, la privatización de Arsat ni de ninguno de sus activos" indicó la empresa tras la difusión del documento firmado el 29 de junio por ambas firmas y que establece la creación de la compañía Newco, en la que Arsat controlará 49 por ciento y Hughes el otro 51 por ciento.
"Arsat ha celebrado documentos comerciales con diversas compañías importantes en la industria de telecomunicaciones", indicaron desde la empresa para agregar que "con Hughes se firmó una carta de intención que establece condiciones generales de una colaboración entre empresas, que debe ser detallado y trabajado más adelante mediante un acuerdo definitivo".
La firma remarcó que "no está en discusión la participación de Hughes ni de ningún otro operador privado en la explotación de ninguno de los activos de la empresa Arsat, sean sus satélites o su red de fibra, data center o infraestructura de televisión".
"Entendemos que nuestras misiones satelitales no pueden seguir financiándose en un 100 por ciento con los impuestos de los argentinos", indicaron y agregaron que "ARSAT-3 busca viabilizarse también a través de inversiones o aportes privados".
Para esta gestión "sería una muy buena noticia que se pudiera exportar nuestra producción satelital al mundo y que Hughes como cualquier otra empresa del sector, esté dispuesto a ello".
"Las posibles inversiones de empresas privadas en satélites argentinos, no hace más que afirmar el trabajo y confianza recibida por el sector espacial mundial y permite implementar nuevos satélites sin fondos del Tesoro Nacional", indicó la empresa en el comunicado difundido hoy.
Respecto a la carta de intención firmada con Hughes precisó que "el objetivo final de esta carta de intención es que un tercer satélite construido por la industria nacional, reciba inversión directa para su confección", indicaron.
El Arsat 3, para cuyo desarrollo el Estado argentino busca financiación o inversión extranjera, "será fabricado "con o sin inversiones de Hughes", señaló la empresa argentina y resaltó que las posiciones orbitales que vaya a utilizar el satélite "son del Estado".
Las posiciones orbitales se discuten en la mesa de la Unión Internacional de Telecomunicaciones, y de hecho Argentina ya tiene reserva expresa sobre diferentes puntos para la ubicación del Arsat 3 y futuros satélites de comunicaciones.
En el comunicado de hoy, la empresa tecnológica nacional aclaró que los ensayos sobre el Arsat 3 se realizaron con la empresa nacional Ceatsa (Centro de Ensayos de Alta Tecnología) y que los "insumos no susceptibles de ser provistos nacionalmente, son importados desde las empresas francesas Thales o Airbus", tal como los utilizados en los satélites Arsat 1 y 2 y que "corresponden a contratos firmados por la gestión anterior".
"La carta de intención firmada con la empresa Hughes no prevé, bajo ningún motivo ni circunstancia, la privatización de Arsat ni de ninguno de sus activos" indicó la empresa tras la difusión del documento firmado el 29 de junio por ambas firmas y que establece la creación de la compañía Newco, en la que Arsat controlará 49 por ciento y Hughes el otro 51 por ciento.
"Arsat ha celebrado documentos comerciales con diversas compañías importantes en la industria de telecomunicaciones", indicaron desde la empresa para agregar que "con Hughes se firmó una carta de intención que establece condiciones generales de una colaboración entre empresas, que debe ser detallado y trabajado más adelante mediante un acuerdo definitivo".
La firma remarcó que "no está en discusión la participación de Hughes ni de ningún otro operador privado en la explotación de ninguno de los activos de la empresa Arsat, sean sus satélites o su red de fibra, data center o infraestructura de televisión".
"Entendemos que nuestras misiones satelitales no pueden seguir financiándose en un 100 por ciento con los impuestos de los argentinos", indicaron y agregaron que "ARSAT-3 busca viabilizarse también a través de inversiones o aportes privados".
Para esta gestión "sería una muy buena noticia que se pudiera exportar nuestra producción satelital al mundo y que Hughes como cualquier otra empresa del sector, esté dispuesto a ello".
"Las posibles inversiones de empresas privadas en satélites argentinos, no hace más que afirmar el trabajo y confianza recibida por el sector espacial mundial y permite implementar nuevos satélites sin fondos del Tesoro Nacional", indicó la empresa en el comunicado difundido hoy.
Respecto a la carta de intención firmada con Hughes precisó que "el objetivo final de esta carta de intención es que un tercer satélite construido por la industria nacional, reciba inversión directa para su confección", indicaron.
El Arsat 3, para cuyo desarrollo el Estado argentino busca financiación o inversión extranjera, "será fabricado "con o sin inversiones de Hughes", señaló la empresa argentina y resaltó que las posiciones orbitales que vaya a utilizar el satélite "son del Estado".
Las posiciones orbitales se discuten en la mesa de la Unión Internacional de Telecomunicaciones, y de hecho Argentina ya tiene reserva expresa sobre diferentes puntos para la ubicación del Arsat 3 y futuros satélites de comunicaciones.
En el comunicado de hoy, la empresa tecnológica nacional aclaró que los ensayos sobre el Arsat 3 se realizaron con la empresa nacional Ceatsa (Centro de Ensayos de Alta Tecnología) y que los "insumos no susceptibles de ser provistos nacionalmente, son importados desde las empresas francesas Thales o Airbus", tal como los utilizados en los satélites Arsat 1 y 2 y que "corresponden a contratos firmados por la gestión anterior".