Caso Palavecino: el jurado declaró a Jesús Ralinqueo culpable del salvaje crimen
El fallo fue unánime. Fiscalía pedirá 20 años de prisión. Fueron claves el peritaje telefónico y el testimonio de una comisario que notó muy nervioso al asesino cuando le preguntaron el paradero de Palavecino: lo había enterrado en un patio bajo una capa de cemento. La familia de la víctima pidió "una pena ejemplar".
“La primera vez nos fuimos con un cuerpo pero ahora regresamos con algo de justicia”. Llorando, esto le dijeron Mirta y Patricia Palavecino al fiscal Gustavo Núñez mientras lo abrazaban, tras el fallo unánime de un jurado popular que declaró culpable a Jesús Ralinqueo por el salvaje crimen de Roberto Palavecino en Trelew.
El tribunal consideró probado que Ralinqueo asesinó a puñaladas a quien era su inquilino y lo enterró en un patio bajo una capa de cemento. El lunes 16 de diciembre a las 9 se discutirá la pena para el homicida. El fiscal estimó que pedirá 20 años de cárcel.
El veredicto de los 12 vecinos se conoció tras una deliberación de algo más de dos horas. Se leyó en la sede del juicio: la Asociación de Magistrados y Funcionarios Judiciales. Por la mañana, además se los alegatos finales, se había escuchado la palabra de Mirta y Patricia, hermanas de la víctima, pidiendo justicia. A Ralinqueo lo defendieron Oscar Romero y Abdón Manyauik.
Quedó probado con testigos e informes documentales lo sucedido entre la noche del 5 y la madrugada del 6 de mayo de 2023, cuando Ralinqueo, dueño de un inquilinato en Juan Evans, mató a su inquilino con cuchillazos en el rostro y en el cuello. Palavecino le alquilaba una habitación.
Tras el asesinato, Ralinqueo cavó una fosa en el patio y arrojo el cadáver. Lo tapó con escombros, basura, ropa de la víctima y una capa de cemento de forma redonda. Con lavandina intentó borrar todas las pruebas que pudo.
Ante su ausencia, familiares y amigos de Palavecino denunciaron su desaparición. Y el 6 de junio de 2023, tras el arduo trabajo de la División Búsqueda de Personas y la Brigada de Investigaciones, hallaron el cuerpo en la vivienda de Ralinqueo.
El fiscal Núñez reivindicó el intenso trabajo de campo para hallar la verdad. “En estos casos los barrios se cierran y es complicado conseguir testigos. Por eso fue central contar con tantos indicios”. Y llamó la atención sobre el entierro del cuerpo, un dato que suele suceder en otras provincias pero en Trelew no es habitual.
Dos pruebas fueron centrales. Primero, el testimonio de la comisario Bárbara Riveros, de Búsqueda de Personas, que hizo las primeras averiguaciones. “Su testimonio en el juicio mostró que la actitud de Ralinqueo fue totalmente evasiva cuando le consultaban por Palavecino”.
También el peritaje telefónico. Ralinqueo no atendía a la insistencia de la comisario pero a la vez, cuando el cerco se cerraba ya preguntaba cómo contactar a Fabián Gabalachis, el penalista célebre por sus defensas. En el celular del criminal se halló una foto tomada en su casa el día anterior al allanamiento: la poda del árbol cuyas ramas tiró sobre la fosa mortal.
Patricia Palavecino le dijo a Jornada sentirse conforme con el fallo “tras tanto sacrificio económico, físico y mental, porque fue muy desgastante”. Y explicó que aunque en el fondo siempre será poco, ella y su hermana desean “la mayor pena posible” para Ralinqueo. “Una pena ejemplar servirá para que mi hermano descanse en paz y nuestra familia pueda retomar su vida porque no disfrutamos ni los cumpleaños”.
Estaban seguras del fallo. “Los mismos testigos de la defensa tiraron por la borda todas las mentiras de Ralinqueo y lo que él quiso tapar. Nada le fue suficiente”.
-Patricia, ¿qué le dirían al asesino?
-No quiero llenar de odio mi mente y mi corazón porque mis padres me educaron con mucho amor. Puedo sentir alguna bronca, rencor o dudas del motivo. Pero mintió tanto que no me serviría. ¿Qué mejor que manejarse con la justicia? Mi hermano no sabía pelear y no se pudo defender. Por eso terminó muerto.
“La primera vez nos fuimos con un cuerpo pero ahora regresamos con algo de justicia”. Llorando, esto le dijeron Mirta y Patricia Palavecino al fiscal Gustavo Núñez mientras lo abrazaban, tras el fallo unánime de un jurado popular que declaró culpable a Jesús Ralinqueo por el salvaje crimen de Roberto Palavecino en Trelew.
El tribunal consideró probado que Ralinqueo asesinó a puñaladas a quien era su inquilino y lo enterró en un patio bajo una capa de cemento. El lunes 16 de diciembre a las 9 se discutirá la pena para el homicida. El fiscal estimó que pedirá 20 años de cárcel.
El veredicto de los 12 vecinos se conoció tras una deliberación de algo más de dos horas. Se leyó en la sede del juicio: la Asociación de Magistrados y Funcionarios Judiciales. Por la mañana, además se los alegatos finales, se había escuchado la palabra de Mirta y Patricia, hermanas de la víctima, pidiendo justicia. A Ralinqueo lo defendieron Oscar Romero y Abdón Manyauik.
Quedó probado con testigos e informes documentales lo sucedido entre la noche del 5 y la madrugada del 6 de mayo de 2023, cuando Ralinqueo, dueño de un inquilinato en Juan Evans, mató a su inquilino con cuchillazos en el rostro y en el cuello. Palavecino le alquilaba una habitación.
Tras el asesinato, Ralinqueo cavó una fosa en el patio y arrojo el cadáver. Lo tapó con escombros, basura, ropa de la víctima y una capa de cemento de forma redonda. Con lavandina intentó borrar todas las pruebas que pudo.
Ante su ausencia, familiares y amigos de Palavecino denunciaron su desaparición. Y el 6 de junio de 2023, tras el arduo trabajo de la División Búsqueda de Personas y la Brigada de Investigaciones, hallaron el cuerpo en la vivienda de Ralinqueo.
El fiscal Núñez reivindicó el intenso trabajo de campo para hallar la verdad. “En estos casos los barrios se cierran y es complicado conseguir testigos. Por eso fue central contar con tantos indicios”. Y llamó la atención sobre el entierro del cuerpo, un dato que suele suceder en otras provincias pero en Trelew no es habitual.
Dos pruebas fueron centrales. Primero, el testimonio de la comisario Bárbara Riveros, de Búsqueda de Personas, que hizo las primeras averiguaciones. “Su testimonio en el juicio mostró que la actitud de Ralinqueo fue totalmente evasiva cuando le consultaban por Palavecino”.
También el peritaje telefónico. Ralinqueo no atendía a la insistencia de la comisario pero a la vez, cuando el cerco se cerraba ya preguntaba cómo contactar a Fabián Gabalachis, el penalista célebre por sus defensas. En el celular del criminal se halló una foto tomada en su casa el día anterior al allanamiento: la poda del árbol cuyas ramas tiró sobre la fosa mortal.
Patricia Palavecino le dijo a Jornada sentirse conforme con el fallo “tras tanto sacrificio económico, físico y mental, porque fue muy desgastante”. Y explicó que aunque en el fondo siempre será poco, ella y su hermana desean “la mayor pena posible” para Ralinqueo. “Una pena ejemplar servirá para que mi hermano descanse en paz y nuestra familia pueda retomar su vida porque no disfrutamos ni los cumpleaños”.
Estaban seguras del fallo. “Los mismos testigos de la defensa tiraron por la borda todas las mentiras de Ralinqueo y lo que él quiso tapar. Nada le fue suficiente”.
-Patricia, ¿qué le dirían al asesino?
-No quiero llenar de odio mi mente y mi corazón porque mis padres me educaron con mucho amor. Puedo sentir alguna bronca, rencor o dudas del motivo. Pero mintió tanto que no me serviría. ¿Qué mejor que manejarse con la justicia? Mi hermano no sabía pelear y no se pudo defender. Por eso terminó muerto.