Rodrigo Blanco, secretario general de la Asociación de Trabajadores de Escuelas Técnicas, resaltó la adhesión al paro dispuesto por ATECh y consideró la medida como una expresión de la necesidad que tiene el sector y que la misma no debe “minimizarse” por parte de las autoridades.
“Es una cuestión netamente salarial, venimos reclamando por la pérdida constante que se daba en nuestros salarios, que derivó que en la gestión anterior hayamos perdido más del 50 por ciento de nuestro poder adquisitivo, lo cual ha dejado a fin del año pasado al sector docente en una situación muy crítica, sostuvo Blanco quien explicó que el sector solamente percibió actualizaciones que “acompañan” los niveles inflacionarios. “Tenemos salarios que están en la línea de la pobreza, por lo que se hace muy difícil a los docentes poder afrontar sus necesidades y las de sus familias”. Y diferenció que la adhesión por 24 horas responde a una acción “extrema” dado que es un gremio que no suele sumarse a este tipo de medidas de fuerzas. “Buscamos que el Gobierno tome real dimensión de la situación por la cual están pasando los docentes y extreme sus esfuerzos para poder aliviar, aunque sea en parte, la situación salarial”.
En diálogo con Cadena Tiempo, reconoció que existe diálogo con los ministros provinciales, aunque diferenció el vínculo institucional con la realidad salarial de los docentes. “Buscamos un reconocimiento salarial en función a la tarea que se desenvuelve y la preparación que conlleva la tarea docente. Los profesionales de educación se han formado y capacitado; se actualizan permanentemente y hoy con la jornada completa de ocho horas diarias se encuentra bajo la línea de pobreza. Con los niveles de salario y frente a los aumentos de las facturas de gas y luz, a los docentes se les hace muy difícil cubrir esas necesidades”, planteó Blanco.
“Un docente –ejemplificó- con una jornada de 8 horas y con 15 años de antigüedad, está cobrando un millón de pesos aproximadamente. Hay casos de directores de instituciones con toda la responsabilidad que eso conlleva, de instituciones grandes de la ciudad, que están en el orden del millón 200 o 300 mil de pesos y es gente que ha tenido toda una gran trayectoria académica para formarse y debió concursar para acceder a su cargo. En el salario no se refleja la responsabilidad que tiene al dirigir un establecimiento educativo; controlar a la gente que trabaje; hacer que el edificio funcione con 200 docentes a cargo y con una currícula de 700 a 800 alumnos, más el personal auxiliar”.
El referente de AMET adelantó que este jueves se cumplirá una nueva instancia paritaria en la que el Gobierno Provincial podría acercar una propuesta superadora. “Entendemos que hubo un gran acatamiento, aunque existe la advertencia de descuentos, aunque pese a ese riesgo muchos docentes tomaron la decisión de llevar adelante el paro para manifestarle al gobierno que debe atender la situación. El diálogo que existe debe traducirse en decisiones que permitan recomponer el salario; no hay que tratar de minimizar; ni descalificar, sino que es la expresión de una necesidad que tiene el sector”, finalizó.
Rodrigo Blanco, secretario general de la Asociación de Trabajadores de Escuelas Técnicas, resaltó la adhesión al paro dispuesto por ATECh y consideró la medida como una expresión de la necesidad que tiene el sector y que la misma no debe “minimizarse” por parte de las autoridades.
“Es una cuestión netamente salarial, venimos reclamando por la pérdida constante que se daba en nuestros salarios, que derivó que en la gestión anterior hayamos perdido más del 50 por ciento de nuestro poder adquisitivo, lo cual ha dejado a fin del año pasado al sector docente en una situación muy crítica, sostuvo Blanco quien explicó que el sector solamente percibió actualizaciones que “acompañan” los niveles inflacionarios. “Tenemos salarios que están en la línea de la pobreza, por lo que se hace muy difícil a los docentes poder afrontar sus necesidades y las de sus familias”. Y diferenció que la adhesión por 24 horas responde a una acción “extrema” dado que es un gremio que no suele sumarse a este tipo de medidas de fuerzas. “Buscamos que el Gobierno tome real dimensión de la situación por la cual están pasando los docentes y extreme sus esfuerzos para poder aliviar, aunque sea en parte, la situación salarial”.
En diálogo con Cadena Tiempo, reconoció que existe diálogo con los ministros provinciales, aunque diferenció el vínculo institucional con la realidad salarial de los docentes. “Buscamos un reconocimiento salarial en función a la tarea que se desenvuelve y la preparación que conlleva la tarea docente. Los profesionales de educación se han formado y capacitado; se actualizan permanentemente y hoy con la jornada completa de ocho horas diarias se encuentra bajo la línea de pobreza. Con los niveles de salario y frente a los aumentos de las facturas de gas y luz, a los docentes se les hace muy difícil cubrir esas necesidades”, planteó Blanco.
“Un docente –ejemplificó- con una jornada de 8 horas y con 15 años de antigüedad, está cobrando un millón de pesos aproximadamente. Hay casos de directores de instituciones con toda la responsabilidad que eso conlleva, de instituciones grandes de la ciudad, que están en el orden del millón 200 o 300 mil de pesos y es gente que ha tenido toda una gran trayectoria académica para formarse y debió concursar para acceder a su cargo. En el salario no se refleja la responsabilidad que tiene al dirigir un establecimiento educativo; controlar a la gente que trabaje; hacer que el edificio funcione con 200 docentes a cargo y con una currícula de 700 a 800 alumnos, más el personal auxiliar”.
El referente de AMET adelantó que este jueves se cumplirá una nueva instancia paritaria en la que el Gobierno Provincial podría acercar una propuesta superadora. “Entendemos que hubo un gran acatamiento, aunque existe la advertencia de descuentos, aunque pese a ese riesgo muchos docentes tomaron la decisión de llevar adelante el paro para manifestarle al gobierno que debe atender la situación. El diálogo que existe debe traducirse en decisiones que permitan recomponer el salario; no hay que tratar de minimizar; ni descalificar, sino que es la expresión de una necesidad que tiene el sector”, finalizó.