Más de 20 días sin Luis Sea: ¿desapareció en la nieve?

El peón de 55 años desapareció cuando iba a una estancia durante el temporal de nieve que azotó a Comodoro Rivadavia. Los perros hallaron rastros que van en sentido contrario de la estancia a la que se dirigía. Qué fue lo último hizo el hombre antes de salir para el campo. Muchas preguntas y pocas respuestas

09 JUL 2024 - 18:48 | Actualizado 09 JUL 2024 - 20:00

Después de 21 días, lo único que hay de Luis Sea es una imagen de su camioneta, que reconocieron porque tiene el paragolpes trasero chocado, yendo en dirección hacia la estancia Las Marianas de Dante “Cachito” Pérez, en el límite de Chubut y Santa Cruz.

La imagen fue captada el martes 18 de junio alrededor de las 18.30 horas, por una cámara de Tecpetrol. En ningún momento se ve a Luis “Lalo” Sea en el interior de la camioneta. Esto que muchos pasan por alto, puesto en el contexto de su desaparición, podría cobrar otra significación.

En estos más de 20 días de búsqueda, los investigadores -y en especial sus amigos- recorrieron todos los puestos donde Luis Sea podría haberse refugiado del temporal y no encontraron nada. El único indicio que hay son rastros de los perros que indican que el hombre habría recorrido 500 metros en dirección contraria al campo donde se dirigía.

A primera vista, suponen que la camioneta se encajó a unos 15 kilómetros de la estancia, y el hombre se habría bajado para intentar llegar caminando. Si el peón, que conocía el lugar, fue abatido por el frío y el viento, tendrían que encontrarlo bajo la nieve.

Lo que llama la atención es por qué el hombre no fue para el lado de la antena donde podía llamar por teléfono.

Luis Sea llegó a Comodoro Rivadavia el martes, cerca del mediodía, donde fue a la casa del patrón a cobrar parte del suelo, unos 300.000 pesos, del mes de abril. El hombre venía ahorrando dinero para cambiar la camioneta.

La última que lo vio fue una mujer que visitaba seguido, una tía política, a la que le dejó todo para hacer un asado y le dijo que regresaba al rato.

Luis Sea es un hombre de campo, trabajador, diestro con los animales, apenas sabe leer y escribir, era soltero, iba y venía a Comodoro Rivadavia sin darle explicaciones a nadie.

Ese martes a la mañana regresó del campo a la ciudad impecable. Comentó que la presencia de moscas hacía presagiar que se venía un temporal. Ya se había aprovisionado para pasar el invierno en el campo. Necesitaba plata para cubrir sus gastos diarios; se llevó varios billetes de diez mil pesos.

No se sabe qué hizo desde que se fue de la casa del patrón con 300.000 pesos hasta que una mujer que visitaba lo vio por última vez a las cinco de la tarde. Aquí puede estar una de las claves para desentrañar el misterio.

Una vecina declaró que el hombre estuvo solo diez minutos en la casa de esa mujer y salió disparado en la camioneta. Este dato no pasó desapercibido para los investigadores. Las circunstancias de la llegada y la partida repentina de Luis Sea no están del todo claras.

¿Y si Luis Sea no era el que iba en esa camioneta que registraron las cámaras de Tecpetrol? Esta es una hipótesis que nadie se atreve a descartar aún. Hay tres versiones diferentes sobre las circunstancias extrañas en las que el peón se fue de la casa donde fue visto por última vez.

Al mismo tiempo, llama la atención que la camioneta apareció unos metros antes de donde debió haber doblado Luis Sea para ir a la estancia. Esto lleva a pensar que pudo haber sido plantada. Dentro del vehículo había un envase de cerveza y una campera.

Una de las posibilidades -especulan algunos- es que Luis Sea haya parado en un boliche a tomar algo y se haya peleado con algún paisano. En ese supuesto caso -sobre el cual no hay ningún indicio- otros pudieron haberse llevado la camioneta.

En la medida en que el tiempo pasa y se vuelve cada vez más difícil llegar a peinar el terreno cubierto con más de un metro de nieve, estas versiones alternativas van ganando terreno.

Nadie se atreve a decirlo a viva voz, pero muchos lo piensan.

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09 JUL 2024 - 18:48

Después de 21 días, lo único que hay de Luis Sea es una imagen de su camioneta, que reconocieron porque tiene el paragolpes trasero chocado, yendo en dirección hacia la estancia Las Marianas de Dante “Cachito” Pérez, en el límite de Chubut y Santa Cruz.

La imagen fue captada el martes 18 de junio alrededor de las 18.30 horas, por una cámara de Tecpetrol. En ningún momento se ve a Luis “Lalo” Sea en el interior de la camioneta. Esto que muchos pasan por alto, puesto en el contexto de su desaparición, podría cobrar otra significación.

En estos más de 20 días de búsqueda, los investigadores -y en especial sus amigos- recorrieron todos los puestos donde Luis Sea podría haberse refugiado del temporal y no encontraron nada. El único indicio que hay son rastros de los perros que indican que el hombre habría recorrido 500 metros en dirección contraria al campo donde se dirigía.

A primera vista, suponen que la camioneta se encajó a unos 15 kilómetros de la estancia, y el hombre se habría bajado para intentar llegar caminando. Si el peón, que conocía el lugar, fue abatido por el frío y el viento, tendrían que encontrarlo bajo la nieve.

Lo que llama la atención es por qué el hombre no fue para el lado de la antena donde podía llamar por teléfono.

Luis Sea llegó a Comodoro Rivadavia el martes, cerca del mediodía, donde fue a la casa del patrón a cobrar parte del suelo, unos 300.000 pesos, del mes de abril. El hombre venía ahorrando dinero para cambiar la camioneta.

La última que lo vio fue una mujer que visitaba seguido, una tía política, a la que le dejó todo para hacer un asado y le dijo que regresaba al rato.

Luis Sea es un hombre de campo, trabajador, diestro con los animales, apenas sabe leer y escribir, era soltero, iba y venía a Comodoro Rivadavia sin darle explicaciones a nadie.

Ese martes a la mañana regresó del campo a la ciudad impecable. Comentó que la presencia de moscas hacía presagiar que se venía un temporal. Ya se había aprovisionado para pasar el invierno en el campo. Necesitaba plata para cubrir sus gastos diarios; se llevó varios billetes de diez mil pesos.

No se sabe qué hizo desde que se fue de la casa del patrón con 300.000 pesos hasta que una mujer que visitaba lo vio por última vez a las cinco de la tarde. Aquí puede estar una de las claves para desentrañar el misterio.

Una vecina declaró que el hombre estuvo solo diez minutos en la casa de esa mujer y salió disparado en la camioneta. Este dato no pasó desapercibido para los investigadores. Las circunstancias de la llegada y la partida repentina de Luis Sea no están del todo claras.

¿Y si Luis Sea no era el que iba en esa camioneta que registraron las cámaras de Tecpetrol? Esta es una hipótesis que nadie se atreve a descartar aún. Hay tres versiones diferentes sobre las circunstancias extrañas en las que el peón se fue de la casa donde fue visto por última vez.

Al mismo tiempo, llama la atención que la camioneta apareció unos metros antes de donde debió haber doblado Luis Sea para ir a la estancia. Esto lleva a pensar que pudo haber sido plantada. Dentro del vehículo había un envase de cerveza y una campera.

Una de las posibilidades -especulan algunos- es que Luis Sea haya parado en un boliche a tomar algo y se haya peleado con algún paisano. En ese supuesto caso -sobre el cual no hay ningún indicio- otros pudieron haberse llevado la camioneta.

En la medida en que el tiempo pasa y se vuelve cada vez más difícil llegar a peinar el terreno cubierto con más de un metro de nieve, estas versiones alternativas van ganando terreno.

Nadie se atreve a decirlo a viva voz, pero muchos lo piensan.


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