Imputado por homicidio seguirá detenido hasta el Juicio por Jurados

Rubén Portillo seguirá en prisión preventiva por el homicidio de Alejandro Quiñilaf, en Rawson. La Fiscalía y la defensa acordaron mantener la prisión preventiva del acusado, quien enfrenta una posible condena de 15 años de prisión.

05 JUL 2024 - 11:51 | Actualizado 05 JUL 2024 - 11:53

Con el acuerdo de los acusadores y la defensa, un vecino de Rawson seguirá detenido con prisión preventiva hasta la audiencia preliminar al Juicio por Jurados en su contra por el delito de homicidio. Se trata de Rubén Portillo que se encuentra sospechado de haber asesinado de una apuñalada a Alejandro Quiñilaf, en un hecho ocurrido en julio del año pasado en un domicilio del barrio Gregorio Mayo de la capital provincial.

En una audiencia de revisión de la prisión preventiva de Portillo ante los jueces Carolina Marin y Marcos Nápoli, el Ministerio Público Fiscal y la Defensa coincidieron en que el imputado continúe en situación de prisión preventiva hasta la audiencia preliminar al debate. Por el tipo de delito, Portillo será sometido a un Juicio por Jurados.

La Fiscalía de Rawson, a cargo de la Fiscal General Jefe Florencia Gómez, presentó oportunamente la acusación en la que se expresó la teoría del caso. Anticipó que pedirá una pena de 15 años de cumplimiento efectivo por el delito de homicidio simple. Portillo se encuentra detenido desde el inicio de la investigación del hecho.

La víctima, Quiñilaf, recibió una estocada fatal de arma blanca que le atravesó el corazón y el pulmón. El hecho se produjo en el exterior de la vivienda localizada en la calle Córdoba del barrio Gregorio Mayo, cuando víctima y victimario, junto a otros dos hombres, se habían reunido para presenciar un partido de fútbol por televisión. En el entretiempo, Quiñelaf y Portillo salieron al exterior de la casa. Fue en esa circunstancia, en medio de una discusión, Portillo le asestó una profunda puñalada en el pectoral izquierdo que le afectó seriamente el corazón y uno de los pulmones.

Otras personas que se hallaban en el lugar pidieron la ayuda de vecinos y trasladaron a Quiñelaf al Hospital Santa Teresita en un vehículo Peugeot 206. Minutos después falleció. La causa de su muerte fue la de un shock hipovolémico, provocado por lesión cardíaca producida por un arma blanca.

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05 JUL 2024 - 11:51

Con el acuerdo de los acusadores y la defensa, un vecino de Rawson seguirá detenido con prisión preventiva hasta la audiencia preliminar al Juicio por Jurados en su contra por el delito de homicidio. Se trata de Rubén Portillo que se encuentra sospechado de haber asesinado de una apuñalada a Alejandro Quiñilaf, en un hecho ocurrido en julio del año pasado en un domicilio del barrio Gregorio Mayo de la capital provincial.

En una audiencia de revisión de la prisión preventiva de Portillo ante los jueces Carolina Marin y Marcos Nápoli, el Ministerio Público Fiscal y la Defensa coincidieron en que el imputado continúe en situación de prisión preventiva hasta la audiencia preliminar al debate. Por el tipo de delito, Portillo será sometido a un Juicio por Jurados.

La Fiscalía de Rawson, a cargo de la Fiscal General Jefe Florencia Gómez, presentó oportunamente la acusación en la que se expresó la teoría del caso. Anticipó que pedirá una pena de 15 años de cumplimiento efectivo por el delito de homicidio simple. Portillo se encuentra detenido desde el inicio de la investigación del hecho.

La víctima, Quiñilaf, recibió una estocada fatal de arma blanca que le atravesó el corazón y el pulmón. El hecho se produjo en el exterior de la vivienda localizada en la calle Córdoba del barrio Gregorio Mayo, cuando víctima y victimario, junto a otros dos hombres, se habían reunido para presenciar un partido de fútbol por televisión. En el entretiempo, Quiñelaf y Portillo salieron al exterior de la casa. Fue en esa circunstancia, en medio de una discusión, Portillo le asestó una profunda puñalada en el pectoral izquierdo que le afectó seriamente el corazón y uno de los pulmones.

Otras personas que se hallaban en el lugar pidieron la ayuda de vecinos y trasladaron a Quiñelaf al Hospital Santa Teresita en un vehículo Peugeot 206. Minutos después falleció. La causa de su muerte fue la de un shock hipovolémico, provocado por lesión cardíaca producida por un arma blanca.


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