En las afueras de Eldorado do Sul, a 17 kilómetros de Porto Alegre, la capital del estado, muchas de las personas que abandonaron sus hogares dormían al borde de la carretera y dijeron a Reuters que estaban pasando hambre.
Familias enteras se marchaban a pie, llevando sus pertenencias en mochilas y carritos de la compra.
"Llevamos tres días sin comer y acabamos de conseguir esta manta. Estoy con gente que ni siquiera conozco, no sé dónde está mi familia", dijo un joven llamado Ricardo Junior.
Imagen satelital del aeropuerto de Porto Alegre ????, antes y después de las inundaciones.pic.twitter.com/hPmnPEbXTK
— Vuelos y Spotters ? (@SpottersArg) May 8, 2024
Las inundaciones han dificultado las labores de rescate, y docenas de personas siguen esperando ser evacuadas en botes o helicóptero de las casas afectadas.
Pequeñas embarcaciones recorren la ciudad inundada en busca de supervivientes. La agencia estatal de Defensa Civil dijo que el número de víctimas mortales había aumentado a 90 y que se estaban investigando otras cuatro muertes, mientras que 131 personas seguían en paradero desconocido y 155.000 se habían quedado sin hogar.
En Porto Alegre, ciudad de 1,3 millones de habitantes situada a orillas del río Guaiba, las calles del centro estaban bajo el agua, mientras los habitantes se encontraban con estanterías de supermercados vacías y gasolineras cerradas, y las tiendas racionaron la venta de agua mineral.
Las inundaciones también afectaron a los servicios de agua y electricidad, con más de 1,4 millones de damnificados en total, según la Defensa Civil de Brasil.
Casi medio millón de personas se quedaron sin electricidad en Porto Alegre y las ciudades periféricas, ya que las compañías eléctricas cortaron el suministro por motivos de seguridad en los barrios inundados.
The sheer scale of the flooding in the metropolitan area of Porto Alegre, Brazil, which is home to over 4 million people, is hard to comprehend. Thousands of homes flooded, towns cut off, dozens killed, hundreds missing. Credit: Jornal Razão - heliturtaxiaereo pic.twitter.com/H1XMCQIpiY
— Nahel Belgherze (@WxNB_) May 7, 2024
El operador de la red nacional, ONS, informó que cinco presas hidroeléctricas y líneas de transmisión habían quedado fuera de servicio debido a las fuertes lluvias.
El presidente Luiz Inácio Lula da Silva declaró en un programa de televisión gubernamental que la magnitud de los daños no se conocerá hasta que bajen las aguas.
Asimismo, prometió ayuda federal para el estado en lo que se considera el peor desastre climático de su historia, según la agencia de noticias Reuters.
En las afueras de Eldorado do Sul, a 17 kilómetros de Porto Alegre, la capital del estado, muchas de las personas que abandonaron sus hogares dormían al borde de la carretera y dijeron a Reuters que estaban pasando hambre.
Familias enteras se marchaban a pie, llevando sus pertenencias en mochilas y carritos de la compra.
"Llevamos tres días sin comer y acabamos de conseguir esta manta. Estoy con gente que ni siquiera conozco, no sé dónde está mi familia", dijo un joven llamado Ricardo Junior.
Imagen satelital del aeropuerto de Porto Alegre ????, antes y después de las inundaciones.pic.twitter.com/hPmnPEbXTK
— Vuelos y Spotters ? (@SpottersArg) May 8, 2024
Las inundaciones han dificultado las labores de rescate, y docenas de personas siguen esperando ser evacuadas en botes o helicóptero de las casas afectadas.
Pequeñas embarcaciones recorren la ciudad inundada en busca de supervivientes. La agencia estatal de Defensa Civil dijo que el número de víctimas mortales había aumentado a 90 y que se estaban investigando otras cuatro muertes, mientras que 131 personas seguían en paradero desconocido y 155.000 se habían quedado sin hogar.
En Porto Alegre, ciudad de 1,3 millones de habitantes situada a orillas del río Guaiba, las calles del centro estaban bajo el agua, mientras los habitantes se encontraban con estanterías de supermercados vacías y gasolineras cerradas, y las tiendas racionaron la venta de agua mineral.
Las inundaciones también afectaron a los servicios de agua y electricidad, con más de 1,4 millones de damnificados en total, según la Defensa Civil de Brasil.
Casi medio millón de personas se quedaron sin electricidad en Porto Alegre y las ciudades periféricas, ya que las compañías eléctricas cortaron el suministro por motivos de seguridad en los barrios inundados.
The sheer scale of the flooding in the metropolitan area of Porto Alegre, Brazil, which is home to over 4 million people, is hard to comprehend. Thousands of homes flooded, towns cut off, dozens killed, hundreds missing. Credit: Jornal Razão - heliturtaxiaereo pic.twitter.com/H1XMCQIpiY
— Nahel Belgherze (@WxNB_) May 7, 2024
El operador de la red nacional, ONS, informó que cinco presas hidroeléctricas y líneas de transmisión habían quedado fuera de servicio debido a las fuertes lluvias.
El presidente Luiz Inácio Lula da Silva declaró en un programa de televisión gubernamental que la magnitud de los daños no se conocerá hasta que bajen las aguas.
Asimismo, prometió ayuda federal para el estado en lo que se considera el peor desastre climático de su historia, según la agencia de noticias Reuters.