Durante la madrugada de este miércoles se incendiaron cinco iglúes de residuos ubicados en distintos puntos de la zona sur de Comodoro Rivadavia. Desde la Municipalidad denunciaron lo ocurrido ante las autoridades policiales y solicitarán asimismo que intervenga la Fiscalía para analizar las cámaras de seguridad del sector.
Estos siniestros, que se presumen intencionales, se suman a otros tres depósitos de este tipo que se quemaron previamente, sumando un total de ocho en lo que va del año. Los mismos equivalen a más de cinco millones de pesos del dinero de los contribuyentes y son de vital importancia en las acciones que se realizan para mejorar el entorno ambiental de la ciudad.
En esta línea, explicó que “ante estos casos, se procede a efectuar la denuncia y se averigua si hay cámaras de seguridad para obtener algún tipo de información, pero a veces es difícil encontrar el culpable. Uno puede llegar a pensar que son desde chicos haciendo maldades hasta un pirómano, pero eso ya es materia de investigación”.
En total, son 317 los iglúes repartidos por el ejido urbano de Comodoro Rivadavia. Según el recuento, solo durante el mes de diciembre los dispositivos verdes recolectaron 46,78 toneladas de residuos que fueron trasladados a la Planta de Tratamiento, mientras que los azules sumaron 22,56 toneladas.
Sin embargo, desde su implementación en el año 2016, “llevamos más de 70 dispositivos prendidos fuego”, confirmó Fernández. Esto representa un gran gasto para las arcas municipales.
La forma correcta de utilizarlos
Por otro lado, el funcionario municipal remarcó que “los iglúes son una herramienta muy útil, pero a veces mal usada, porque a veces los vecinos los usan para tirar residuos comunes o incluso se han encontrado perros adentro”.
En ese marco, recordó que “en el iglú verde debe depositarse todo lo que se denomina residuos secos: botellas de plástico, nylon, cartón o latas de aluminio; mientras que el azul está destinado a botellas de vidrio”.
“Es una herramienta muy importante, ya que el vecino puede depositar sus residuos, que luego van a la planta, se separan y después se recuperan con diferentes acciones. Es fundamental su buena utilización para el cuidado del medio ambiente”, concluyó.
Durante la madrugada de este miércoles se incendiaron cinco iglúes de residuos ubicados en distintos puntos de la zona sur de Comodoro Rivadavia. Desde la Municipalidad denunciaron lo ocurrido ante las autoridades policiales y solicitarán asimismo que intervenga la Fiscalía para analizar las cámaras de seguridad del sector.
Estos siniestros, que se presumen intencionales, se suman a otros tres depósitos de este tipo que se quemaron previamente, sumando un total de ocho en lo que va del año. Los mismos equivalen a más de cinco millones de pesos del dinero de los contribuyentes y son de vital importancia en las acciones que se realizan para mejorar el entorno ambiental de la ciudad.
En esta línea, explicó que “ante estos casos, se procede a efectuar la denuncia y se averigua si hay cámaras de seguridad para obtener algún tipo de información, pero a veces es difícil encontrar el culpable. Uno puede llegar a pensar que son desde chicos haciendo maldades hasta un pirómano, pero eso ya es materia de investigación”.
En total, son 317 los iglúes repartidos por el ejido urbano de Comodoro Rivadavia. Según el recuento, solo durante el mes de diciembre los dispositivos verdes recolectaron 46,78 toneladas de residuos que fueron trasladados a la Planta de Tratamiento, mientras que los azules sumaron 22,56 toneladas.
Sin embargo, desde su implementación en el año 2016, “llevamos más de 70 dispositivos prendidos fuego”, confirmó Fernández. Esto representa un gran gasto para las arcas municipales.
La forma correcta de utilizarlos
Por otro lado, el funcionario municipal remarcó que “los iglúes son una herramienta muy útil, pero a veces mal usada, porque a veces los vecinos los usan para tirar residuos comunes o incluso se han encontrado perros adentro”.
En ese marco, recordó que “en el iglú verde debe depositarse todo lo que se denomina residuos secos: botellas de plástico, nylon, cartón o latas de aluminio; mientras que el azul está destinado a botellas de vidrio”.
“Es una herramienta muy importante, ya que el vecino puede depositar sus residuos, que luego van a la planta, se separan y después se recuperan con diferentes acciones. Es fundamental su buena utilización para el cuidado del medio ambiente”, concluyó.