Las chatarrerías de Trelew y la zona están en la mira de la Justicia debido a la ola de robos de cables de media tensión, telefonía y fibra óptica que viene creciendo en los últimos años.
Este viernes, la Municipalidad y la División Sustracción de Automotores de la Policía realizaron controles en un taller de acopio de chatarra, ubicado en la avenida Eva Perón.
Fuentes policiales confirmaron a Jornada Web que fue clausurado debido a que “no contaba con la habilitación comercial ni tampoco tenía la habitación de la cartera de Ambiente de provincia”.
En el lugar, dijeron los voceros, no hallaron rastros de cobre pero sí identificaron documentación que vendría a mostrar que habría habido algunas transacciones.
En los últimos días, proliferaron casos de robos millonarios de cableado eléctrico y de fibra óptica tanto en Trelew como en Rawson, y esto puso en alerta a las autoridades policiales.
Desde la Jefatura Policial impartieron instrucciones precisas para desbaratar la venta clandestina de cobre que se extrae de los cables robados.
Al parecer, hasta el momento no habría identificada ninguna banda dedicada al robo de cables, que es un negocio lucrativo.
Los investigadores creen que estos cables serían acopiados en predios de Trelew y la zona donde extraerían el cobre y lo venderían a una fundidora en Buenos Aires.
Para ponerlo en números, un kilo de cobre se estaría vendiendo en unos 4600 pesos, dijeron los investigadores para ilustrar cómo funciona el negocio.
El punto es que los predios, para acopiar el cobre, tienen que estar regulados por la cartera de Ambiente, ya que este se considera “sustancia peligrosa”, además de contar con la debida habilitación comercial.
Las chatarrerías de Trelew y la zona están en la mira de la Justicia debido a la ola de robos de cables de media tensión, telefonía y fibra óptica que viene creciendo en los últimos años.
Este viernes, la Municipalidad y la División Sustracción de Automotores de la Policía realizaron controles en un taller de acopio de chatarra, ubicado en la avenida Eva Perón.
Fuentes policiales confirmaron a Jornada Web que fue clausurado debido a que “no contaba con la habilitación comercial ni tampoco tenía la habitación de la cartera de Ambiente de provincia”.
En el lugar, dijeron los voceros, no hallaron rastros de cobre pero sí identificaron documentación que vendría a mostrar que habría habido algunas transacciones.
En los últimos días, proliferaron casos de robos millonarios de cableado eléctrico y de fibra óptica tanto en Trelew como en Rawson, y esto puso en alerta a las autoridades policiales.
Desde la Jefatura Policial impartieron instrucciones precisas para desbaratar la venta clandestina de cobre que se extrae de los cables robados.
Al parecer, hasta el momento no habría identificada ninguna banda dedicada al robo de cables, que es un negocio lucrativo.
Los investigadores creen que estos cables serían acopiados en predios de Trelew y la zona donde extraerían el cobre y lo venderían a una fundidora en Buenos Aires.
Para ponerlo en números, un kilo de cobre se estaría vendiendo en unos 4600 pesos, dijeron los investigadores para ilustrar cómo funciona el negocio.
El punto es que los predios, para acopiar el cobre, tienen que estar regulados por la cartera de Ambiente, ya que este se considera “sustancia peligrosa”, además de contar con la debida habilitación comercial.