La enfermera que mató siete bebés será juzgada por otro intento de asesinato
Lucy Letby, la enfermera británica que fue condenada el mes pasado a cadena perpetua por el homicidio de siete recién nacidos, deberá enfrentar un nuevo juicio por otro cargo de intento de asesinato, informó este lunes la justicia del Reino Unido.
La enfermera de 33 años fue sentenciada por un tribunal de Manchester a prisión de por vida sin posibilidad de liberación, tras ser hallada culpable de asesinar a siete bebés prematuros entre 2015 y 2016 en el Hospital Countess of Chester, marcando uno de los casos más atroces en la historia contemporánea británica.
A pesar de estas condenas, Letby ha sostenido en repetidas ocasiones su inocencia.
No obstante, durante su juicio, el jurado no pudo llegar a un veredicto en otros seis casos de intento de asesinato.
La Fiscalía de la Corona (CPS) anunció que buscará un nuevo proceso judicial en relación al cargo de intento de asesinato de una niña, identificada como Baby K, ocurrido en febrero de 2016.
El inicio de este juicio fue fijado provisionalmente para el 10 de junio de 2024 y se estima que su duración oscile entre dos y tres semanas.
El fiscal Jonathan Storer subrayó que la decisión de emprender un nuevo juicio ha sido "extremadamente compleja y difícil", haciendo eco de los retos judiciales que representó este caso desde sus inicios.
La enfermera neonatal, oriunda de Hereford, compareció a la audiencia por videoconferencia desde el recinto penitenciario HMP New Hall en Wakefield, West Yorkshire.
Durante la conexión, Letby se limitó a confirmar su identidad y seguir las incidencias del proceso.
Cabe destacar que, si bien se busca un nuevo juicio por el caso de Baby K, Nicholas Johnson KC, representante de la Fiscalía, confirmó que no se intentará un nuevo proceso sobre las otras cinco acusaciones pendientes que implicaban a otros menores.
Por su parte, la defensa de Letby, quien ya fue absuelta de dos cargos de intento de asesinato, reiteró que su cliente mantiene su inocencia en todos los cargos y anunció que se ha presentado un recurso de apelación contra las condenas previas ante el Tribunal de Apelaciones.
Entre junio de 2015 y junio de 2016, Lucy Letby cometió una serie de asesinatos de bebés en el hospital donde trabajaba.
Utilizó métodos como inyectar aire a los pequeños ya sea por vía endovenosa o a través de una sonda naso-gástrica, y en algunos casos administró leche en cantidades excesivas.
La enfermera de 33 años fue sentenciada por un tribunal de Manchester a prisión de por vida sin posibilidad de liberación, tras ser hallada culpable de asesinar a siete bebés prematuros entre 2015 y 2016 en el Hospital Countess of Chester, marcando uno de los casos más atroces en la historia contemporánea británica.
A pesar de estas condenas, Letby ha sostenido en repetidas ocasiones su inocencia.
No obstante, durante su juicio, el jurado no pudo llegar a un veredicto en otros seis casos de intento de asesinato.
La Fiscalía de la Corona (CPS) anunció que buscará un nuevo proceso judicial en relación al cargo de intento de asesinato de una niña, identificada como Baby K, ocurrido en febrero de 2016.
El inicio de este juicio fue fijado provisionalmente para el 10 de junio de 2024 y se estima que su duración oscile entre dos y tres semanas.
El fiscal Jonathan Storer subrayó que la decisión de emprender un nuevo juicio ha sido "extremadamente compleja y difícil", haciendo eco de los retos judiciales que representó este caso desde sus inicios.
La enfermera neonatal, oriunda de Hereford, compareció a la audiencia por videoconferencia desde el recinto penitenciario HMP New Hall en Wakefield, West Yorkshire.
Durante la conexión, Letby se limitó a confirmar su identidad y seguir las incidencias del proceso.
Cabe destacar que, si bien se busca un nuevo juicio por el caso de Baby K, Nicholas Johnson KC, representante de la Fiscalía, confirmó que no se intentará un nuevo proceso sobre las otras cinco acusaciones pendientes que implicaban a otros menores.
Por su parte, la defensa de Letby, quien ya fue absuelta de dos cargos de intento de asesinato, reiteró que su cliente mantiene su inocencia en todos los cargos y anunció que se ha presentado un recurso de apelación contra las condenas previas ante el Tribunal de Apelaciones.
Entre junio de 2015 y junio de 2016, Lucy Letby cometió una serie de asesinatos de bebés en el hospital donde trabajaba.
Utilizó métodos como inyectar aire a los pequeños ya sea por vía endovenosa o a través de una sonda naso-gástrica, y en algunos casos administró leche en cantidades excesivas.