Una clase de laboratorio casi termina en una masacre de un alumno al que un compañero lo atacó con un caño, le abrieron la cabeza y casi lo matan.
El ataque sucedió el miércoles pasado, a la tarde en la Escuela 728 de Puerto Madryn, en un aula con alumnos de quinto año. Recién trascendió en las últimas horas, según publicó el portal ElMadrynense.
Según testigos, un adolescente pidió permiso para ir al baño, regresó con un caño y le pegó tres veces en la cabeza cuando estaba de espaldas, y cayó tendido al piso.
Un compañero intercedió y logró empujar al agresor cuando este iba a rematarlo en el suelo, indicaron las fuentes.
Al parecer, varios alumnos -además de la víctima- quedaron traumados después de haber presenciado este horror.
El hecho fue denunciado y está en manos de la Fiscalía de Puerto Madryn.
Una clase de laboratorio casi termina en una masacre de un alumno al que un compañero lo atacó con un caño, le abrieron la cabeza y casi lo matan.
El ataque sucedió el miércoles pasado, a la tarde en la Escuela 728 de Puerto Madryn, en un aula con alumnos de quinto año. Recién trascendió en las últimas horas, según publicó el portal ElMadrynense.
Según testigos, un adolescente pidió permiso para ir al baño, regresó con un caño y le pegó tres veces en la cabeza cuando estaba de espaldas, y cayó tendido al piso.
Un compañero intercedió y logró empujar al agresor cuando este iba a rematarlo en el suelo, indicaron las fuentes.
Al parecer, varios alumnos -además de la víctima- quedaron traumados después de haber presenciado este horror.
El hecho fue denunciado y está en manos de la Fiscalía de Puerto Madryn.