El hecho se produjo en una carretera de la región de Flandes en Bélgica el pasado año, pero el hecho se volvió público ahora y, si bien la policía belga no reveló ni la identidad del infractor ni el modelo de automóvil que conducía, algunos medios apuntan a que se trata de un Bugatti Chiron, un coche deportivo que puede alcanzar los 490 km/hora y que solo está al alcance de los bolsillos más adinerados dado que su precio de mercado es de 2,4 millones de euros.
El caso sigue bajo investigación y a pesar de que nunca se había registrado un caso tan extremo, las carreteras de Bélgica tienen constancia de importantes excesos de velocidad al volante.
El pasado año otro conductor fue cazado a 236 kilómetros por hora mientras que otro circulaba a 199 km/h por una vía limitada a 70.
El hecho se produjo en una carretera de la región de Flandes en Bélgica el pasado año, pero el hecho se volvió público ahora y, si bien la policía belga no reveló ni la identidad del infractor ni el modelo de automóvil que conducía, algunos medios apuntan a que se trata de un Bugatti Chiron, un coche deportivo que puede alcanzar los 490 km/hora y que solo está al alcance de los bolsillos más adinerados dado que su precio de mercado es de 2,4 millones de euros.
El caso sigue bajo investigación y a pesar de que nunca se había registrado un caso tan extremo, las carreteras de Bélgica tienen constancia de importantes excesos de velocidad al volante.
El pasado año otro conductor fue cazado a 236 kilómetros por hora mientras que otro circulaba a 199 km/h por una vía limitada a 70.