El policía acusado del crimen podría ir a la cárcel más de diez años
El próximo lunes formalizarán las imputaciones a los cuatro efectivos involucrados en la muerte del joven de 16 años de Comodoro Rivadavia. Uno de ellos está señalado como el supuesto autor del homicidio mientras que los otros tres son sindicados de encubrimiento
El lunes que viene, es la audiencia de apertura de la investigación por el homicidio de Lautaro Labbe, un adolescente de 16 años que murió en el Hospital de Comodoro Rivadavia, a los pocos días de haber sido baleado en la cabeza durante un procedimiento policial en el barrio San Martín.
El chico, que jugaba al fútbol en el Club Atlético Rivadavia, fue baleado la madrugada del 18 de abril pasado. La investigación dio un giro cuando aparecieron testimonios que contradecían las versiones de que los efectivos de la Comisaría Séptima habían declarado en las actas.
A partir de ahí, Unidad Regional de Comodoro Rivadavia apartó a cuatro efectivos sospechados que habían concurrido al lugar ante la denuncia de vecinos sobre supuestos hechos vandálicos en los que había menores involucrados.
El fiscal Juan Carlos Caperochipi confirmó a Fuera de Hora por Cadena Tiempo, que le imputará a uno de ellos por el delito de "homicidio doblemente agravado", que prevé una mínima de diez años de cárcel, en tanto que los otros serán sindicados por "encubrimiento agravado" y "falsedad ideológica".
Explicó que la madrugada del 18 de abril vecinos denunciaron que en el barrio San Martín, "había tres jóvenes que estarían violentando vidrios de vehículos y cometiendo hechos de vandalismo".
A raíz de esto, concurrieron los cuatro efectivos implicados y es ahí cuando "se produce esta escalada de situaciones que terminan con la herida grave de Labbe y su posterior fallecimiento en el Hospital", indicó.
Según el fiscal, en aquel procedimiento "no era necesaria la utilización de arma de fuego; hubo excesos que culminaron con uno de los efectivos innecesariamente utilizando el arma".
Al mismo tiempo, continuó Caperochipi, "las tres personas restantes convergieron en el plan de no revelar lo que había ocurrido, llegando a plasmar datos no verdaderos en el acta de intervención, por eso los delito de encubrimiento agravado y de falsedad ideológica".
Estos últimos, puntualizó, prevén una escala penal de 3 a 6 años de cárcel.
El lunes que viene, es la audiencia de apertura de la investigación por el homicidio de Lautaro Labbe, un adolescente de 16 años que murió en el Hospital de Comodoro Rivadavia, a los pocos días de haber sido baleado en la cabeza durante un procedimiento policial en el barrio San Martín.
El chico, que jugaba al fútbol en el Club Atlético Rivadavia, fue baleado la madrugada del 18 de abril pasado. La investigación dio un giro cuando aparecieron testimonios que contradecían las versiones de que los efectivos de la Comisaría Séptima habían declarado en las actas.
A partir de ahí, Unidad Regional de Comodoro Rivadavia apartó a cuatro efectivos sospechados que habían concurrido al lugar ante la denuncia de vecinos sobre supuestos hechos vandálicos en los que había menores involucrados.
El fiscal Juan Carlos Caperochipi confirmó a Fuera de Hora por Cadena Tiempo, que le imputará a uno de ellos por el delito de "homicidio doblemente agravado", que prevé una mínima de diez años de cárcel, en tanto que los otros serán sindicados por "encubrimiento agravado" y "falsedad ideológica".
Explicó que la madrugada del 18 de abril vecinos denunciaron que en el barrio San Martín, "había tres jóvenes que estarían violentando vidrios de vehículos y cometiendo hechos de vandalismo".
A raíz de esto, concurrieron los cuatro efectivos implicados y es ahí cuando "se produce esta escalada de situaciones que terminan con la herida grave de Labbe y su posterior fallecimiento en el Hospital", indicó.
Según el fiscal, en aquel procedimiento "no era necesaria la utilización de arma de fuego; hubo excesos que culminaron con uno de los efectivos innecesariamente utilizando el arma".
Al mismo tiempo, continuó Caperochipi, "las tres personas restantes convergieron en el plan de no revelar lo que había ocurrido, llegando a plasmar datos no verdaderos en el acta de intervención, por eso los delito de encubrimiento agravado y de falsedad ideológica".
Estos últimos, puntualizó, prevén una escala penal de 3 a 6 años de cárcel.