Tras 18 años de obras, el reactor ubicado en la costa suroeste de Finlandia "comenzó a producir electricidad", dijo TVO, informó la agencia francesa AFP
Con 1600 megavatios, suministra alrededor del 14% de la producción de electricidad finlandesa y es el más potente de Europa.
Construido en conjunto por el grupo francés Areva y el alemán Siemens, emplea tecnología de agua presurizada EPR de última generación, que es la tecnología considerada más potente y segura, y que fue concebida para relanzar la energía nuclear en Europa tras la catástrofe nuclear de Chernobil de 1986.
Olkiluoto es el tercer reactor EPR en el mundo, después de dos que ya operan en China.
Su construcción comenzó en 2005 pero el proyecto acumuló los contratiempos y las obras terminaron con un costo final mayor a lo anunciado inicialmente.
A pesar del fiasco de Olkiluoto, el apoyo a la energía nuclear civil ha crecido en Finlandia en los últimos años, impulsado por la preocupación por el clima y las tensiones energéticas mundiales.
Según una encuesta publicada en mayo, un 60% de los finlandeses la apoyan.
El reactor finlandés comenzó a operar apenas unas horas después de que Alemania cerrara sus últimos tres reactores nucleares, culminando así más de 20 años de eliminación gradual de la energía atómica en el país.
Las centrales de Isar 2 (sureste), Neckarwestheim (suroeste) y Emsland (noroeste) fueron desconectadas de la red eléctrica antes de la medianoche, como estaba previsto, y la compañía energética RWE calificó el cierre como "el fin de una era", según un comunicado.
Tras 18 años de obras, el reactor ubicado en la costa suroeste de Finlandia "comenzó a producir electricidad", dijo TVO, informó la agencia francesa AFP
Con 1600 megavatios, suministra alrededor del 14% de la producción de electricidad finlandesa y es el más potente de Europa.
Construido en conjunto por el grupo francés Areva y el alemán Siemens, emplea tecnología de agua presurizada EPR de última generación, que es la tecnología considerada más potente y segura, y que fue concebida para relanzar la energía nuclear en Europa tras la catástrofe nuclear de Chernobil de 1986.
Olkiluoto es el tercer reactor EPR en el mundo, después de dos que ya operan en China.
Su construcción comenzó en 2005 pero el proyecto acumuló los contratiempos y las obras terminaron con un costo final mayor a lo anunciado inicialmente.
A pesar del fiasco de Olkiluoto, el apoyo a la energía nuclear civil ha crecido en Finlandia en los últimos años, impulsado por la preocupación por el clima y las tensiones energéticas mundiales.
Según una encuesta publicada en mayo, un 60% de los finlandeses la apoyan.
El reactor finlandés comenzó a operar apenas unas horas después de que Alemania cerrara sus últimos tres reactores nucleares, culminando así más de 20 años de eliminación gradual de la energía atómica en el país.
Las centrales de Isar 2 (sureste), Neckarwestheim (suroeste) y Emsland (noroeste) fueron desconectadas de la red eléctrica antes de la medianoche, como estaba previsto, y la compañía energética RWE calificó el cierre como "el fin de una era", según un comunicado.