Desesperada búsqueda de una familia que perdió su perra luego de un accidente
El hecho ocurrió en la mañana de este lunes. A bordo iba una mujer con su mascota. El animal viajaba en la parte trasera, agarrado por un arnés al cinturón de seguridad. A causa del accidente, el sujetador se cortó y la perra salió corriendo, asustada, por el campo.
Sobre la mañana de este lunes, ocurrió un accidente en Ruta 3 a la altura del kilómetro 1.226, a unos 10 kilómetros al sur de la localidad de Sierra Grande. Allí, luego de pinchar una goma, la conductora perdió el control de su vehículo y terminó a la vera de la ruta.
A causa del hecho, la mujer bajó raudamente para verificar el estado de su perra que viajaba atrás, con un arnés agarrado al cinturón de seguridad del auto. Al momento de abrir la puerta, la mascota, asustada por el accidente, salió corriendo en dirección al campo, y no volvió más.
Según remarcó la mujer, la perra iba bien agarrada, pero, luego del brusco movimiento, se habría cortado uno de los sujetadores del arnés.
La pera responde al nombre de Kira, es cruza con raza Sharpei, y según los propios dueños: “No es agresiva, es un amor, tiene la oreja izquierda corta, la colita corta, la adoptamos hace un año en esas condiciones, tiene 5 añitos, según calcula su veterinaria”.
Sobre la mañana de este lunes, ocurrió un accidente en Ruta 3 a la altura del kilómetro 1.226, a unos 10 kilómetros al sur de la localidad de Sierra Grande. Allí, luego de pinchar una goma, la conductora perdió el control de su vehículo y terminó a la vera de la ruta.
A causa del hecho, la mujer bajó raudamente para verificar el estado de su perra que viajaba atrás, con un arnés agarrado al cinturón de seguridad del auto. Al momento de abrir la puerta, la mascota, asustada por el accidente, salió corriendo en dirección al campo, y no volvió más.
Según remarcó la mujer, la perra iba bien agarrada, pero, luego del brusco movimiento, se habría cortado uno de los sujetadores del arnés.
La pera responde al nombre de Kira, es cruza con raza Sharpei, y según los propios dueños: “No es agresiva, es un amor, tiene la oreja izquierda corta, la colita corta, la adoptamos hace un año en esas condiciones, tiene 5 añitos, según calcula su veterinaria”.