"Por supuesto, no descartamos (la cumbre). Si es necesario los presidentes de Rusia y de Estados Unidos pueden decidir en cualquier momento mantener contactos, ya sea por teléfono o físicamente. Será su decisión", señaló el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov.
Subrayó no obstante que, en estos momentos, no hay planes específicos para una posible cumbre, y, por tanto, es "prematuro" hablar de ello.
Lo que por ahora hay es "un claro entendimiento de la necesidad de continuar el diálogo al nivel ministerial", dijo Peskov.
La propuesta de la cumbre Putin-Biden se dio tras una maratónica gestión diplomática del mandatario francés, Emmanuel Macron, quien sostuvo ayer dos extensas conversaciones telefónicas con Putin, además de diálogos con Biden y el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski.
En la conversación con Macron, de una hora y 45 minutos, Putin responsabilizó a Ucrania de "provocaciones" por la escalada del combate a los separatistas del este de ese país, informó el Kremlin.
El mandatario ruso pidió que la OTAN y Estados Unidos "tomen en serio" las exigencias de seguridad de Moscú, tales como el retiro de la infraestructura militar de Europa del este y el veto al ingreso de Ucrania a la alianza atlántica.
El anuncio de la cumbre, anoche, por parte de Francia, se produjo en momentos que Rusia y Ucrania se acusan mutuamente de ser responsables de los nuevos combates en el este separatista ucraniano.
Poco después, los esfuerzos diplomáticos para solucionar la crisis sufrieron un duro revés cuando un obús disparado desde territorio ucraniano destruyó una estructura de un puesto fronterizo ruso sin dejar víctimas, según acusaron los servicios de seguridad rusos.
El hecho se enmarca en un contexto de combates entre fuerzas de Kiev y separatistas prorrusos en el este de la ex república soviética.
"El 21 de febrero a las 9.50 un obús de tipo no identificado disparado desde el territorio de Ucrania destruyó el puesto de servicio de los guardias fronterizos en la región de Rostov, a una distancia de unos 150 kilómetros de la frontera ruso-ucraniana", indicó el Servicio Federal de Seguridad de la Federación de Rusia (FSB), el principal servicio de seguridad nacional de Rusia, citado por las agencias de prensa rusas.
"No hubo víctimas. El personal especializado en desminado trabaja en el lugar", agregó el FSB, que también tiene a su cargo el servicio de guardias fronterizos en Rusia.
Un video atribuido al FSB y publicado por la agencia pública Ria Novosti muestra una pequeña estructura destruida en medio de la llanura arbolada y escombros desperdigados en el suelo.
De inmediato, el ejército ucraniano negó haber realizado los disparos renunciados por el Kremlin y acusó a Moscú de difundir "información falsa".
"No podemos impedirles que produzcan esta información falsa, pero siempre podemos enfatizar que no disparamos contra infraestructuras civiles o en algún territorio en la región de Rostov o lo que sea", indicó el vocero militar ucraniano Pavlo Kovalshuk a la prensa.
"No hubo disparos de artillería sobre las fuerzas de ocupación", agregó el portavoz.
Por la tensión reinante en la región, la aerolínea Air France anunció hoy la anulación de dos vuelos entre París y Kiev previstos el martes por la situación en Ucrania y "como medida de precaución", siguiendo así los pasos de su socio KLM, que suspendió a mediados de febrero los viajes entre Países Bajos y Ucrania "hasta nueva orden".
En tanto, los esfuerzos diplomáticos continúan y el canciller de Alemania, Olaf Scholz, mantendrá hoy una conversación telefónica con Putin, anunció el portavoz del Gobierno alemán, Steffen Hebestreit.
"El canciller federal sostendrá una conversación telefónica con el presidente ruso más tarde, después del mediodía", dijo Hebestreit en una rueda de prensa.
La conversación se centrará en "los esfuerzos diplomáticos para prevenir una catástrofe" en Ucrania, dijo.
"Por supuesto, no descartamos (la cumbre). Si es necesario los presidentes de Rusia y de Estados Unidos pueden decidir en cualquier momento mantener contactos, ya sea por teléfono o físicamente. Será su decisión", señaló el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov.
Subrayó no obstante que, en estos momentos, no hay planes específicos para una posible cumbre, y, por tanto, es "prematuro" hablar de ello.
Lo que por ahora hay es "un claro entendimiento de la necesidad de continuar el diálogo al nivel ministerial", dijo Peskov.
La propuesta de la cumbre Putin-Biden se dio tras una maratónica gestión diplomática del mandatario francés, Emmanuel Macron, quien sostuvo ayer dos extensas conversaciones telefónicas con Putin, además de diálogos con Biden y el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski.
En la conversación con Macron, de una hora y 45 minutos, Putin responsabilizó a Ucrania de "provocaciones" por la escalada del combate a los separatistas del este de ese país, informó el Kremlin.
El mandatario ruso pidió que la OTAN y Estados Unidos "tomen en serio" las exigencias de seguridad de Moscú, tales como el retiro de la infraestructura militar de Europa del este y el veto al ingreso de Ucrania a la alianza atlántica.
El anuncio de la cumbre, anoche, por parte de Francia, se produjo en momentos que Rusia y Ucrania se acusan mutuamente de ser responsables de los nuevos combates en el este separatista ucraniano.
Poco después, los esfuerzos diplomáticos para solucionar la crisis sufrieron un duro revés cuando un obús disparado desde territorio ucraniano destruyó una estructura de un puesto fronterizo ruso sin dejar víctimas, según acusaron los servicios de seguridad rusos.
El hecho se enmarca en un contexto de combates entre fuerzas de Kiev y separatistas prorrusos en el este de la ex república soviética.
"El 21 de febrero a las 9.50 un obús de tipo no identificado disparado desde el territorio de Ucrania destruyó el puesto de servicio de los guardias fronterizos en la región de Rostov, a una distancia de unos 150 kilómetros de la frontera ruso-ucraniana", indicó el Servicio Federal de Seguridad de la Federación de Rusia (FSB), el principal servicio de seguridad nacional de Rusia, citado por las agencias de prensa rusas.
"No hubo víctimas. El personal especializado en desminado trabaja en el lugar", agregó el FSB, que también tiene a su cargo el servicio de guardias fronterizos en Rusia.
Un video atribuido al FSB y publicado por la agencia pública Ria Novosti muestra una pequeña estructura destruida en medio de la llanura arbolada y escombros desperdigados en el suelo.
De inmediato, el ejército ucraniano negó haber realizado los disparos renunciados por el Kremlin y acusó a Moscú de difundir "información falsa".
"No podemos impedirles que produzcan esta información falsa, pero siempre podemos enfatizar que no disparamos contra infraestructuras civiles o en algún territorio en la región de Rostov o lo que sea", indicó el vocero militar ucraniano Pavlo Kovalshuk a la prensa.
"No hubo disparos de artillería sobre las fuerzas de ocupación", agregó el portavoz.
Por la tensión reinante en la región, la aerolínea Air France anunció hoy la anulación de dos vuelos entre París y Kiev previstos el martes por la situación en Ucrania y "como medida de precaución", siguiendo así los pasos de su socio KLM, que suspendió a mediados de febrero los viajes entre Países Bajos y Ucrania "hasta nueva orden".
En tanto, los esfuerzos diplomáticos continúan y el canciller de Alemania, Olaf Scholz, mantendrá hoy una conversación telefónica con Putin, anunció el portavoz del Gobierno alemán, Steffen Hebestreit.
"El canciller federal sostendrá una conversación telefónica con el presidente ruso más tarde, después del mediodía", dijo Hebestreit en una rueda de prensa.
La conversación se centrará en "los esfuerzos diplomáticos para prevenir una catástrofe" en Ucrania, dijo.