Murió uno de los impulsores del Ecocentro Puerto Madryn
José Manuel Eliçabe, quien durante años presidió la petrolera Isaura S.A., fue uno de los promotores del espacio científico-cultural que se inició en el año 2.000 en Puerto Madryn y cuyo auditorio lleva su nombre.
Murió el pasado lunes a los 92 años de edad uno de los impulsores del Ecocentro Puerto Madryn, José Manuel Eliçabe, quien fuera parte integrante de la Fundación que tuvo a su cargo la gestión y concreción del espacio cultural ubicado en proximidades del sitio histórico Punta Cuevas en la ciudad del golfo.
Integrante de una familia oriunda de Bahía Blanca, vinculada al mundo empresarial y de los negocios petroquímicos, la noticia pasó casi desapercibida en nuestra zona, aún cuando el auditorio principal del Ecocentro lleva su nombre y la concreción de ese proyecto tuvo un aporte significativo de su persona hace ya más de veinte años.
Eliçabe dirigió por décadas la empresa familiar Isaura S.A. – refinadora y productora de combustibles y lubricantes – que había fundado su padre, hasta que a mediados de la década de 1990 decidieron conformar un joint-venture con otras dos compañías, Puma y Astra, para conformar la marca EG3.
Poco tiempo después la empresa española Repsol se hizo con el control de la alianza al adquirir el paquete accionario de Astra y desplazó del control al resto de los socios. Cuando la compañía ibérica adquirió la estatal YPF, EG3 pasó a manos de la brasileña Petrobras, quien finalmente disolvió la marca.
En los últimos años de esa década, José Manuel Eliçabe decidió acompañar un proyecto vinculado a la difusión de la cultura y la ciencia, impulsado por el biólogo Alfredo Lichter, quien a la postre presidiría la Fundación Ecocentro. Según un artículo publicado en el diario La Nación, en oportunidad de inaugurarse el Ecocentro -en el año 2000-, la iniciativa “es un esfuerzo absolutamente privado, fruto de un gesto de filantropía de los exdueños de la empresa petrolera Isaura.
Cuando esta compañía de origen familiar, nacida en Bahía Blanca en 1925, tuvo que adecuarse a las nuevas condiciones del mercado mundial y vender su parte en EG3 al grupo Repsol-YPF, Eliçabe decidió dejar un tributo personal a la Patagonia, de la cual se extraen tantas riquezas naturales.
Según la misma publicación, aquel proyecto demandó en esa época “una inversión de 3,5 millones de pesos. El Ecocentro se levantó al borde mismo del mar, al sur de la ciudad de Puerto Madryn, en un terreno cedido por 30 años por la Municipalidad” de Puerto Madryn mediante un acuerdo suscripto tres años antes (1997). El comodato fue renovándose a lo largo de los años y debía vencer el año pasado, pero tras la pandemia mundial por el virus COVID, la Fundación Ecocentro no pudo sostener el proyecto y fue así que se acordó que la totalidad del centro pase a manos del Municipio de Puerto Madryn para garantizar su funcionamiento. El convenio tuvo tratamiento legislativo en 2021, y consistía en la entrega del terreno, las instalaciones erigidas sobre el mismo, con el salón de exposiciones y la muestra que en ese momento tenía el lugar.
Según se publicó en aquel momento, uno de los requisitos de la fundación era que se mantuviera el nombre de José Manuel Eliçabe al auditorio.
“Biela Corta”
La muerte de “Don Pepe” Eliçabe, como se lo conocía en los círculos empresariales y sociales, tuvo alto impacto en el mundo del automovilismo deportivo argentino, donde él, su familia y sus empresas tuvieron una importante presencia a lo largo de distintas décadas.
Isaura fue un sponsor permanente de pilotos y equipos, especialmente en el mundo del Turismo Carretera. Desde Rubén Luis Di Palma hasta Guillermo “Yoyo” Maldonado, pasando por Oscar Cabalén, Juan Manuel “Maneco” Bordeu, Carlos Alberto Pairetti, Oscar Castellano, Emilio Satriano o Fabián Acuña, sólo por citar los más conocidos, además del acompañamiento en campañas internacionales como la de Juan Manuel Fangio II -sobrino del quíntuple campeón mundial – en la Indy Lights o la Misión Argentina a las 24 horas de Daytona en 1992 con una delegación de pilotos del TC, además de equipos de competición en el TC 2000.
En la faz personal, más allá de los negocios relacionados con los combustibles primero y con la petroquímica y el agro después, Eliçabe supo ser un activo participante en competencias de regularidad con vehículos históricos, donde se inscribía bajo el seudónimo "Biela Corta" y en binomio con su hijo Manuel. Fue uno de los principales impulsores del Club de Automóviles Sport.
Murió el pasado lunes a los 92 años de edad uno de los impulsores del Ecocentro Puerto Madryn, José Manuel Eliçabe, quien fuera parte integrante de la Fundación que tuvo a su cargo la gestión y concreción del espacio cultural ubicado en proximidades del sitio histórico Punta Cuevas en la ciudad del golfo.
Integrante de una familia oriunda de Bahía Blanca, vinculada al mundo empresarial y de los negocios petroquímicos, la noticia pasó casi desapercibida en nuestra zona, aún cuando el auditorio principal del Ecocentro lleva su nombre y la concreción de ese proyecto tuvo un aporte significativo de su persona hace ya más de veinte años.
Eliçabe dirigió por décadas la empresa familiar Isaura S.A. – refinadora y productora de combustibles y lubricantes – que había fundado su padre, hasta que a mediados de la década de 1990 decidieron conformar un joint-venture con otras dos compañías, Puma y Astra, para conformar la marca EG3.
Poco tiempo después la empresa española Repsol se hizo con el control de la alianza al adquirir el paquete accionario de Astra y desplazó del control al resto de los socios. Cuando la compañía ibérica adquirió la estatal YPF, EG3 pasó a manos de la brasileña Petrobras, quien finalmente disolvió la marca.
En los últimos años de esa década, José Manuel Eliçabe decidió acompañar un proyecto vinculado a la difusión de la cultura y la ciencia, impulsado por el biólogo Alfredo Lichter, quien a la postre presidiría la Fundación Ecocentro. Según un artículo publicado en el diario La Nación, en oportunidad de inaugurarse el Ecocentro -en el año 2000-, la iniciativa “es un esfuerzo absolutamente privado, fruto de un gesto de filantropía de los exdueños de la empresa petrolera Isaura.
Cuando esta compañía de origen familiar, nacida en Bahía Blanca en 1925, tuvo que adecuarse a las nuevas condiciones del mercado mundial y vender su parte en EG3 al grupo Repsol-YPF, Eliçabe decidió dejar un tributo personal a la Patagonia, de la cual se extraen tantas riquezas naturales.
Según la misma publicación, aquel proyecto demandó en esa época “una inversión de 3,5 millones de pesos. El Ecocentro se levantó al borde mismo del mar, al sur de la ciudad de Puerto Madryn, en un terreno cedido por 30 años por la Municipalidad” de Puerto Madryn mediante un acuerdo suscripto tres años antes (1997). El comodato fue renovándose a lo largo de los años y debía vencer el año pasado, pero tras la pandemia mundial por el virus COVID, la Fundación Ecocentro no pudo sostener el proyecto y fue así que se acordó que la totalidad del centro pase a manos del Municipio de Puerto Madryn para garantizar su funcionamiento. El convenio tuvo tratamiento legislativo en 2021, y consistía en la entrega del terreno, las instalaciones erigidas sobre el mismo, con el salón de exposiciones y la muestra que en ese momento tenía el lugar.
Según se publicó en aquel momento, uno de los requisitos de la fundación era que se mantuviera el nombre de José Manuel Eliçabe al auditorio.
“Biela Corta”
La muerte de “Don Pepe” Eliçabe, como se lo conocía en los círculos empresariales y sociales, tuvo alto impacto en el mundo del automovilismo deportivo argentino, donde él, su familia y sus empresas tuvieron una importante presencia a lo largo de distintas décadas.
Isaura fue un sponsor permanente de pilotos y equipos, especialmente en el mundo del Turismo Carretera. Desde Rubén Luis Di Palma hasta Guillermo “Yoyo” Maldonado, pasando por Oscar Cabalén, Juan Manuel “Maneco” Bordeu, Carlos Alberto Pairetti, Oscar Castellano, Emilio Satriano o Fabián Acuña, sólo por citar los más conocidos, además del acompañamiento en campañas internacionales como la de Juan Manuel Fangio II -sobrino del quíntuple campeón mundial – en la Indy Lights o la Misión Argentina a las 24 horas de Daytona en 1992 con una delegación de pilotos del TC, además de equipos de competición en el TC 2000.
En la faz personal, más allá de los negocios relacionados con los combustibles primero y con la petroquímica y el agro después, Eliçabe supo ser un activo participante en competencias de regularidad con vehículos históricos, donde se inscribía bajo el seudónimo "Biela Corta" y en binomio con su hijo Manuel. Fue uno de los principales impulsores del Club de Automóviles Sport.