Llegan fondos frescos para hacer obras en un momento político y social muy delicado

Leé La Columna del Domingo, la tradicional editorial de la edición dominical de Jornada, con la mejor información política de Chubut.

12 OCT 2013 - 22:39 | Actualizado

Fue la mejor emisión provincial del año”, le dijo un hombre cercano al lanzamiento del bono con el que Chubut salió al mercado de capitales a captar fondos para financiar obras de infraestructura.

Se refería a la colocación del primer tramo de los Bonos para el Desarrollo e Infraestructura del Chubut, conocidos técnicamente como Bodic 1.

El Gobierno provincial salió al mercado en un momento clave, no tanto de la economía argentina, sino de la propia. No era sencillo salir a buscar dinero a dos semanas de unas elecciones legislativas que significará una casi segura derrota para el oficialismo, con durísimas críticas de sectores de la oposición chubutense que vaticinaron un fracaso o, al menos, una captación de dinero fresco a muy alta tasa.

No ocurrió ni una cosa ni la otra.

El Bodic arrancó con una oferta de 320 millones de dólares, seis veces más de lo que los más optimistas asesores económicos del Gobierno estimaban captar.

“Bajamos tasa a 4,20 por ciento y entraron 280 millones. Seguimos bajando a 4 por ciento y entraron 275 millones. Así que cerramos ahí la tasa y prorrateemos para tomar sólo 220 millones”, relató la misma fuente a esta Columna.

La idea de lanzar el bono ahora tiene muchas explicaciones, pero una saliente: el Gobierno provincial quería asegurarse la disponibilidad de fondos para construir los diez Centro de Encuentro alrededor de toda la provincia, con los que se espera una respuesta a los sectores sociales más postergados.

“Tenemos que salir a hacer militancia para que se comprenda el sentido social de estas estructuras enormes”, dijo el gobernador Martín Buzzi esta semana en Esquel, en donde lanzó el primero de estos centros.

El otro objetivo es financiar la construcción de los hospitales de Comodoro Rivadavia y Trelew, los dos lugares en donde las demandas sanitarias de la gente y de los trabajadores de la Salud crecen a ritmo arrollador, que además dinamizarán la captación de mano de obra en un sector sensible como el de la construcción.

Segundo tramo

La satisfacción oficial por los primeros 220 millones dólares dejó abierta la expectativa para un segundo tramo del Bodic: quedan unos 140 millones de dólares del programa aprobado sin colocar, que se podrían emitir en los próximos meses.

“La sólida e innovadora estructura de garantías ideada para esta transacción, las ordenadas cuentas fiscales de la Provincia, y su exitosa presencia en el mercado de letras, le permitió a Chubut concretar su primera emisión en el mercado nacional de bonos con una calificación de “A2” (equivalente a “A”) de Moody’s, alcanzando el mayor plazo en esta clase de instrumentos garantizados (6 años) y un volumen de ofertas recibidas que superó ampliamente las expectativas”, dice el “press release” que los colocadores del bono de Chubut enviaron a los principales medios de economía y finanzas de la Argentina y el mundo. Optimismo puro.

Tienen de dónde tomarse para expresarse en esos términos: la colocación final quintuplicó los 50 millones de dólares que se pensaban captar antes del lanzamiento, y finalmente se dio en mejores condiciones que otras provincias este mismo año

“Nuestro bono es a seis años, que es un período considerable, con un período de dos años de gracia, mientras que otros distritos empiezan a pagar capital desde el primer momento”, evaluó el subsecretario de Coordinación Financiera, Oscar Antonena.

El segundo el Ministerio de Economía dijo que la Provincia de Buenos Aires colocó títulos a 4 años con el 3,98 por ciento de interés; Neuquén a 5 años con el 3,90; y Córdoba a 3 años con el 4,98. “Todos estos bonos se tienen que pagar en menos tiempo y sin período de gracia, por lo que significan un esfuerzo mayor para los emisores”, comparó Antonena.

Y no ahorró comparaciones con el fideicomiso de 2010: “En aquel momento se consiguió una tasa un poco por encima del 7 por ciento, pero al ser un bono emitido bajo par terminó siendo una tasa real del 10 por ciento, que se tiene que pagar en dólares billete”, aseguró.

“Emirato”

En abril de 2006, el diario Clarín publicó una amplia y elogiosa nota sobre el mayor yacimiento petrolero de la Argentina: Cerro Dragón, a pocos kilómetros de Comodoro.

La respetada periodista Silvia Naishtat hizo un pormenorizado informe sobre las bondades del yacimiento operado por Pan American Energy e incluyó un recuadro con un título que pintaba de cuerpo entero la situación de bonanza de la industria petrolera en Chubut: “Un emirato llamado Comodoro”.

Aunque el título de Clarín fue un poco ostentoso, lo que la periodista describió en aquella nota no era más que la visión de alguien que se sorprendía al ver la prosperidad de la mayor ciudad industrial de la Patagonia: “Con 180.00 habitantes y 90.000 autos flamantes, recorrer Comodoro Rivadavia a cualquier hora es como circular por la avenida Córdoba a las 6 de la tarde”, arrancaba la nota de Naishtat.

“Con la pujanza del petróleo, la ciudad parece un emirato. Hay varios hoteles cinco estrellas como el Lucania, que es similar en estilo a los que se multiplican en otras capitales petroleras”, agregaba la nota.

Y redondeaba con un dato poco acostumbrado a escucharse en estas tierras: “Uno de los lugares que más progresó en la ciudad es Rada Tilly, una villa a 11 kilómetros al sur con chalés que miran al Atlántico Sur: el metro cuadrado vale más que en Puerto Madero, unos 3.000 dólares.”

Qué quedó de aquel “emirato”, es una pregunta que pocos se animan a responder. No porque no haya explicaciones, sino porque las respuestas tienen multiplicidad de argumentos, todos razonables.

Agua o nafta

La situación de crisis terminal que está atravesando Comodoro encierra mucho más que causales económicas y sociales. Es el fracaso de una sociedad en su conjunto. Y no de la comodorense sino la de todo Chubut. Comodoro está como está por la incapacidad de la clase dirigente y por la desidia de quienes miran desde lejos cómo se funde el motor económico de la provincia.

La gente que construyó el “Comodorazo” del viernes (hay que decirlo, menos numeroso de los que se estimaba en la previa) no salió a la calle para apoyar solamente a los docentes que reclaman un aumento salarial que aunque justo, es difícil de atender en términos reales.

La gente salió para expresar su hartazgo por la mediocridad de la mayoría de los dirigentes que los gobiernan, desde el Poder Ejecutivo o desde el anodino Concejo Deliberante; de los jueces que los juzgan; de los fiscales que deberían ayudarlos a combatir la delincuencia; de los policías corruptos; y de los comerciantes y empresarios que los saquean con el precio de lo que alimentos que consumen, entre otros tantos reclamos.

El Gobierno provincial debe entender de una vez que atender y comenzar a solucionar las demandas urgentes de Comodoro está por encima de cualquier otra cosa, inclusive de algunos dirigentes gremiales que piensan más en sus futuros políticos personales que los intereses comunes.

Las llamas se apagan codo a codo, sin egoísmos y agua. No con individualismos, viento y nafta.

Poca expectativa

La sensación de que gran parte de la suerte de las elecciones legislativas del próximo domingo 27 de octubre está echada, es más que obvia.

Sólo se discute si Mario Das Neves conseguirá arrastrar hasta la Cámara de Diputados a Nelly Lagoria, o si Norberto Yauhar conseguirá retener una banca para el Frente para la Victoria.

Las encuestas confirman la percepción general. Una de ellas, elaborada por el encuestador Federico Aurelio (Aresco), conocida esta semana, detalla que Das Neves creció cinco puntos desde el 11 de agosto y podría superar el 52 por ciento de los votos.

Yauhar, en cambio, llega al 25 por ciento y necesita como el agua sumar algunos puntos para garantizar la banca.

El tercer punto es que el radicalismo pierde terreno con respecto a las PASO y cae hasta el 10 por ciento, según Aurelio. El dato cayó como una bomba en el entusiasmo del radical Eduardo Conde, que hace pocas semanas había hecho trascender que estaba “empatado” con el Frente para la Victoria.

Se sabe que la sensación de “partido liquidado” es el peor estado de confianza. Das Neves lo entiende mejor que nadie, inclusive que sus propios seguidores, por lo que ha intensificado su campaña puerta a puerta, pueblo por pueblo, ciudad por ciudad. Ya no pensando tanto en el 27 sino en el 28 de octubre.

Ese día empiezan a definirse cosas importantes y hay que estar a la altura de las circunstancias.

Enterate de las noticias de POLITICA a través de nuestro newsletter

Anotate para recibir las noticias más importantes de esta sección.

Te podés dar de baja en cualquier momento con un solo clic.
12 OCT 2013 - 22:39

Fue la mejor emisión provincial del año”, le dijo un hombre cercano al lanzamiento del bono con el que Chubut salió al mercado de capitales a captar fondos para financiar obras de infraestructura.

Se refería a la colocación del primer tramo de los Bonos para el Desarrollo e Infraestructura del Chubut, conocidos técnicamente como Bodic 1.

El Gobierno provincial salió al mercado en un momento clave, no tanto de la economía argentina, sino de la propia. No era sencillo salir a buscar dinero a dos semanas de unas elecciones legislativas que significará una casi segura derrota para el oficialismo, con durísimas críticas de sectores de la oposición chubutense que vaticinaron un fracaso o, al menos, una captación de dinero fresco a muy alta tasa.

No ocurrió ni una cosa ni la otra.

El Bodic arrancó con una oferta de 320 millones de dólares, seis veces más de lo que los más optimistas asesores económicos del Gobierno estimaban captar.

“Bajamos tasa a 4,20 por ciento y entraron 280 millones. Seguimos bajando a 4 por ciento y entraron 275 millones. Así que cerramos ahí la tasa y prorrateemos para tomar sólo 220 millones”, relató la misma fuente a esta Columna.

La idea de lanzar el bono ahora tiene muchas explicaciones, pero una saliente: el Gobierno provincial quería asegurarse la disponibilidad de fondos para construir los diez Centro de Encuentro alrededor de toda la provincia, con los que se espera una respuesta a los sectores sociales más postergados.

“Tenemos que salir a hacer militancia para que se comprenda el sentido social de estas estructuras enormes”, dijo el gobernador Martín Buzzi esta semana en Esquel, en donde lanzó el primero de estos centros.

El otro objetivo es financiar la construcción de los hospitales de Comodoro Rivadavia y Trelew, los dos lugares en donde las demandas sanitarias de la gente y de los trabajadores de la Salud crecen a ritmo arrollador, que además dinamizarán la captación de mano de obra en un sector sensible como el de la construcción.

Segundo tramo

La satisfacción oficial por los primeros 220 millones dólares dejó abierta la expectativa para un segundo tramo del Bodic: quedan unos 140 millones de dólares del programa aprobado sin colocar, que se podrían emitir en los próximos meses.

“La sólida e innovadora estructura de garantías ideada para esta transacción, las ordenadas cuentas fiscales de la Provincia, y su exitosa presencia en el mercado de letras, le permitió a Chubut concretar su primera emisión en el mercado nacional de bonos con una calificación de “A2” (equivalente a “A”) de Moody’s, alcanzando el mayor plazo en esta clase de instrumentos garantizados (6 años) y un volumen de ofertas recibidas que superó ampliamente las expectativas”, dice el “press release” que los colocadores del bono de Chubut enviaron a los principales medios de economía y finanzas de la Argentina y el mundo. Optimismo puro.

Tienen de dónde tomarse para expresarse en esos términos: la colocación final quintuplicó los 50 millones de dólares que se pensaban captar antes del lanzamiento, y finalmente se dio en mejores condiciones que otras provincias este mismo año

“Nuestro bono es a seis años, que es un período considerable, con un período de dos años de gracia, mientras que otros distritos empiezan a pagar capital desde el primer momento”, evaluó el subsecretario de Coordinación Financiera, Oscar Antonena.

El segundo el Ministerio de Economía dijo que la Provincia de Buenos Aires colocó títulos a 4 años con el 3,98 por ciento de interés; Neuquén a 5 años con el 3,90; y Córdoba a 3 años con el 4,98. “Todos estos bonos se tienen que pagar en menos tiempo y sin período de gracia, por lo que significan un esfuerzo mayor para los emisores”, comparó Antonena.

Y no ahorró comparaciones con el fideicomiso de 2010: “En aquel momento se consiguió una tasa un poco por encima del 7 por ciento, pero al ser un bono emitido bajo par terminó siendo una tasa real del 10 por ciento, que se tiene que pagar en dólares billete”, aseguró.

“Emirato”

En abril de 2006, el diario Clarín publicó una amplia y elogiosa nota sobre el mayor yacimiento petrolero de la Argentina: Cerro Dragón, a pocos kilómetros de Comodoro.

La respetada periodista Silvia Naishtat hizo un pormenorizado informe sobre las bondades del yacimiento operado por Pan American Energy e incluyó un recuadro con un título que pintaba de cuerpo entero la situación de bonanza de la industria petrolera en Chubut: “Un emirato llamado Comodoro”.

Aunque el título de Clarín fue un poco ostentoso, lo que la periodista describió en aquella nota no era más que la visión de alguien que se sorprendía al ver la prosperidad de la mayor ciudad industrial de la Patagonia: “Con 180.00 habitantes y 90.000 autos flamantes, recorrer Comodoro Rivadavia a cualquier hora es como circular por la avenida Córdoba a las 6 de la tarde”, arrancaba la nota de Naishtat.

“Con la pujanza del petróleo, la ciudad parece un emirato. Hay varios hoteles cinco estrellas como el Lucania, que es similar en estilo a los que se multiplican en otras capitales petroleras”, agregaba la nota.

Y redondeaba con un dato poco acostumbrado a escucharse en estas tierras: “Uno de los lugares que más progresó en la ciudad es Rada Tilly, una villa a 11 kilómetros al sur con chalés que miran al Atlántico Sur: el metro cuadrado vale más que en Puerto Madero, unos 3.000 dólares.”

Qué quedó de aquel “emirato”, es una pregunta que pocos se animan a responder. No porque no haya explicaciones, sino porque las respuestas tienen multiplicidad de argumentos, todos razonables.

Agua o nafta

La situación de crisis terminal que está atravesando Comodoro encierra mucho más que causales económicas y sociales. Es el fracaso de una sociedad en su conjunto. Y no de la comodorense sino la de todo Chubut. Comodoro está como está por la incapacidad de la clase dirigente y por la desidia de quienes miran desde lejos cómo se funde el motor económico de la provincia.

La gente que construyó el “Comodorazo” del viernes (hay que decirlo, menos numeroso de los que se estimaba en la previa) no salió a la calle para apoyar solamente a los docentes que reclaman un aumento salarial que aunque justo, es difícil de atender en términos reales.

La gente salió para expresar su hartazgo por la mediocridad de la mayoría de los dirigentes que los gobiernan, desde el Poder Ejecutivo o desde el anodino Concejo Deliberante; de los jueces que los juzgan; de los fiscales que deberían ayudarlos a combatir la delincuencia; de los policías corruptos; y de los comerciantes y empresarios que los saquean con el precio de lo que alimentos que consumen, entre otros tantos reclamos.

El Gobierno provincial debe entender de una vez que atender y comenzar a solucionar las demandas urgentes de Comodoro está por encima de cualquier otra cosa, inclusive de algunos dirigentes gremiales que piensan más en sus futuros políticos personales que los intereses comunes.

Las llamas se apagan codo a codo, sin egoísmos y agua. No con individualismos, viento y nafta.

Poca expectativa

La sensación de que gran parte de la suerte de las elecciones legislativas del próximo domingo 27 de octubre está echada, es más que obvia.

Sólo se discute si Mario Das Neves conseguirá arrastrar hasta la Cámara de Diputados a Nelly Lagoria, o si Norberto Yauhar conseguirá retener una banca para el Frente para la Victoria.

Las encuestas confirman la percepción general. Una de ellas, elaborada por el encuestador Federico Aurelio (Aresco), conocida esta semana, detalla que Das Neves creció cinco puntos desde el 11 de agosto y podría superar el 52 por ciento de los votos.

Yauhar, en cambio, llega al 25 por ciento y necesita como el agua sumar algunos puntos para garantizar la banca.

El tercer punto es que el radicalismo pierde terreno con respecto a las PASO y cae hasta el 10 por ciento, según Aurelio. El dato cayó como una bomba en el entusiasmo del radical Eduardo Conde, que hace pocas semanas había hecho trascender que estaba “empatado” con el Frente para la Victoria.

Se sabe que la sensación de “partido liquidado” es el peor estado de confianza. Das Neves lo entiende mejor que nadie, inclusive que sus propios seguidores, por lo que ha intensificado su campaña puerta a puerta, pueblo por pueblo, ciudad por ciudad. Ya no pensando tanto en el 27 sino en el 28 de octubre.

Ese día empiezan a definirse cosas importantes y hay que estar a la altura de las circunstancias.


NOTICIAS RELACIONADAS