Piden 45 años de prisión para el acusado de violar a su hija
Lo solicitó una fiscal de Morón, en coincidencia con el abogado de las víctimas. El hombre está acusado de haber violado a su hija de 11 años -a causa de lo cual la niña quedó embarazada y dio a luz una beba- y a otras dos jóvenes en el partido bonaerense de Merlo
La pena solicitada por la fiscal Paula Salevsky, en su alegato ante el Tribunal Oral Criminal 4 de Morón, coincidió con la requerida por el abogado de las víctimas, Rolando Landolfi.El acusado, de 45 años, que admitió su responsabilidad y pidió perdón a las víctimas, llegó a juicio imputado por "abuso sexual con acceso carnal agravado por el vínculo de parentesco" en el caso de su hija, y "abuso sexual con acceso carnal" contra una estudiante de periodismo y otra joven cuando regresaba de su trabajo.
Además, se lo imputa por el robo agravado por uso de arma cometido contra las victimas.
Por su parte, el defensor del acusado, Pablo Carpanetto, pidió la pena mínima por esos delitos, pues consideró que el tribunal debe tener en cuenta "el arrepentimiento" de su cliente durante el debate.
El acusado estuvo presente en la sala de audiencias y escuchó cabizbajo los alegatos de las partes, según contó a Télam la titular de la organización de Madres y Familiares de Víctimas (MA.FA.VI), Alicia Angiono.
"Estamos muy tranquilos desde MA.FA.VI y los familiares de las víctimas porque el pedido de la fiscal Salevsky es justo por la gravedad de los hechos", agregó Angiono.
Del mismo modo se expresó la madre de una de las jóvenes abusadas, quien agregó que espera que "los jueces sientan cada minuto de las audiencias para tomar la decisión de dejar de por vida al acusado preso, porque no merece estar libre entre la gente".
"Mi hija todavía tiene pesadillas y está en estos día reviviendo lo sucedido ese día. Pero MA.FA.VI y la prensa siempre me ayudaron. Pido a Dios justicia", sostuvo la mujer.
El abogado de las tres víctimas, Rolando Landolfi, contó a Télam que la acusación fue "bien clara" y que ahora esperan la decisión del tribunal, que se dará a conocer el 30 de este mes.
"Sobre el arrepentimiento del acusado, no creemos que eso sea un atenuante para que la defensa logre la pena mínima porque hay muchas pruebas en su contra", sostuvo el letrado.
El 21 de este mes, cuando comenzó el juicio, el violador pidió perdón a las víctimas ante los jueces: "Pido perdón a las víctimas, a mi hija y a mi mujer. Yo me hago cargo de todo los hechos de los que me acusan", expresó.
El debate oral, a cargo de los jueces Carlos Torti, Rodolfo Castañares y Pedro Rodríguez, se reiniciará el miércoles próximo a las 11:00, cuando se dará a conocer la sentencia.
Los ataques que se le atribuyen al acusado fueron cometidos entre agosto y diciembre de 2012.
Una de sus víctimas, de 18 años, denunció que el 26 de agosto de 2012 regresaba a su casa desde su trabajo y fue sorprendida por un hombre que la amenazó de muerte y la violó en un descampado de la localidad de Mariano Acosta.
El otro ataque lo produjo contra una estudiante de periodismo, de 19 años, de la que abusó el 30 de diciembre de 2012 cuando volvía a la casa de su novio tras ir a un recital con algunas amigas.
El acusado fue apresado el 6 de marzo de 2013, cuando la última de las chicas abusadas lo encontró casualmente en un colectivo y alertó a la policía.
El violador fue detenido poco después en el barrio Agustín Ferrari, también de Merlo, e imputado en la causa.
Tras ello, la esposa del detenido lo acusó ante la Justicia de violar a la hija de ambos, de 11 años, y reveló su temor de que una beba que la pequeña diera a luz fuera de él, lo que finalmente se comprobó.
La pena solicitada por la fiscal Paula Salevsky, en su alegato ante el Tribunal Oral Criminal 4 de Morón, coincidió con la requerida por el abogado de las víctimas, Rolando Landolfi.El acusado, de 45 años, que admitió su responsabilidad y pidió perdón a las víctimas, llegó a juicio imputado por "abuso sexual con acceso carnal agravado por el vínculo de parentesco" en el caso de su hija, y "abuso sexual con acceso carnal" contra una estudiante de periodismo y otra joven cuando regresaba de su trabajo.
Además, se lo imputa por el robo agravado por uso de arma cometido contra las victimas.
Por su parte, el defensor del acusado, Pablo Carpanetto, pidió la pena mínima por esos delitos, pues consideró que el tribunal debe tener en cuenta "el arrepentimiento" de su cliente durante el debate.
El acusado estuvo presente en la sala de audiencias y escuchó cabizbajo los alegatos de las partes, según contó a Télam la titular de la organización de Madres y Familiares de Víctimas (MA.FA.VI), Alicia Angiono.
"Estamos muy tranquilos desde MA.FA.VI y los familiares de las víctimas porque el pedido de la fiscal Salevsky es justo por la gravedad de los hechos", agregó Angiono.
Del mismo modo se expresó la madre de una de las jóvenes abusadas, quien agregó que espera que "los jueces sientan cada minuto de las audiencias para tomar la decisión de dejar de por vida al acusado preso, porque no merece estar libre entre la gente".
"Mi hija todavía tiene pesadillas y está en estos día reviviendo lo sucedido ese día. Pero MA.FA.VI y la prensa siempre me ayudaron. Pido a Dios justicia", sostuvo la mujer.
El abogado de las tres víctimas, Rolando Landolfi, contó a Télam que la acusación fue "bien clara" y que ahora esperan la decisión del tribunal, que se dará a conocer el 30 de este mes.
"Sobre el arrepentimiento del acusado, no creemos que eso sea un atenuante para que la defensa logre la pena mínima porque hay muchas pruebas en su contra", sostuvo el letrado.
El 21 de este mes, cuando comenzó el juicio, el violador pidió perdón a las víctimas ante los jueces: "Pido perdón a las víctimas, a mi hija y a mi mujer. Yo me hago cargo de todo los hechos de los que me acusan", expresó.
El debate oral, a cargo de los jueces Carlos Torti, Rodolfo Castañares y Pedro Rodríguez, se reiniciará el miércoles próximo a las 11:00, cuando se dará a conocer la sentencia.
Los ataques que se le atribuyen al acusado fueron cometidos entre agosto y diciembre de 2012.
Una de sus víctimas, de 18 años, denunció que el 26 de agosto de 2012 regresaba a su casa desde su trabajo y fue sorprendida por un hombre que la amenazó de muerte y la violó en un descampado de la localidad de Mariano Acosta.
El otro ataque lo produjo contra una estudiante de periodismo, de 19 años, de la que abusó el 30 de diciembre de 2012 cuando volvía a la casa de su novio tras ir a un recital con algunas amigas.
El acusado fue apresado el 6 de marzo de 2013, cuando la última de las chicas abusadas lo encontró casualmente en un colectivo y alertó a la policía.
El violador fue detenido poco después en el barrio Agustín Ferrari, también de Merlo, e imputado en la causa.
Tras ello, la esposa del detenido lo acusó ante la Justicia de violar a la hija de ambos, de 11 años, y reveló su temor de que una beba que la pequeña diera a luz fuera de él, lo que finalmente se comprobó.