Guatemala pide protección a los EE.UU.
El Congreso de Guatemala pidió al presidente de Estados Unidos, Barack Obama, que otorgue un estatus de Protección Temporal a los guatemaltecos indocumentados que viven en ese país para facilitar su trabajo y ayudar a sus familias afectadas por el sismo del 7 de noviembre.
En su declaración, citada por la agencia de noticias DPA, el Parlamento pidió al jefe de la Casa Blanca tener en cuenta que aproximadamente 1,5 millones de guatemaltecos viven en Estados Unidos sin regularizar su situación migratoria y que el TPS (siglas en inglés de Estatus de Protección Temporal) les permitiría trabajar con más tranquilidad para poder ayudar a sus familias.
El presidente guatemalteco, Otto Pérez, por su parte, informó ayer que ya envió una carta en similares términos a su par estadounidense.
Pérez había anunciado la semana pasada que haría esta solicitud a Obama y que confiaba en que esta vez la gestión, planteada reiteradamente durante los últimos 12 años, pudiera ser atendida.
A causa del terremoto de la semana pasada, 44 personas murieron en la zona occidental del país, 1,2 millones resultaron afectadas y más de 9.000 viviendas quedaron dañadas, cerca de una tercera parte inhabitables, por lo que fueron demolidas.
En su declaración, citada por la agencia de noticias DPA, el Parlamento pidió al jefe de la Casa Blanca tener en cuenta que aproximadamente 1,5 millones de guatemaltecos viven en Estados Unidos sin regularizar su situación migratoria y que el TPS (siglas en inglés de Estatus de Protección Temporal) les permitiría trabajar con más tranquilidad para poder ayudar a sus familias.
El presidente guatemalteco, Otto Pérez, por su parte, informó ayer que ya envió una carta en similares términos a su par estadounidense.
Pérez había anunciado la semana pasada que haría esta solicitud a Obama y que confiaba en que esta vez la gestión, planteada reiteradamente durante los últimos 12 años, pudiera ser atendida.
A causa del terremoto de la semana pasada, 44 personas murieron en la zona occidental del país, 1,2 millones resultaron afectadas y más de 9.000 viviendas quedaron dañadas, cerca de una tercera parte inhabitables, por lo que fueron demolidas.