Por Dario Roberts / @darioroberts
Tras varias semanas de juicio, el próximo miércoles 18 de octubre, el Tribunal Oral Federal 1 de La Plata dictará veredicto en el proceso a Nora Manacorda, una exmédica de la Policía bonaerense acusada de haber falsificado una partida de nacimiento para que un militar registrara como propia a la hija de Olga Noemí Casado, quien dio a luz en un centro clandestino de detención y luego fue asesinada.
Casado fue secuestrada durante la última dictadura militar al igual que su pareja, el chubutense Juan Cugura, y ambos fueron desaparecidos en primera instancia, y luego asesinados y sepultados como NN en un cementerio de esa ciudad bonaerense.
Manacorda ya fue condenada por un delito similar en perjuicio de otro niño apropiado y ya restituido, Sebastián Casado Tasca, y actualmente está con arresto domiciliario debido a que padece problemas de salud.
La mujer, quien en la actualidad tiene 67 años, está ahora imputada por confeccionar un acta de nacimiento falsa para ocultar la identidad de la hija de Olga Noemí Casado y Juan Oscar Cugura, ambos asesinados durante la última dictadura militar.
A Nora Raquel Manacorda se la acusa de haber facilitado la apropiación de Silvia Cugura Casado, hija de una pareja secuestrada y asesinada durante la última dictadura, quien recuperó su identidad recién en agosto de 2008, tras varios años de vivir junto a sus apropiadores en Santiago del Estero.
Pedidos de condena
Los fiscales Hernán Schapiro y Juan Martín Nogueira pidieron al Tribunal Oral Federal 1 de La Plata que se condene a Manacorda a la pena de 14 años de prisión tras considerarla responsable de la falsedad ideológica que permitió en 1978 la apropiación de la hija nacida en cautiverio de Olga Noemí Casado y Juan Oscar Cugura, militantes políticos secuestrados y asesinados durante la última dictadura.
Por su parte, el abogado Emanuel Lovelli, en representación de la querella de Abuelas de Plaza de Mayo, pidió la condena de la imputada a una pena de 15 años de prisión.
El Tribunal Oral Federal 1 de La Plata, dirigido por el juez Pablo Vega -quien actúa en forma unipersonal, conforme a la Ley 27.307- dará a conocer su veredicto el próximo miércoles.
La causa
Manacorda llegó a este debate oral, que comenzó el pasado 29 de septiembre, acusada de falsear en 1978 una partida de nacimiento para que un militar de inteligencia y su esposa registraran como propia a la hija de Juan Oscar Cugura y Olga Noemí Casado, nacida en cautiverio. La maniobra permitió la sustitución de la identidad y la retención y el ocultamiento de la víctima durante 30 años, dado que fue registrada como hija de un militar de inteligencia y de su esposa.
Según la acusación fiscal, a través de la suscripción de la constatación de nacimiento o Formulario N° 1, Manacorda “prestó una ayuda indispensable para la retención y ocultamiento de la hija recién nacida de la pareja Casado Cugura, desde el día 10 de febrero de 1978, en que se labró hasta el día 21 de agosto de 2008”, fecha en que la víctima conoció su verdadero origen.
Manacorda fue acusada durante el juicio por los delitos de retención y ocultamiento de un menor de 10 años en concurso real con los delitos de alteración del estado civil y falsedad ideológica de instrumento público.
Además, los representantes del Ministerio Público enmarcaron el crimen en el plan sistemático de apropiación de niños y niñas ejecutado durante el terrorismo de Estado y recurrieron a jurisprudencia de tribunales internacionales para calificarlo de “forma concurrente o acumulativa” como “crimen de genocidio y delitos de lesa humanidad”. También brindaron testimonio hoy la abuela materna Emilce Noemí Flores de Casado, integrante de Abuelas de Plaza de Mayo; la tía paterna Ana María Cugura y el primo de Silvia, Mario Cugura, quienes dieron detalles sobre el embarazo que cursaba Olga Casado al momento de ser secuestrada.
El caso
Olga Casado era enfermera y fue secuestrada el 22 de noviembre de 1977 cuando cursaba su séptimo mes de embarazo. El procedimiento fue perpetrado en un departamento de la calle 54 N° 1271, a solo media cuadra de donde estaba situado el Regimiento 7 de Infantería.
En esa oportunidad también fueron capturadas María Teresa Calderoni -única sobreviviente-, Nora Formiga y Elena Arce, estas dos últimas también asesinadas, sepultadas como NN y luego identificadas por el EAAF. Todas fueron trasladadas al centro clandestino de detención La Cacha, ubicado junto al complejo penitenciario de Olmos, en una zona suburbana del oeste del partido de La Plata.
Por testimonios de sobrevivientes, se sabe que en enero del ‘78 Olga Casado fue trasladada al centro clandestino Puesto Vasco, en Quilmes, y que luego fue regresada a La Cacha.
La identidad biológica de la víctima se pudo establecer luego de que la justicia federal de La Plata ordenara un allanamiento al domicilio donde vivía en Santiago del Estero, para secuestrar elementos personales que permitieran extraer material genético. El ADN obtenido fue comparado con las muestras alojadas en el Banco Nacional de Datos Genéticos y el peritaje dio como resultado que la mujer, de entonces 30 años de edad, es la hija de Olga Noemí Casado y Juan Oscar Cugura, militantes de la organización Montoneros que fueron asesinados durante la última dictadura en La Plata.
La niña fue inscripta el 2 de marzo de 1978 en una sede del Registro Provincial de las Personas en La Plata. El militar que la inscribió como hija propia, Esteban Santillán (fallecido), revistaba por entonces en el Batallón 601 de Inteligencia del Ejército. Su esposa, Celia Beatriz Ger, estuvo imputada en la causa -hasta su fallecimiento reciente- junto a Manacorda. El trámite de inscripción de la niña como hija de ambos fue posible gracias a la constatación extendida por la médica de policía.
El documento decía que la niña había nacido el 10 de febrero de aquel año en la casa 27 del barrio de suboficiales del “RI7”, situada en la calle 54, entre 19 y 20, es decir, en el Regimiento 7 de Infantería de La Plata -sede de la jefatura del área militar 113, responsable de las operaciones de la represión ilegal en la zona- y en la que no había ningún centro de salud.
La pertenencia de Santillán a la inteligencia castrense, la firma de Manacorda en el documento y el lugar de nacimiento fueron tres indicios que fundaron las sospechas en el comienzo de la investigación.
Santillán actuó en Tucumán en 1975 y luego cumplió servicios en el Batallón 601 de Inteligencia bajo el mando del también fallecido coronel Alejandro Agustín Arias Duval, quien estuvo a cargo del Destacamento 101 de Inteligencia de La Plata.
El centro clandestino La Cacha -donde estuvo secuestrada Olga Casado, madre de la niña- funcionaba bajo el control de esa unidad militar, que además estaba encargada de las tareas de espionaje en la región, en el marco de la represión ilegal.#
Por Dario Roberts / @darioroberts
Tras varias semanas de juicio, el próximo miércoles 18 de octubre, el Tribunal Oral Federal 1 de La Plata dictará veredicto en el proceso a Nora Manacorda, una exmédica de la Policía bonaerense acusada de haber falsificado una partida de nacimiento para que un militar registrara como propia a la hija de Olga Noemí Casado, quien dio a luz en un centro clandestino de detención y luego fue asesinada.
Casado fue secuestrada durante la última dictadura militar al igual que su pareja, el chubutense Juan Cugura, y ambos fueron desaparecidos en primera instancia, y luego asesinados y sepultados como NN en un cementerio de esa ciudad bonaerense.
Manacorda ya fue condenada por un delito similar en perjuicio de otro niño apropiado y ya restituido, Sebastián Casado Tasca, y actualmente está con arresto domiciliario debido a que padece problemas de salud.
La mujer, quien en la actualidad tiene 67 años, está ahora imputada por confeccionar un acta de nacimiento falsa para ocultar la identidad de la hija de Olga Noemí Casado y Juan Oscar Cugura, ambos asesinados durante la última dictadura militar.
A Nora Raquel Manacorda se la acusa de haber facilitado la apropiación de Silvia Cugura Casado, hija de una pareja secuestrada y asesinada durante la última dictadura, quien recuperó su identidad recién en agosto de 2008, tras varios años de vivir junto a sus apropiadores en Santiago del Estero.
Pedidos de condena
Los fiscales Hernán Schapiro y Juan Martín Nogueira pidieron al Tribunal Oral Federal 1 de La Plata que se condene a Manacorda a la pena de 14 años de prisión tras considerarla responsable de la falsedad ideológica que permitió en 1978 la apropiación de la hija nacida en cautiverio de Olga Noemí Casado y Juan Oscar Cugura, militantes políticos secuestrados y asesinados durante la última dictadura.
Por su parte, el abogado Emanuel Lovelli, en representación de la querella de Abuelas de Plaza de Mayo, pidió la condena de la imputada a una pena de 15 años de prisión.
El Tribunal Oral Federal 1 de La Plata, dirigido por el juez Pablo Vega -quien actúa en forma unipersonal, conforme a la Ley 27.307- dará a conocer su veredicto el próximo miércoles.
La causa
Manacorda llegó a este debate oral, que comenzó el pasado 29 de septiembre, acusada de falsear en 1978 una partida de nacimiento para que un militar de inteligencia y su esposa registraran como propia a la hija de Juan Oscar Cugura y Olga Noemí Casado, nacida en cautiverio. La maniobra permitió la sustitución de la identidad y la retención y el ocultamiento de la víctima durante 30 años, dado que fue registrada como hija de un militar de inteligencia y de su esposa.
Según la acusación fiscal, a través de la suscripción de la constatación de nacimiento o Formulario N° 1, Manacorda “prestó una ayuda indispensable para la retención y ocultamiento de la hija recién nacida de la pareja Casado Cugura, desde el día 10 de febrero de 1978, en que se labró hasta el día 21 de agosto de 2008”, fecha en que la víctima conoció su verdadero origen.
Manacorda fue acusada durante el juicio por los delitos de retención y ocultamiento de un menor de 10 años en concurso real con los delitos de alteración del estado civil y falsedad ideológica de instrumento público.
Además, los representantes del Ministerio Público enmarcaron el crimen en el plan sistemático de apropiación de niños y niñas ejecutado durante el terrorismo de Estado y recurrieron a jurisprudencia de tribunales internacionales para calificarlo de “forma concurrente o acumulativa” como “crimen de genocidio y delitos de lesa humanidad”. También brindaron testimonio hoy la abuela materna Emilce Noemí Flores de Casado, integrante de Abuelas de Plaza de Mayo; la tía paterna Ana María Cugura y el primo de Silvia, Mario Cugura, quienes dieron detalles sobre el embarazo que cursaba Olga Casado al momento de ser secuestrada.
El caso
Olga Casado era enfermera y fue secuestrada el 22 de noviembre de 1977 cuando cursaba su séptimo mes de embarazo. El procedimiento fue perpetrado en un departamento de la calle 54 N° 1271, a solo media cuadra de donde estaba situado el Regimiento 7 de Infantería.
En esa oportunidad también fueron capturadas María Teresa Calderoni -única sobreviviente-, Nora Formiga y Elena Arce, estas dos últimas también asesinadas, sepultadas como NN y luego identificadas por el EAAF. Todas fueron trasladadas al centro clandestino de detención La Cacha, ubicado junto al complejo penitenciario de Olmos, en una zona suburbana del oeste del partido de La Plata.
Por testimonios de sobrevivientes, se sabe que en enero del ‘78 Olga Casado fue trasladada al centro clandestino Puesto Vasco, en Quilmes, y que luego fue regresada a La Cacha.
La identidad biológica de la víctima se pudo establecer luego de que la justicia federal de La Plata ordenara un allanamiento al domicilio donde vivía en Santiago del Estero, para secuestrar elementos personales que permitieran extraer material genético. El ADN obtenido fue comparado con las muestras alojadas en el Banco Nacional de Datos Genéticos y el peritaje dio como resultado que la mujer, de entonces 30 años de edad, es la hija de Olga Noemí Casado y Juan Oscar Cugura, militantes de la organización Montoneros que fueron asesinados durante la última dictadura en La Plata.
La niña fue inscripta el 2 de marzo de 1978 en una sede del Registro Provincial de las Personas en La Plata. El militar que la inscribió como hija propia, Esteban Santillán (fallecido), revistaba por entonces en el Batallón 601 de Inteligencia del Ejército. Su esposa, Celia Beatriz Ger, estuvo imputada en la causa -hasta su fallecimiento reciente- junto a Manacorda. El trámite de inscripción de la niña como hija de ambos fue posible gracias a la constatación extendida por la médica de policía.
El documento decía que la niña había nacido el 10 de febrero de aquel año en la casa 27 del barrio de suboficiales del “RI7”, situada en la calle 54, entre 19 y 20, es decir, en el Regimiento 7 de Infantería de La Plata -sede de la jefatura del área militar 113, responsable de las operaciones de la represión ilegal en la zona- y en la que no había ningún centro de salud.
La pertenencia de Santillán a la inteligencia castrense, la firma de Manacorda en el documento y el lugar de nacimiento fueron tres indicios que fundaron las sospechas en el comienzo de la investigación.
Santillán actuó en Tucumán en 1975 y luego cumplió servicios en el Batallón 601 de Inteligencia bajo el mando del también fallecido coronel Alejandro Agustín Arias Duval, quien estuvo a cargo del Destacamento 101 de Inteligencia de La Plata.
El centro clandestino La Cacha -donde estuvo secuestrada Olga Casado, madre de la niña- funcionaba bajo el control de esa unidad militar, que además estaba encargada de las tareas de espionaje en la región, en el marco de la represión ilegal.#