"Hay una presión social que exige dureza. Ya nos pasó antes: con (Juan Carlos) Blumberg, con (Carlos) Ruckauf o con (Alejandro) Granados prometiendo balas”, sostuvo Fernández Meijide en declaraciones a radio Ciudad.
La ex ministro de Desarrollo Social durante el gobierno de Fernando De la Rúa dijo entender el "dolor, la desesperación y las ganas de justicia con respecto a los padres de las criaturas que fueron muertas”, pero advirtió que "toda la dirigencia tenemos que preguntarnos qué hicimos con estos chicos y por qué cada vez son más".
"Si no (lo hacemos), vamos a terminar haciendo más cárceles que escuelas”, indicó Fernández Meijide y se preguntó “dónde están los institutos especiales que den afecto, cuidado, contención y guía a los jóvenes y que no sean un castigo, porque hoy los jóvenes salen de ahí mejor preparados para el delito”.
“Hoy, los ‘ni ni ni’ ni estudian, ni trabajan ni buscan trabajo, y consiguen estas salidas horribles donde ellos también arriesgan su vida”, señaló y propuso "cuidar a los chicos desde que nacen".
Por último, la ex legisladora insistió ne la necesidad de "planificar un cambio estructural en la educación" y que "las salitas de tres años estén en los barrios más pobres, con los mejores maestros formados de la mejor manera y sostenidos por el Estado para enfrentar las dificultades que tienen que enfrentar”.
"Hay una presión social que exige dureza. Ya nos pasó antes: con (Juan Carlos) Blumberg, con (Carlos) Ruckauf o con (Alejandro) Granados prometiendo balas”, sostuvo Fernández Meijide en declaraciones a radio Ciudad.
La ex ministro de Desarrollo Social durante el gobierno de Fernando De la Rúa dijo entender el "dolor, la desesperación y las ganas de justicia con respecto a los padres de las criaturas que fueron muertas”, pero advirtió que "toda la dirigencia tenemos que preguntarnos qué hicimos con estos chicos y por qué cada vez son más".
"Si no (lo hacemos), vamos a terminar haciendo más cárceles que escuelas”, indicó Fernández Meijide y se preguntó “dónde están los institutos especiales que den afecto, cuidado, contención y guía a los jóvenes y que no sean un castigo, porque hoy los jóvenes salen de ahí mejor preparados para el delito”.
“Hoy, los ‘ni ni ni’ ni estudian, ni trabajan ni buscan trabajo, y consiguen estas salidas horribles donde ellos también arriesgan su vida”, señaló y propuso "cuidar a los chicos desde que nacen".
Por último, la ex legisladora insistió ne la necesidad de "planificar un cambio estructural en la educación" y que "las salitas de tres años estén en los barrios más pobres, con los mejores maestros formados de la mejor manera y sostenidos por el Estado para enfrentar las dificultades que tienen que enfrentar”.